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jueves, 21 de julio de 2016

[One Shot] Destiny {KrisKai}

Título: Destiny
Autora: Mrs. Daisy (Riz Aino / Minako Aino)
Parejas: KrisKai (Kris x Kai) (EXO)
Clasificación: R
Géneros: ReyArturo!AU, fantasía histórica, drama, romance
Número de palabras: 5.860 palabras
Resumen: desde que Arturo sacó aquella espada de la piedra y se convirtiera en rey, Kai se ha sentido muy solo y obtiene la compañía que anhela en Kris, el hijo del herrero.
Dissclaimer: el mundo en el que está ambientada esta historia no me pertenece, le pertenece a Geoffrey de Monmouth, la primera persona en poner por escrito la leyenda del Rey Arturo en el siglo X, en su libro Historia Regum Britanniae.
Notas: pitch-hit para la Tercera Gala de Doce Dioses, en el reto literario.
Aclaraciones: esta historia está basada en la leyenda del Rey Arturo, aunque no tendrá que ver con la historia original, sino que es una historia aparte de uno de los personajes secundarios de esta, Kay, el hijo de sir Héctor, y quien vivió parte de su infancia y adolescencia como hermano de Arturo.
Comentario de autora: siempre me ha interesado muchísimo la historia del Rey Arturo, soy de estas personas que han leído quizás demasiado sobre el tema y, algún día, quería hacer algo con este interés. Cuando vi que tenía la oportunidad de poder ayudar con esta gala, no lo pensé y rápidamente me lancé a escribir sobre este tema. Espero que os guste.


Destiny


            La Historia se hace sobre los héroes, sobre los grandes reyes y sobre los enormes imperios que se construyen bajo su mandato; se hace Historia sobre las batallas, sobre las leyes y sobre los cambios. Todo el mundo conoce la Historia del Rey Arturo, cómo sacó la espada de la piedra para poder convertirse en monarca y cómo, ayudado por Merlín, creó un reino en el que hubo paz y prosperidad.

lunes, 11 de agosto de 2014

Eternal Love

Título: Eternal Love
Pareja: KrisKai (Kris x Kai) (EXO)
Clasificación: G
Géneros: AU, lobos, romance
Número de palabras: 1.265 palabras
Resumen: YiFan es el único en la manada que aún no ha encontrado una pareja estable y se siente solo.
Notas: sí, lo sé, es muy random, pero quería escribir algo sobre lobos.
Comentario de autora: he querido probar un nuevo estilo de narración, no sé cómo habrá quedado, pero ahí lo dejo. Espero que os guste ^^


Eternal Love


            YiFan a veces se siente un poco solo. La manada es grande y tiene bastantes miembros, pero aun así no puede evitar tener aquellos sentimientos de soledad, ya que es el único de ellos que aún no ha encontrado una pareja estable. Hace, al menos, cinco años que la busca entre los miembros de la manada, pero ninguno de ellos le ha llamado lo suficiente la atención como para ser su pareja de por vida. Las mujeres no existen en su comunidad, estas prefieren otros lugares para vivir, por lo que solo hay machos entre los que buscar un compañero.

            Los hombres —y mujeres—, lobo no pueden reproducirse, así que, generalmente el gen es transmitido a través de su mordedura y, como si fuera una enfermedad, se va extendiendo por todas las células del cuerpo infectado, haciendo que este cambie; por eso, nunca le ha preocupado reproducirse para continuar con la especie. Pero en los últimos tiempos, todo ha cambiado y ya no quiere sentirse tan solo porque aunque los demás siempre tengan un poco de tiempo para él YiFan solo sabe que molesta y entorpece las relaciones de los demás miembros de la manada.

