Sunday funday
MinHo se despertó esa mañana debido
a la insistencia de unos labios que estaban en todas partes y a la vez en
ninguna de su rostro, dejando besos rápidos en intervalos de tiempo corto. La
sonrisa que se extendió por su rostro antes de bostezar y alzar sus brazos para
espachurrar a JiSung probablemente fue la más feliz que había cruzado su rostro
en los últimos años. JiSung acabó protestando en sus brazos, tratando de
soltarse porque lo estaba dejando sin aire de lo fuerte que lo estaba
abrazando, pero MinHo no lo soltó hasta un buen rato después, cuando por fin
abrió los ojos y vio el rostro del menor a escasos centímetros del suyo. MinHo
le dedicó una sonrisa que JiSung le devolvió de forma inmediata y no pudo
evitar pensar en que quería algo como aquello todos los días de su vida… aunque
probablemente fuera imposible, ya que, tarde o temprano, JiSung tendría que
volver. El fin de semana se acababa para ambos ese día… pero no quiere que sea
un día triste cuando ha empezado de forma tan increíble.