[One Shot] Cover Me, Kiss Me, Hug Me {BangDae}

Título: Cover Me, Kiss Me, Hug Me

Pareja: BangDae (Bang x DaeHyun) (B.A.P)

Clasificación: G

Géneros: romance, fluff.

Número de palabras: 1.755 palabras

Resumen: la relación que se ve delante de las cámaras no es igual a la que hay cuando estas se apagan.

Notas: historia escrita para el cumple de nuestro ángel caído de Busan. Happy Birthday!!

Comentario de Autora: hace poco que había visto el Killing Camp y no podía quitarme de la cabeza todo el BangDae que se ve ahí, quería escribir una historia pero no me ponía, entonces llegó Kim_Kimchi quejándose de que no había BangDae por el mundo y me decidí a hacerla un poco feliz. Espero que te guste <3

Cover Me, Kiss Me, Hug Me

            El verano era caluroso en Seúl y nosotros teníamos que grabar y grabar y grabar programas en los que bailábamos nuestra nueva canción. Crash se llamaba y era una parodia de todo lo que habíamos hecho anteriormente, un baile divertido y distendido en el que estábamos todo el rato haciendo el tonto; pero eso no quitaba que aquellos trajes no nos dieran calor. Llevábamos todo el año sin parar, por lo que cuando la empresa nos dijo que nos daba unos días de “vacaciones” todos suspiramos aliviados, claro que, en aquel momento no sabíamos que estas no iban a tener lugar, sino que tendríamos que trabajar, grabando para un programa.

            Nos pasamos la noche en el autobús, dando vueltas por la ciudad hasta dar con un supermercado y luego corriendo de un lado a otro por el lugar para conseguir provisiones para el supuesto campamento revitalizador. Después, volvimos al autobús y comenzamos el viaje hacia la playa.

            Me senté detrás, junto a YongGuk hyung y recargué mi cabeza sobre su hombro dispuesto a dormir. Mi hyung no era más que un saco de huesos y me los estaba clavando todos, pero aun así era mejor dormir sobre él que hacerlo contra la ventana. En ojos ajenos, él y yo parecía que no nos llevábamos demasiado bien, pero eso no se acercaba nada a la realidad. No éramos grandes amigos porque habíamos congeniado mucho más con otras personas dentro del grupo y fuera de él, pero el tiempo que pasábamos juntos, los dos solos eran momentos que no podríamos compartir con ninguno de los demás.

            Sentí cómo mi hyung acabó rodeando mi torso con sus brazos, abrazándome contra su cuerpo y tapándome con lo que debía ser una manta para que no pasara frío, me acurruqué contra él y dejé que me cubriera completamente. Noté sus labios contra mi cabeza durante unos instantes dejando un pequeño beso de buenas noches que me hizo sonreír y aferrarme a YongGuk hyung para dormir medido por el vaivén del bus y arrullado por el ruido del motor y el sonido de los latidos de su corazón.

            Cuando a la mañana siguiente nos despertamos estábamos en una playa, bajamos del autobús y tomamos las mochilas según el orden en el que habíamos descendido. Todo lo que habíamos hecho la noche anterior había sido en vano porque ahora nos habíamos intercambiado las mochilas y, encima, las cosas habían empequeñecido ridículamente.

            HimChan hyung estaba como loco buscando las tarjetas doradas que había recogido por la noche, ya que no estaban en la mochila que había escogido. En ese momento, me di cuenta de que YongGuk hyung sacaba las tarjetas doradas de su mochila y abrí mis ojos como platos. Me dijo que me callara y mientras el otro hyung hacía escándalo, despertando a toda Corea del Sur con sus gritos, se acercó a mí por la espalda y me guardó las tarjetas en mi mochila.

            —No digas nada —susurró y después, se alejó de mí, poniendo un dedo en sus labios sonriendo ampliamente, divertido por molestar a HimChan hyung.

            Después de todo, se descubrió el pastel y tuve que sacar las tarjetas, pero aquel rato fue muy divertido, casi llegué a pensar que, aunque había cámaras por todos lados, podía estar lo suficientemente relajado como para pasar unas “vacaciones” agradables. Comimos lo poco que había en las mochilas, sentados en la arena, a mi lado se encontraba YongGuk hyung y de vez en cuando no sonreíamos. Había un buen ambiente, pero este se cortó por la llamada del tipo de la voz distorsionada que nos hizo ir a cambiarnos de ropa.

            Fuimos a una pequeña casa que el staff había preparado para pasar la noche y nos pusimos las camisetas, blancas o grises, y los pantalones de camuflaje. Me miré en el espejo, arreglándome un poco antes de salir y volver a las grabaciones, dándome un momento de respiro, pero YoungJae rápidamente apareció para empujarme fuera de la casa diciendo que era tan feo que no tenía arreglo y que dejara de mirarme en el espejo.

            En la playa se nos dijo que teníamos que cavar en el barro para encontrar una pelota de fútbol, así que corrí rápidamente para coger una de las palas grandes y así poder encontrarla rápidamente. No pasó mucho tiempo cuando hinqué la pala en la tierra y descubrí la pelota, convirtiéndome así, en el rey de aquel juego y teniendo la oportunidad de escoger al quipo que quería, además de algunas tarjetas que me beneficiarían. Los hice ponerse en fila india y después de que me intentaran convencer para que los escogiera, tomé a YoungJae y a YongGuk hyung.