            SuHo, el macho alfa, le ha dicho en varias ocasiones que si quiere encontrar a alguien con quien pasar el resto de sus días simplemente tiene que dejar la manada un tiempo y buscar en las otras. Tienen buenas relaciones con la mayoría de ellas y no sería ningún problema, pero YiFan se ha vuelto muy dependiente de su manada y no quiere dejarlos por nada del mundo. Pero SuHo está cansado de que uno de sus mejores lobos se pase los días como alma en pena en la búsqueda infructuosa de pareja, por lo que un día como cualquier otro, le da un ultimátum.

            “Sal ahí fuera y no regreses hasta que no hayas encontrado a tu media naranja” le dice y, después, hace gala de sus poderes de alfa para que YiFan no pueda desobedecer su voluntad.

            No lo ha echado de la manada, simplemente tiene que encontrar a su pareja para poder volver con todo aquello que conoce desde que fue convertido en hombre lobo, hace más de dos décadas; pero YiFan se siente como si ya no perteneciera a esta.

            Deambula por el bosque que le es tan conocido como la palma de su propia mano hasta que abandona el territorio que le pertenece a su manada y entra en el de la vecina. Tiene buenas relaciones con un par de miembros de esta y asume que podría quedarse con ellos mientras busca alguna pareja en esta manada, lo que YiFan no sabe es que hace tiempo que esas dos personas se volvieron pareja de por vida y no es muy bien recibido en su cueva. LuHan le echa una mirada asesina y, aunque ChanYeol le sonría, sabe que tampoco lo quiere allí.

            No pasa ni una semana cuando YiFan entiende que en aquel lugar no va a encontrar lo que busca y se va sin despedirse de los otros dos porque, de todas formas, no lo van a echar de menos.

            Hace tiempo que YiFan no se transforma en lobo, desde la anterior luna llena. Generalmente no lo hace porque después le duelen los huesos y solo las situaciones desesperadas hacen que se transforme a placer, pero en ese momento, lo único que quiere es sentir la hierba y la tierra bajo sus almohadilladas patas y el olor de todos los seres vivos del bosque en sus fosas nasales.

            Así que, cambia.

            El corpulento hombre va desapareciendo poco a poco para transformarse en un lobo enorme con pelaje dorado. Su nariz y su boca se alargan formando el morro, sus orejas suben hasta la parte superior de su cabeza y se deja caer al suelo sobre cuatro patas. YiFan necesita unos minutos para acostumbrarse a su nuevo cuerpo y en cuanto lo hace, comienza a correr.

            No sabe cuánto tiempo lleva corriendo, pero no le importa. Es una forma de liberar toda aquella frustración que siente por no encontrar a su pareja, una forma de menguar sus pensamientos sobre su soledad entreteniéndose en ir hacia delante, concentrándose en no chocar contra ninguno de los árboles. Sin embargo, hay un momento en el que se detiene. Ha captado un olor dulce y suave que lo atrae.

            El olor de un lobo.

            YiFan corre en la dirección de la que proviene ese rastro y lo sigue. Su corazón está acelerado y sabe que no es por la carrera, todos sus poros le dicen que es él, que lo ha encontrado, que ya no tendrá que vagar más tiempo solo por el bosque.

            Solo se detiene cuando entre los troncos de los árboles aprecia la figura de un lobo de pelaje color canela que mira fijamente en su dirección. YiFan está agotado por todo lo que ha corrido, pero se fuerza a avanzar los metros que le quedan hasta aquel lobo que lo observa, como si él también sintiera que YiFan fuera su pareja de por vida. Se acerca hasta quedar a un metro de distancia, pero se queda ahí, intentando recobrar el aliento y esperando a que el otro lobo haga algún movimiento.

            “¿Quién eres?” es la primera pregunta que escucha en su mente. La voz es grave, pero a la vez suave y lo atrae “¿Por qué siento la necesidad de acercarme a ti?”

            En ese momento, YiFan entiende que el lobo es muy joven, quizás lo hayan convertido hace pocos meses. No huele a ninguna manada, por lo que no ha recibido la información que necesita y lo admira por haber sido capaz de sobrevivir sin conocimientos. Pero también se siente un poco triste porque eso significa que quien lo convirtió, lo abandonó a su suerte.

