Mostrando entradas con la etiqueta Capítulo 16. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Capítulo 16. Mostrar todas las entradas

jueves, 22 de enero de 2015

EXO 3ªTemporada

Capítulo 16
Regalo


            Llevábamos demasiado tiempo sin estar completamente solos, demasiado tiempo sin poder tocar nuestros cuerpos, por lo que no me resistí nada cuando vi la mirada brillante de YiFan, deseoso de mi cuerpo. Con rapidez nos metimos en su habitación porque no queríamos que nadie nos interrumpiera y cerramos el pestillo mientras nos besábamos, hambrientos de mucho más.


jueves, 10 de octubre de 2013

EXO

Capítulo 16
Ayuda


   No podía parar de dar vueltas en la cama. Ya era hora de levantarme, pero eso quería decir que ya era Domingo y que al día siguiente era el cumpleaños de MinSeok y yo no le había podido comprar nada. Era completamente increíble. Llevábamos dos años compartiendo habitación y este, precisamente este es el año en el que se me olvidaba.

   No podía poner como excusa lo de los poderes, porque ya nos habíamos acostumbrado a ellos, de hecho, no tenía ninguna excusa y además, tenía que regalarle algo. No solo era mi amigo si no que él era… ¿Qué era MinSeok para mí?

   Cerré mis ojos, completamente frustrado por todo y me dispuse a seguir durmiendo, aunque aquello no mejorara mi situación, sino que la empeoraba. Sin embargo, no pude hacer nada porque mi teléfono móvil comenzó a sonar Paradise – Infinite y tuve que cogerlo al ver el nombre en la pantalla.

   -¿Ha pasado algo, YiXing?- pregunté.
   -Después de comer, venid al piso, hay algo importante que debéis saber- fue lo único que dijo antes de colgar.

-oooOOOooo-

   Corrí sin importarme nada. No sabía a donde iba, pero ¿qué más daba? Habían matado a mi mejor amigo delante de mis narices, lo habían matado las personas que supuestamente eran aliadas. Dejé que mis lágrimas cayeran como cascadas desde mis ojos, ignorando a la gente que me miraba con lástima cuando pasaba por su lado.

   Solo detuve mi carrera cuando sentí que no podía más. Me incliné, apoyándome sobre mis rodillas para recuperar el aliento y miré a mi alrededor, intentando averiguar dónde estaba. Abrí los ojos como platos al darme cuenta del lugar en el que había acabado. ¿Por qué mis piernas se habían detenido justo en la puerta de la casa de JunMyeon hyung?

   Dudé unos segundos, pero decidí darme la vuelta y caminar los pocos metros que restaban hasta mi casa. Sin embargo, antes de que pudiera dar un paso, la puerta de la casa de JunMyeon se abrió y mi amigo salió por ella, quedándose de piedra al verme.

   -K…KyungSoo… ¿qué te ha pasado?- caminó hacia mí hasta que quedó a apenas un paso- ¿pasó algo con RyeoWook?

   Escuchar su nombre hizo que mis emociones volvieran a aflorar. Los ojos se me aguaron de nuevo, sin embargo, ahora no estaba solo.

   -Hyung- solo pude hacer salir de mi garganta un sonido ahogado y él inmediatamente me abrazó.
   -Estoy aquí…- susurró- no pasa nada… hyung no dejará que te pase nada…

-oooOOOooo-

   -¿Por qué estamos aquí?- preguntó JongDae de una forma que me irritó, aunque todo lo que hacía me irritaba.
   -Hay algo que tenemos que contaros- dijo YiXing a mi lado.
   -¿Qué?- preguntó LuHan, cruzándose de brazos. Él también me irritaba mucho.
   -Es algo que ha pasado hoy- contestó YiXing de nuevo.
   -¿Os ha atacado algún enemigo?- preguntó Tao preocupado y yo negué.
   -Era un enemigo, pero no nos ha atacado- respondí.
   -No lo entiendo- dijo MinSeok.
   -El enemigo resultó ser un amigo mío- contesté- al igual que la otra vez fue un chico que YiXing conocía, sin embargo el encuentro fue distinto.
   -¿Qué pasó?- preguntó Tao.
   -Nos dio información valiosa.
   -¿Información valiosa?- dijo incrédulo JongDae- ¿y si era una trampa?
   -Nos informó acerca de los planes del enemigo.
   -¿Qué planes?- preguntó LuHan.
   -Los ataques se irán sucediendo hasta que desarrollemos más nuestros poderes- contesté- a ÉL le gusta jugar y no nos quiere destruir sin que estos estén restablecidos.
   -¿Por qué?- preguntó MinSeok.
   -Porque necesita tener la satisfacción de habernos destruido de nuevo cuando estábamos en plena forma.

