Mostrando entradas con la etiqueta YeTeuk. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta YeTeuk. Mostrar todas las entradas

sábado, 5 de abril de 2014

Random Dance

Random Dance

            Cuando íbamos a los programas de entretenimiento y YeSung comenzaba a bailar como si le hubiera dado el mal del sambito, hacía como que estaba avergonzado por su comportamiento, ya que era uno de los mayores y tenía que aprender a dejar de hacer eso. Pero la realidad era otra muy distinta.

            Me encantaba cómo parecía que todos los miembros de su cuerpo iban a salir volando en cualquier momento por aquellos bailes extraños, de hecho me fascinaba cómo estos podían moverse tan libremente, al igual que me fascinaba su flexibilidad y las cosas extrañas que hacía para ser más flexible. Desde que habíamos hecho el programa ‘Explorando el Cuerpo Humano’ siempre quiso probar que realmente era bastante flexible y por eso, nos hallábamos así.

            Estábamos solos en el apartamento. Algo raro, ya que éramos el ciento y la madre y nunca podíamos obtener ningún momento a solas, pero había habido un milagro y todos los demás estaban en el otro apartamento, viendo una película de humor que nosotros pasamos convenientemente de ver.

            JongWoon se había desnudado completamente y hacía unos estiramientos propios de los atletas de suelo antes de ponerse a dar volteretas como locos. Yo, por mi parte, tenía un libro que me había tirado minutos antes al regazo entre las manos y lo ojeaba lentamente, poniendo caras más raras a medida que avanzaba y veía los dibujos tan extraños que había impresos.

            ―¿De verdad quieres intentar hacer alguna postura del kamasutra? ―pregunté sin poder contenerme. Él asintió―. ¿Segurísimo?
            ―Sí, JunSoo.
            ―Bueno… ―dejé el libro sobre la mesita de noche y me desnudé, tirando la ropa por cualquier lado―. ¿A qué esperamos?
            ―Un momento ―pidió―. Primero tengo que hacerte tu baile.

            Comencé a reír escandalosamente antes incluso de que comenzara a moverse de una forma completamente aleatoria, acercándose cada vez más y más hasta donde yo estaba. Unos momentos después, caía sobre la cama, mareado y yo me acercaba a él hasta poder besar sus labios y comenzar la noche de una vez.