            “Mi nombre es YiFan” contesta “y te sientes así porque acabas de encontrar a tu pareja de por vida”.
            “¿Qué significa eso?” cuestiona, con algo de recelo y YiFan se acerca un poco a él para rozar su morro contra el cuello del lobo más pequeño, con infinito cariño.
            “Significa que no estarás solo nunca más” responde, sintiendo un murmullo encantado por su acción “¿cómo te llamas?”
            “JongIn”.
            “No te preocupes, JongIn” murmura “te iré explicando todo lo que no entiendas poco a poco, pero necesito que vengas conmigo, junto a mi manada”.
            “¿Cómo sé que puedo confiar en ti?”
            “¿Qué te dicen tus sentidos?”
            “Que no puedes alejarte de mí o me volveré loco” YiFan esboza una sonrisa lobuna y deja de acariciar su cuello para mirar sus hermosos ojos castaños.
            “Entonces sígueme”.

            YiFan echa a andar y JongIn lo sigue inmediatamente. El lobo dorado se siente inexplicablemente feliz y completo. Sabe que el otro es su pareja de por vida porque jamás se ha sentido así y, aunque tenga que explicarle a JongIn todo lo que no sabe de su vida como lobo, aunque tenga que esperar a que se vaya acostumbrando y a que lo acepte como pareja, YiFan sabe que merecerá la pena porque ya no estará nunca más solo.

            Ahora tiene a JongIn.


jueves, 27 de marzo de 2014

Sex-Symbols

Sex-Symbols

            Sex-Symbols. Así era como nos llamaban muchas de nuestras fans. Robábamos muchos corazones solo con una mirada y los destrozábamos con un movimiento de caderas o con un guiño. Sin embargo, a muy pocas les gustaba que nos acercáramos demasiado el uno al otro, decían que era demasiada perfección junta y que no podían vivir si estábamos más cerca de un par de miembros de distancia.

            Cuando estábamos en casa, la realidad era muy distinta. Me gustaba mucho quedarme dormido sobre las piernas de Kris hyung, mientras él mesaba mi cabello y acariciaba mi espalda como si fuera un cachorro del que estaba cuidando.

            Me gustaba mucho que me tratara así, porque yo era al único al que trataba de aquella manera y me sentía muy especial por ello.

            ―JongIn-ah ―me llamó. Abrí mis ojos perezosamente.
            ―Hum…
            ―Es tarde, vamos a dormir.
            ―Mmm… No quiero… ―murmuré.
            ―C’mon, baby ―me dio unos golpecitos en el trasero, pero yo no me levanté.
            ―No… ―me giré para quedar bocarriba y él se inclinó hacia delante, besando mi frente.
            ―Venga, o te estaré dando besos hasta que te levantes ―amenazó.
            ―Me da igual ―susurré.

            Kris hyung comenzó a darme besos por toda la cara y yo no me resistí a ninguno de ellos, ni siquiera al que me dio cerca de la comisura de mis labios y menos aún al que me dio sobre estos, es más, el último se lo devolví con una gran sonrisa.

            ―Viendo que los besos no funcionan ―susurró contra mi boca―. ¿Qué tal dejarte sin ellos si no te levantas?
            ―No, ya me levanto ―rápidamente me incorporé, escuchando cómo se reía.

            En cuanto paró de reír nos miramos fijamente a los ojos y nos volvimos a acercar al rostro del otro para tomar los labios ajenos de nuevo, esta vez de una forma lenta y pausada, saboreándonos el uno al otro. Al separarnos no lo hicimos más de unos centímetros y reímos quedamente sobre los labios del otro antes de separarnos del todo y cada uno ir a su habitación.

            Realmente no éramos los sex-symbols que todas creían, más bien yo pensaba en nosotros como un par de tontos enamorados.