-oooOOOooo-

   Estaba tranquilamente tumbado en mi cama cuando mi móvil comenzó a sonar Love – CNBLUE, el tono que le había asignado a LuHan. Rápidamente me lancé a cogerlo del escritorio, sobresaltando a JongIn en el proceso.

   -LuHan- dije al descolgar.
   -Hunnie, escúchame bien porque no tengo mucho tiempo- dijo seriamente al otro lado de la línea.
   -Te escucho.
   -Quiero que nos encontremos el Sábado para hablar.
   -¿Esta semana no vamos a poder…?
   -No, lo siento, esta semana es imposible.
   -LuLu…
   -Lo siento, cariño, pero no podemos ser tan descuidados, ¿vale?
   -Sí.
   -Nos vemos el Sábado, mismo lugar, misma hora.

-oooOOOooo-

Entré en mi habitación justo cuando LuHan salía de ella, jugueteando con su móvil. Tenía el rostro muy serio, al igual que todos nosotros después de la reunión. Me dirigió una pequeña sonrisa y luego desapareció por el pasillo, en dirección al cuarto de Tao. Parecía que se habían hecho muy buenos amigos.

   Estaba por cerrar la puerta cuando apareció JongDae con cara de circunstancias, pidiéndome paso con la mirada. Asentí y él entró a mi cuarto, cerrando la puerta. Después, se sentó en mi cama y dirigió su mirada hacia la ventana, ahora ya arreglada.

   -¿Cuándo la arreglaron?- preguntó.
   -Hace un par de días- contesté.
   -Genial, estaba preocupado por eso- dijo, pero yo no lo creí.
   -No has venido por eso, ¿verdad?- pregunté y él me miró unos momentos antes de negar con la cabeza.
   -No, no vine por eso.
   -Entonces, cuéntame, ¿qué es lo que te preocupa?- me senté a su lado y puse mi mano en su muslo, dándole confianza para que comenzara a hablar.
   -Mañana es el cumpleaños de Minnie y no le he comprado nada porque se me ha olvidado y no sé qué hacer- contó y yo sonreí.
   -Te importa mucho, ¿no?
   -Claro, es mi amigo, ¿cómo no me iba a importar?
   -Yo también soy tu amigo y a mí me regalas siempre chorradas- repliqué.
   -Ya, pero tú no eres MinSeok…- abrió sus ojos de manera desmesurada, pero ya lo había dicho y yo lo había escuchado perfectamente.
   -¿Te gusta?- pregunté y él sólo agachó su cabeza, avergonzado. Debería haber comenzado a meterme un poco con él, en venganza por lo que siempre hacía conmigo, pero mi personalidad no era así- entonces, si de verdad es así y no puedes comprarle nada… regálale algo tuyo a lo que le tengas aprecio y que él lo sepa- pasamos unos momentos en silencio y luego, a JongDae se le iluminó la cara.
   -Gracias YiXing- me dijo con una sonrisa y me dio un abrazo antes de salir rápidamente de mi dormitorio. En ese momento, mi móvil comenzó a sonar Again & Again – 2pm.

-oooOOOooo-

   KyungSoo acababa de contarme lo que había pasado y ahora, estaba dormido entre mis brazos. Lo había subido hasta mi habitación y lo había recostado en mi cama para que descansara y entonces había explotado. Todavía no podía creerme que Kevin hubiera hecho aquello.

   Intenté levantarme de la cama, pero KyungSoo me aferraba fuertemente contra sí, se notaba que su poder era el de la fuerza, casi no podía ni respirar. Aun así, tras mucho esfuerzo, conseguí girarme en la cama, para que me abrazara por la espalda y para poder alcanzar mi teléfono móvil.

   Suspiré y luego busqué en mis contactos su nombre antes de llamarlo. En apenas un par de tonos, descolgó.

   -¿JunMyeon?- lo escuché preguntar.
   -Sí, soy yo.
   -Sabes que no…
   -Es importante- lo corté.
   -¿KyungSoo?- adivinó.
   -Sí.
   -¿Cómo está?
   -Destrozado.
   -Lo siento mucho.
   -¿Qué fue lo que pasó, YiXing?
   -Ahora mismo no te lo puedo contar.
   -¿Cuándo y dónde?
   -Te mandaré un Kakao cuando lo sepa- contestó.
   -Lo esperaré- y colgué, volviéndome a girar en la cama para abrazar fuertemente a KyungSoo. No pensaba dejarlo sufrir.

