Over the Top
La cama contenía a dos chicos
desnudos que acababan de experimentar el tercer orgasmo de la noche. Estaban
cansados y adoloridos, pero llevaban demasiado tiempo sin verse y se habían
cogido con ganas. ChanHee llevaba tantos días soñando con poder estar de nuevo
entre las piernas de ByungHun que creía que seguía estando en uno, porque no
podía ser tan perfecto como había sido.
El chico sintió unos besos como
roces de mariposa ascendiendo por su brazo hasta llegar a su cuello y sonrió.
Le encantaba cuando su chico se ponía así de cariñoso y de adorable porque
normalmente no era capaz de expresar sus sentimientos correctamente por su
constante inseguridad a la hora de hacer algo. Por eso ChanHee acogió el geste
perfectamente y se tumbó de lado para poder atrapar los labios que recorrían su
cuello con los propios y darle un dulce beso que le respondía a las caricias
recibidas y los sentimientos derramados en ellas.
Poco a poco, con besos dulces y
roces delicados, volvieron a encenderse mutuamente y aunque al día siguiente
tenían que madrugar, no les importaba quedarse una noche despiertos, sintiendo
el calor de la otra persona su lado, explorando el cuerpo ajeno una y otra vez,
diciéndose “te quieros” sin palabras, solo con acciones, que son las que los
hacen más sinceros y sintiendo que juntos estaban más allá de todo, por encima
de lo material, sobre el cielo, donde nadie los podía juzgar.