            Después de pasarnos la mayor parte de la mañana jugando al fútbol en el barro estábamos todos muertos y hambrientos. Queríamos parar, pero no nos dejaban y aunque nos quejamos una y otra vez, nada ablandó los corazones del staff. Acabamos proponiéndoles un juego en el que habría algo de comida y algo que seguramente a las fans les encantaría y estos nos dieron permiso para hacerlo.

            Cogí la galleta de la mesa usando solo mi boca y se la di a YoungJae, que estaba bastante reticente a hacerlo, después, rápidamente, porque teníamos que acabar los primeros, le di el otro cacho que no había sido mordido a YongGuk hyung, haciendo sin querer que nuestros labios se rozaran. Estábamos delante de las cámaras, no podíamos demostrar indiferencia ya que era un acto que habíamos compartido muchas veces en la intimidad, pero tampoco actuamos demasiado rápido como para hacer que nos desagradaba, así que nos limitamos a hacer como si nos hubiera dado escalofríos, pero nada más. Después de aquello, seguimos jugando en el barro hasta que acabamos completamente rebozados y mi equipo ganando.

            Durante el tiempo que nos dieron para asearnos —que no fue mucho—, acabé en la misma ducha que YongGuk hyung, dejando que retirara por mí os restos de barro de mi pelo y mi cuerpo, haciendo yo lo mismo con él y prometiéndonos que en cuanto acabara todo aquello, y de verdad nos dieran unas vacaciones aunque fueran de un simple día, nos tomaríamos un poco de tiempo para nosotros solos. Con algunos besos, nuestra ducha fue bastante más divertida y casi se me olvida que teníamos que seguir grabando y que lo peor seguro que no había llegado aún.

            Tras ducharnos y colocarnos ropa limpia, nos dirigimos hacia donde el staff nos dijo, teniendo una conversación sobre la familia de YongGuk hyung, ya que al parecer, habían sido todos militares, miembros de la marina, concretamente. Llegamos hasta donde estaba el “instructor del ejército” y este nos pidió que hiciéramos una serie de ejercicios para después ordenarnos que le hiciéramos aegyo. Todo era bastante extraño, pero no nos quejamos demasiado y cuando pidió que formáramos las letras de nuestro grupo con nuestros cuerpos, simplemente lo hicimos, aunque mal en la primera ocasión así que para la segunda vez, no dudé en lanzarme hacia YongGuk hyung y subirme a su cintura, agarrándome con las piernas a esta y a su cuello con mis manos para formar la letra “P”.

            Después jugamos un poco al paintball, intentando que no nos disparasen hasta que hubo un solo ganador, HimChan hyung —al que se le daba de miedo aquello—. Cuando acabamos, creíamos que todo había terminado y que volveríamos a casa después de aquel día de locos, pero al parecer, estaba muy equivocado, ya que en cuanto cayó la noche, nos llevaron de nuevo a la playa para volver a grabar.

            Hicimos varios juegos para decidir los equipos, para decidir lo que comeríamos y, en definitiva, estuvimos casi dos horas delante de las cámaras, hambrientos, congelados y sin poder quejarnos ni siquiera un poquito. Solo cuando terminamos de comer y nos dirigimos a las tiendas de campaña que nos habían tocado, con los compañeros que finalmente habíamos quedado. Sentí bastante no poder dormir con YongGuk hyung y tener que hacerlo con HimChan hyung y YoungJae, pero con una mirada suya antes de desaparecer en su tienda, entendí a la perfección las palabras que no fueron dichas.

            Apenas unos minutos después de haber entrado en la tienda más grande, salía de allí intentando no despertar a los otros dos. En el exterior ya se encontraba YongGuk hyung, sentado sobre la arena y mirando hacia el infinito mar. Me acerqué hasta él y me senté a su lado, dejando caer mi cabeza sobre su hombro como había hecho la noche anterior y dejé que pasara uno de sus brazos por mis hombros, abrazándome para darme calor. Parecía que había pasado un siglo desde entonces, pero solo había sido un día.

            —¿Lo has pasado bien, DaeHyun? —me preguntó.

            —No ha estado mal —susurré—, pero ha sido demasiado agotador.

            —¿Estás cansado? —dijo girando su cabeza para mirarme, preocupado.

            —¿Y quién no estaría cansado después de todo esto?

            —Tienes razón —murmuró. Estuvimos un rato en silencio, solo escuchando el sonido de las olas romper contra la playa, aquello me recordaba a casa—. Deberíamos irnos a dormir, mañana volvemos a grabar.

            —¿Y no podemos quedarnos unos momentos más? —supliqué. Se estaba demasiado bien entre sus brazos como para irme después de tan poco tiempo con él.

            —Podemos, pero luego no me hagas responsable de tus ojeras —bromeó, dándome con un dedo bajo las bolsas de mis ojos.

            —No lo haré —susurré.

            Nos miramos unos momentos a los ojos, aun sonriendo, y nos acercamos poco a poco hasta el otro para acabar dándonos un beso, abrazados sobre la arena. Delante de las cámaras nos comportábamos como unos compañeros de grupo cualquiera, él era mi líder y apenas hacíamos fan service juntos; pero detrás de ellas, podíamos ser nosotros mismos y yo podía dejarme mimar y querer por mi hyung.

Notas finales: para que veáis lo mucho que se quieren ambos dos (?)