Capítulo 15
La Explicación
Cuando nos sentamos todos en el salón
después de terminar de hacer el pastel, mi teléfono móvil comenzó a sonar con
la canción Beautiful Night – BEAST. Salí corriendo a por él a mi habitación
mientras mis dos compañeros de piso bufaban, uno porque nos había interrumpido
lo que íbamos a empezar a hablar, y el otro porque se había quemado con la
tarta de chocolate.
-¿Sí?- pregunté.
-¿YiXing?- dijo la voz al otro lado del
teléfono.
-Sí, soy yo, ¿quién es?- no me sonaba para
nada la voz que me estaba hablando.
-Soy JunMyeon, el compañero de trabajo de
Kevin- se presentó.
-Ah… JunMyeon- dije mientras entraba de
nuevo al salón y Kevin se me quedaba mirando raro- ¿qué pasa?
-Pues… es que Kevin no ha venido al trabajo
hoy y estaba preocupado- contestó- ¿le ha pasado algo?
-Ah… pues bueno… la verdad…- me quité el
móvil de la oreja- Kevin, JunMyeon pregunta qué te ha pasado, ¿qué le digo?-
susurré. Él se acercó a mí pidiéndome el teléfono y se lo di.
-JunMyeon…- contestó- no, no puedo ir… lo
siento… ¿Qué me pasa?- me miró- pues… estoy un poco enfermo, con fiebre… y
YiXing me ha dicho que es algo contagioso- ¿cómo se le podía dar tan bien
mentir a este chico?- lo siento, pero… bueno- miró a Tao- podría ir Tao-
murmuró y el chico se limpió el chocolate que tenía en la boca- ¿podrías?- él
asintió- bien, ya tengo recambio.
-Déjame el móvil- le susurré y me lo tendió-
JunMyeon, siento que este chico sea tan brusco.
-Sí, ya sé que ni muriéndose será agradable-
contestó el chico mientras yo veía a Tao levantarse e irse hacia su dormitorio.
-Espero que esto no cause ningún
contratiempo- murmuré.
-Nah, no hay problema- contestó él- gracias,
y adiós.
-Adiós.
-oooOOOooo-
-Bueno, supongo que aquí no se atreverá a
venir ningún malo más, ¿no?- pregunté acurrucándome sobre ChanYeol. Había
pasado mucho miedo cuando lo escuché gritar y más, luego cuando lo vi
inconsciente, no quería sepárame de él ni un milímetro.
-Lo más probable es que no- contestó mi
amigo abrazándome por la cintura y pegándome más a él- estamos en tu
habitación, y en cualquier momento podría entrar JongIn.
-Estamos mejor aquí que en cualquier sitio,
escondidos- dijo JongDae- y por cierto, ¿por qué tenéis que estar siempre
acurrucados como si fuerais una pareja?- miré a ChanYeol y me intenté separar,
pero me abrazó más fuerte.
-Me gusta estar en contacto permanente con
alguien- dijo mi amigo- ¿prefieres ser tú o puedo seguir con mi juguete?
-No, no, no- dijo el otro negando con las
manos y la cabeza- a mí ni me toques.
-¿Cómo que juguete?- pregunté yo- yo no soy
el juguete de nadie- me quejé.
-Sí, eres mi juguete…- noté cómo sus labios
rozaban mi frente y me puse colorado como un tomate.
-Dejaros de carantoñas- murmuró JongDae- voy
a llamar a YiXing para que esto se ponga serio de una buena vez.
-oooOOOooo-
Tao acababa de irse al trabajo de Kevin y
ambos nos habíamos quedado solos en el salón, mirándonos en silencio. Yo no
sabía por dónde empezar, él parecía que tampoco. Nos pasamos un buen rato así,
hasta que él habló firmemente.
-Háblame de todo- pidió.
-¿Qué es lo que quieres que te cuente,
Kevin?- pregunté sin entender.
-Todo lo que sepas acerca de los poderes,
quiénes son los demás que han despertado y sus poderes, cuándo, dónde y cómo.
-No creo que eso…
-Ya te demostré anoche qué es lo que hago-
dijo él- soy igual que tú.
-Yo… sólo te puedo decir sobre mí… sobre los
demás… no lo sé…- contesté.
-YiXing, no me mientas- ¿cómo podía saber
que le estaba mintiendo?
-Kevin…
-Cuéntame.
-Está bien- dije rindiéndome después de unos
momentos de silencio, pero cuando estaba por comenzar a hablar, mi teléfono
volvió a sonar. Vi cómo Kevin suspiraba cansado y se acercaba a mí. Iba a coger
el móvil, porque vi JongDae en la pantalla, cuando Kevin lo agarró y le sacó la
batería- ¿qué haces?- dije indignado levantándome y plantándole cara, aunque me
quedé a la altura de su pecho.
-Evitar que nos molesten más.
-Pero a lo mejor era algo importante, a lo
mejor un enemigo…- me tapé la boca con la manos, acababa de decir una cosa que no
debería haber dicho.
-Así que tu amigo ese es uno de nosotros,
¿no?- me mordí el labio inferior de puro nerviosismo y también recriminándome
interiormente que no tenía que haber dicho nada.
-Sólo dime que tú no eres alguien a quien le
tengamos que temer- murmuré.
-No debéis temerme, tú menos que nadie.
-oooOOOooo-
-No contesta- dijo JongDae.
-¿Y qué hacemos?- preguntó BaekHyun.
-Dormir, por favor, estoy muerto…- murmuré.
-oooOOOooo-
-Ahora mismo somos cuatro personas- dije-
contigo cinco.
-Seis- contestó él.
-¿Seis?
-Tao también es de los nuestros.
