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sábado, 18 de enero de 2020

[One Shot] It’s RAINZing men… Hallelujah!: 好きなんて (I love you) {EunMin}


Título: きなんて (I love you)
Autora: Riz Aino
Parejas: EunMin (Hong EunKi + Byun HyunMin) (RAINZ)
Calificación: PG
Géneros: AU, romance, humor, fluff
Número de palabras: 1.173 palabras
Resumen: en el último entrenamiento, HyunMin no controla su cuerpo de la forma indicada y acaba cayendo al suelo y rompiéndose el brazo.
Notas: fanfic escrito para el día 19 del Inktober, cuya palabra era “sling” y yo la tomé como “cabestrillo”, el coso este que te ponen para que no muevas el brazo cuando te lo rompes.
Comentario de autora: tuve una temporada en la que tenía mil ganas a todas horas de escribir cosas de deportes y hacer esto me quitó el gusanillo, aunque me gustaría escribir mil cosas más de deportes. Espero que os guste.

きなんて
(I love you)

            —Creo que no he conocido a nadie más idiota en mi vida —comentó EunKi, sentándose sobre la cama en la que estaba HyunMin. El chico lo miró mal, obviamente—. Es que… ¿cómo se puede uno romper el brazo con ese ejercicio tan fácil?
            —EunKi… —murmuró HyunMin—. Vete un ratito a la mierda, anda.

martes, 1 de enero de 2013

Mi Primer Beso


Mi Primer Beso


   -¨¿Cuándo y con quién fue tu primer beso?”

   Ésa fue la pregunta que me hizo recordar mi pasado.

   -“Fue en Explorando el Cuerpo Humano, con EunHyuk, en el capítulo de la piscina.”

   Ésa fue mi respuesta en el programa, pero allí había dos personas que sabíamos que esa respuesta no era del todo cierta, porque, la persona sí era la correcta; pero no el momento, el momento fue antes, fue mucho antes…

   Compartía habitación con la persona más pervertida que había conocido en toda mi vida, Lee HyukJae. Éramos buenos amigos, pero él no entendía muy bien eso de que yo quería ser un adolescente inocente un poco más de tiempo. Un día, me dejé llevar, le hice caso, y dejé de ser inocente.

   -Me gustaría experimentar algo- dijo tumbado en su cama.
   -¿El qué?- pregunté.
   -Me gustaría dar mi primer beso y así saber qué es lo que se siente…
   -A mí también- reconocí- siento algo de curiosidad- él se alzó un poco de la cama apoyándose sobre los codos.
   -¿Qué te parecería si experimentamos?- sugirió.

   Y esa fue mi perdición. En el momento en el que nuestros labios se rozaron dejé de ser inocente para siempre, y comencé mi época de experimentación.

   Ahora que lo pienso, nunca hubo sentimientos más allá de una buena amistad, sólo era una mera experimentación de un par de adolescentes hormonados y calientes que pasaban sus días y noches juntos.

   Él guarda todas mis primeras veces… y yo guardo todas las suyas.

   Lo que yo había dicho en el programa era una verdad a medias, pero no se podía conocer toda la verdad, porque lo que pasó en el dormitorio, no salió de él… y nunca saldrá.