-oooOOOooo-

   Llegamos bastante tarde a la Residencia después de aquella reunión, puesto que nos habíamos quedado a cenar allí por la insistencia de YiXing. Ya eran casi las doce y yo tenía que ducharme. No tenía ninguna gana de hacerlo, pero no era cosa ir echando peste, por lo que nada más llegar, me apropié del baño.

   No tardé mucho en darme una ligera ducha y salir, envuelto en una toalla. No me gustaba estar desnudo delante de JongDae, pero se me había olvidado coger la ropa antes de entrar, por lo que no tenía remedio.

   En cuanto salí, me fui a mi armario y luego caminé hasta la cama. JongDae parecía no prestarme ninguna atención, así que me tranquilicé un poco. Sin embargo, cuando fui a sacar mi pijama de debajo de la almohada me di cuenta de que había un pequeño cuadrado envuelto con papel de regalo. Rápidamente me giré hacia donde estaba JongDae, con el paquete en la mano.

   -¿Y esto?- pregunté y él se giró mirándome con una sonrisa.
   -Ábrelo y sabrás qué es- contestó. Asentí y comencé a rasgar el papel, quedándome de piedra al ver lo que había dentro.
   -Kim JongDae…- murmuré- no… no puedo aceptarlo…
   -Claro que puedes, siempre lo quisiste y ahora es tuyo- dijo sin quitar aquella hermosa sonrisa de su rostro.
   -Pero…
   -Nada de peros- se levantó de su silla de escritorio y caminó hacia mí, hasta que quedó sentado a mi lado en la cama- es una edición especial de la que solo se vendieron algunas copias y siempre habías querido este CD, así que, es tuyo.
   -Yo…- un gran sentimiento de felicidad me embargó y no sabía qué decir- yo… yo no… no sé qué decir…- sentía que mis ojos comenzaban a aguarse.
   -Solo di “gracias”- murmuró- con eso es suficiente.
   -Gracias, JongDae, muchísimas gracias- y me abracé a él. Me daba igual estar medio desnudo, me daba igual que escuchara mi corazón latir rápidamente, me daba igual todo, era completamente feliz.
   -Feliz cumpleaños, Minnie- susurró en mi oreja, rozando sus labios contra ella, haciéndome estremecer.






sábado, 9 de febrero de 2013

EXO


Capítulo 16
Pasado



   -¿Qué es lo que quieres que te cuente?- pregunté a YiXing.
   -Todo- contestó- quiero saber cómo descubriste tus poderes y qué es lo que sabes acerca de los por qué.
   -Muy bien- dije- mis poderes se desarrollaron cuando tenía 15 años, bueno, en realidad sólo uno, el de volar.
   -Eso… eras muy joven en ese entonces…- comentó él- ¿cómo…?
   -Estaba en Vancuver, jugaba al basket y una vez hice un mate increíble, sobrevolando a un par de jugadores del equipo contrario, ése fue el comienzo, pero en ese momento no sabía qué pasaba, ni siquiera en esos momentos me di cuenta.
   -No sabía que jugaras al basket- murmuró YiXing- ni siquiera sabía que viviste en Vancuver… ¿por qué nunca me has contado…?
   -No te interesa mi vida privada- dije y lo fulminé con la mirada, ante esto, él se encogió un poco y se alejó un poco de mí.
   -Lo siento…- me entró algo en el cuerpo al escucharlo decir esas palabras, la verdad, no sabía por qué me ponía tan irascible cuando él me preguntaba algo, con Tao no tenía ningún problema, pero con él… Inspiré hondo y seguí con lo que estaba diciendo antes.
   -Viví allí durante unos años y jugué en el equipo de mi instituto como ala-pívot. (N.A.: No sé en qué posición jugaría él realmente, pero como sé bastante de basket (amo el basket), por su complexión física y su altura, la posición que mejor le queda dentro del quinteto es esa ^^ Baskonista forever XD) Pero, lo que intentaba contarte, era que hasta unos días después, no me di cuenta de lo que realmente pasaba- proseguí- estaba subido a un árbol y cuando intenté bajar, resbalé, pero no caí, simplemente me quedé flotando en el aire.
   -Debiste haberlo pasado mal- sentí cómo de pronto sus manos tomaban las mías y al mirar su rostro, lo noté como preocupado.
   -No fue para tanto- YiXing me miró sin comprender.
   -No te hagas el duro, yo lo he pasado mal y tenía el apoyo de tres personas.
   -Al principio, me asusté un poco… pero luego me pareció algo fascinante- contesté- además… hubo algo que me ayudó.
   -¿Qué fue?
   -Mis sueños.