-Pues… entonces somos seis- murmuré- yo,
como viste, tengo el poder de curar a las personas, JongDae, puede controlar la
electricidad, tú, vuelas y también utilizas el fuego, ¿qué hace Tao?- pregunté.
-Te lo diré cuando me cuentes sobre los
otros dos- contestó él.
-Está bien… ellos son ChanYeol, que controla
el fuego… y BaekHyun, que controla la luz… ya lo he dicho todo.
-Tao tiene control sobre el tiempo, ahora
mismo sólo puede pararlo durante unos segundos- contestó.
-Un momento, ¿puede parar el tiempo?- Kevin
asintió y entonces otra duda asaltó mi cabeza, ¿qué sabía él acerca de todo?-
cuéntame…- comencé, pero no me dejó terminar.
-Primero tú.
-No, Kevin, tú sabes muchas más cosas que
yo, seguro, yo ya te he contado- me quejé. Kevin se me acercó y se sentó a mi
lado, penetrándome con la mirada.
-Sé unas cuantas cosas, sé lo que recuerdo,
pero no sé el motivo por el cual se desarrollaron nuestros poderes ahora-
contestó- cosa que tú si sabes, ¿o me equivoco?- su mirada no me dejó otra
opción que asentir.
-No entenderás lo que te explicaré, es algo
muy complicado- comenté.
-Pues hazlo de una manera que sea
entendible.
Suspiré y me levanté del sofá, pero Kevin me
agarró del brazo y me volvió a sentar junto a él, muy cerca sin dejarme
escapatoria posible, que era lo que yo quería, irme de allí. Bufé.
-Me lo vas a contar sí o sí.
-Les hice unos análisis de sangre a ChanYeol
y BaekHyun como parte de un trabajo, pero resultó que cuando estaba trabajando
con ellos, encontré algo que me extrañó muchísimo- lo miré y suspiré- había
algo en sus ADN que no era lo normal, un indicador de una pequeña modificación
en ellos. Al parecer, estaba comenzando a activarse un gen que es el que
desencadena los poderes, no sé por qué, cómo, o cuándo se activa- eso era lo
único que sabía, no tenía más cosas- ahora tú.
-oooOOOooo-
Estábamos tan tranquilamente tumbados sin
hacer el huevo, descansando de la borrachera y del ataque que habíamos tenido,
cuando llamaron a la puerta de la habitación de BaekHyun. Él se levantó de mis
brazos y sentí un poco de frío en el espacio vacío que antes ocupaba su cuerpo.
Lo vi dirigirse hacia la puerta y abrir.
-Hola, MinSeok- dijo dejando pasar al recién
llegado.
-Hola, chicos- dijo él- ya sabía yo que os
encontraría aquí, intentando volver a dormir la mona…- murmuró.
-No… sólo hablábamos de nada en concreto-
contestó JongDae mientras yo estiraba mis brazos hacia BaekHyun y lo volvía a
tumbar conmigo, y MinSeok se sentaba en la otra cama junto al que hablaba- de
verdad, tíos, parecéis una pareja empalagosa- nos señaló y mi amigo se acurrucó
más contra mí, sonrojado- ¿lo veis?
-Venga, déjalos en paz, JongDae- escuché decir
a MinSeok, pero no le presté mucha atención, estaba más enfocado en la persona
a mi lado, abrazándome y que anoche me había dicho “te amo” mientras me daba un beso y me dejaba un chupetón en su
estado de embriaguez. Desde ese momento me sentía algo extraño, bueno, me
sentía extraño desde que habían comenzado a aparecer los poderes, más aún,
desde que BekHyun había desarrollado los suyos, pero aquella noche se había
llevado la palma.
-Channie, Channie- dijo BekHyun en mi oído y
me hizo dar un brinco, tanto por la sorpresa, como por sus labios sobre mi
oreja.
-¿Qué, qué?- pregunté.
-Te estábamos hablando- dijo MinSeok.
-Lo siento, estaba distraído, pensaba en
otras cosas- contesté.
-¿Tú? ¿Pensando?- dijo BaekHyun tocándome la
frente con el dorso de su mano- ¿no tendrás fiebre?
-Ja, qué gracioso- murmuré algo cabreado,
pero vi su sonrisa brillante y se me pasó el enfado.
-oooOOOooo-
Llegué al Burger, y allí me esperaba
JunMyeon, que parecía desesperado, una gran cola se le alargaba hasta casi la
entrada del local. Me acerqué hasta allí corriendo y me coloqué detrás del
mostrador para ayudarlo, que para eso había salido de casa aun cuando íbamos a
tener esa extraña reunión de la que no me habían informado.
-¿Qué es lo que quieres que haga, JunMyeon
hyung?- le pregunté.
-Gracias al cielo que vienes, Tao, estoy
saturado- murmuró- ayúdame a entregar los pedidos, por favor.
-Entendido.
Comencé a hacer lo que me había dicho, pero
estábamos saturados, casi ni pensé lo que hice, pero paré el tiempo durante
unos cuantos segundos algunas veces, para aligerar la carga de trabajo que
había en el lugar a la hora punta. Cuando acabó el jaleo, ambos suspiramos
cansados y nos echamos sobre el mostrador.
-Me has salvado la vida- murmuró JunMyeon-
no sé qué habría hecho sin ti…
-No hay de qué- contesté.
-Por cierto, ¿qué es lo que le ha pasado a
Kevin?
-Tiene una especie de refriado o algo, no lo
sé con seguridad- no recordaba exactamente que habían dicho los otros- algo
contagioso, YiXing no me dejaba acercarme a Kevin, así que venir aquí era lo
mejor que podía hacer.
-Espero que no sea nada grave…
-No, tranquilo, en un par de días estará
curado.
-Me alegra saber eso.