Chapter Eight
Pensar y dar vueltas
a las cosas se había convertido en lo único que InSeong había comenzado a hacer
más que cualquier otra cosa en los últimos tiempos y eso que antes ya le había
dedicado mucho tiempo a pensar en todo lo que le sucedía en la vida. Sin
embargo, desde la llegada de Park SeungJun a su vida, pensar se había
convertido en una rutina de la que el chico no podía escapar... no podía
escapar porque tenía demasiados pensamientos a la vez a los que les debía de
poner algún tipo de orden sino quería volverse completamente majara, mucho más
desde aquel día en el hospital, aquel día en el que SeungJun le había declarado
sus sentimientos, lo había besado y luego habían dormido el uno junto al otro.
InSeong tenía muchísimo que pensar sobre aquello, sobre el por qué ninguna de
las cosas que habían sucedido lo había desagradado o escamado, pensar en el por
qué no quería matar a SeungJun, en vez de seguir preocupado por su maldito
estado de salud.