-oooOOOooo-

   Cuando me desperté por segunda vez en ese día, me di cuenta de que estaba en la habitación que compartía con BaekHyun, pero que esta estaba vacía. Me levanté lentamente y fui hacia el baño para darme una ducha y arreglarme un poco, puesto que cuando me vi en el espejo casi me da un ataque de lo mal que estaba. Salí de mi habitación y me dirigí a la de mis amigos, dispuesto a tomarles un poco el pelo y pasar un buen rato con ellos, sin hacer ni el huevo.

   Llamé a la puerta de su habitación, había aprendido que no se podía entrar a aquel lugar sin llevarte una sorpresa nada agradable a la vista, lo había aprendido de la peor manera. Unos segundos después, mi amigo SeHun, fue el que abrió la puerta y me dejó pasar.

   -No te esperábamos por aquí hoy- murmuró él.
   -¿Por qué lo dices?- pregunté sin entender lo que quería decirme, la verdad, todavía no estaba muy despierto que digamos.
   -Porque LuHan te va a matar.

   Me giré para ver al otro ocupante de aquella habitación y vi cómo me miraba con una mala leche impresionante. ¿Por qué me miraba así, si yo no había hecho nada…? Ah… lo recordé de pronto. La cama. Me lamenté de no haber dejado hecho mi testamento antes.

   -Lo siento…- murmuré viendo cómo se acercaba a mí para matarme.

-oooOOOooo-

   Ya había pasado la hora punta del turno de mi amigo, por lo que podía volver a acercarme hasta el mostrador para hablar con él durante otro rato, hasta que terminara su turno y pudiéramos irnos a dar una vuelta, como me había prometido esa mañana cuando llegó a mi casa a por mí. Cuando llegué hasta allí, lo vi hablando animadamente con el chico moreno que había llegado antes para ayudarlo.

   -Oh, KyungSoo- dijo él al verme- te presento a Tao, él es uno de los compañeros de piso de Kevin, el rubio alto con mala hostia que normalmente está aquí conmigo.
   -Encantado- el chico se inclinó y yo hice lo mismo.
   -¿Cuánto te queda para acabar el turno, hyung?- le pregunté a JunMyeon.
   -No mucho- contestó mirando su reloj- voy a empezar a recoger algunas cosas para luego salir pitando de este lugar- y comenzó a moverse de un lado para otro.

-oooOOOooo-

   -¿Tus sueños?- me preguntó YiXing mirándome de una manera rara, asentí- es… algo extraño…
   -Creo que son algo así como unos recuerdos del pasado, de mi vida anterior… de cuando no era humano…
   -Kevin… ¿me estás tomando el pelo?- negué con la cabeza- mira, si crees que me voy a tragar ese cuento, estás muy equivocado- se levantó del sofá- yo te he contado todo lo que sé, ¿por qué tú no puedes hacer lo mismo?

   Se fue del salón. Suspiré y me levanté. Estaba cabreado conmigo y no sabía por qué, creería que le estaba tomando el pelo, pero no era así, le estaba contando la verdad, por primera vez estaba siendo bastante sincero con él y no me creía. Escuché cómo la puerta de su habitación se cerraba de un portazo, así que me dirigí hacia allí y cuando entré a su cuarto, lo encontré sentado en la cama, abrazándose las rodillas y murmurando algo. En cuanto me vio, dio un respingo, asustado y me miró mal. Otro día le hubiera devuelto la misma mirada, pero hoy no podía, había miles de cosas que me lo impedían, así que solamente caminé hacia su cama y me senté a los pies de esta, un poco alejado.

   -Fuera…- dijo YiXing- no quiero que me sigas tomando el pelo.
   -No te estaba tomando el pelo, YiXing, es la verdad…
   -No te creo- contestó haciendo un puchero como el de un niño pequeño.
   -Déjame que te explique.
   -Hazlo, seguiré sin creerte- ya se había colocado en modo tozudo, y así, no muchos podían hacerle entrar en razón, pero lo intenté. Yo le había pedido la verdad y él me la había contado, ahora yo haría lo mismo, por muy raro, estúpido o incómodo que le pareciera.
   -Recuerdo que éramos doce, doce dioses- él bufó sin creerme- pero por alguna razón, nos dividimos, no sé el por qué, sólo sé que había luchas entre nosotros.
   -Ya… los doce dioses del Olimpo, no te jode…- dijo YiXing y yo seguí con lo mío sin hacerle caso.
   -Vivíamos en un lugar brillante, lleno de luz y color, un lugar muy agradable y cálido, aparte de las luchas con los otros seis, de manera esporádica, normalmente, vivíamos en paz, sin mucho qué hacer- conté- en nuestro lado se encontraban los poderes del vuelo, la curación, el trueno, el hielo, la telequinesis y el control del tiempo; al otro lado, el fuego, el agua, la luz, la tierra, la tele transportación y el aire.
   -Eso…
   -Todo era normal, hasta que un día, una sombra oscura ocultó el sol y todo comenzó a truncarse, divididos como estábamos no pudimos hacerle frente, pero no queríamos unirnos tampoco, y así, terminó nuestro gobierno…- los ojos de YiXing se habían quedado como platos- no he tenido más sueños, pero en estos siempre habían algunos nombres, nombres que no sé a quienes pertenecen, pero que se repetían una y otra vez…
   -¿Cuáles son los nombres?- preguntó él, gateando hasta acercarse a mí.
   -Kris… y… Lay…

   No le había contado todo, tampoco hacía falta que lo hiciera, todo se desarrollaría tal y como se desarrolló en el pasado, pero él no tenía por qué saberlo, por lo menos no ahora.

-oooOOOooo-

   -A veces me mosqueáis un poco- escuché murmurar a MinSeok.
   -¿Por qué dices eso, Minnie?- preguntó JongDae, mientras yo sentía a BaekHyun alzarse un poco de mi cuerpo para ver bien la escena.
   -Pues… a ver, siempre andáis los tres juntos o con YiXing, hablando de lo que sea y cuando yo llego, cambiáis de tema u os quedáis callados y miráis para todos lados intentando disimular- nos quedamos los tres asombrados, la verdad, nunca nos habíamos imaginado que él se pudiera dar cuenta de todo- aunque lo parezca, no soy ningún tonto.
   -Claro que no eres tonto- dijo JongDae pasándole un brazo por los hombros- no lo hacemos a propósito, simplemente hablamos de lo primero que se nos ocurre… y normalmente, por culpa de estos dos- no señaló- se vuelve algo pervertido y sin sentido.
   -¡Hey!- me quejé, pero BaekHyun me tapó la boca.
   -Calla, sino quieres meter a alguien que no tiene nada que ver en esto- murmuró.
   -Está bien- cedí.
   -¿Tengo que recordarte que soy el mayor de todos vosotros?- dijo MinSeok- puedo escuchar esas cosas pervertidas.
   -Ya, eres un viejuno…- murmuré y BaekHyun me dio un codazo mientras JongDae me miraba con mala leche- ¿qué? Si lo ha dicho él mismo.
   -No le hagas caso a Channie- dijo mi amigo.
   -Es que tienes una imagen tan adorable, que no pega nada contigo- dijo JongDae.
   -¿Quieres que cambie a mi imagen de mala hostia como cuando hago artes marciales para que me habléis de sexo?- preguntó MinSeok.
   -No, por favor- contestó JongDae- todo menos eso… te hablaremos de lo que quieras…

-oooOOOooo-

   Después de que al final SeHun me quitara de encima a LuHan y conservara mi vida, por el momento, el ambiente fue algo más alegre y distendido, claro, que yo con SeHun, sentados en su cama, y LuHan tumbado en la suya, ocupándola toda, aunque todo eso se fue a la mierda cuando metí la pata hasta el fondo de nuevo.

   -¿Qué LuHan? ¿No te puedes sentar porque anoche Hunnie te dio fuerte?
   -Tú quieres morir hoy, ¿no?- dijo LuHan incorporándose lentamente de la cama.
   -Preferiría que no…
   -Pues no tientes a la suerte…- murmuró SeHun.

-oooOOOooo-

   En el momento en el que escuché susurrar esos nombres, sentí cómo si mi cuerpo temblara, sobre todo al escuchar el segundo. Lay. Esa simple palabra me recordaba algo, algo lejano, algo extraño, algo que de una manera u otra, me definía a mí.

   -Siento como si Lay fuera mi nombre…- murmuré.
   -Los nombres ejercen magia sobre las personas- escuché decir a Kevin cerca de  mi oído- nunca debiste decir eso, ahora tengo control sobre ti, Lay- un escalofrío recorrió mi cuerpo- al igual que lo tiene Tao sobre mí, al conocer mi nombre…
   -¿Cuál es tu nombre?- pregunté.
   -No lo diré…- a pesar de esa respuesta, supe que él ya me había dicho su nombre.
   -Kris…- susurré a la vez que notaba cómo el lóbulo de mi oreja estaba siendo mordisqueado.