miércoles, 12 de febrero de 2020

[Drabble] GOT7 D-DATE: The art of theft (or the theft of art) {JinSon}


Autora: Riz Aino
Pareja: JinSon (Jackson + JinYoung) (GOT7)
Clasificación: PG–13
Géneros: AU, thieves, romance?, fluff
Número de palabras: 700 palabras
Resumen: JinYoung ha encontrado un nuevo objetivo para el nuevo robo de la banda a la que pertenece.
Notas: drabble dedicado a mi sis Ara.
Comentario de autora: esta idea surgió de una conversación que tuve con mi sis Ara hace tres años y medio y que había estado rondando por mi ordenador todo ese tiempo hasta que por casualidad me la encontré y la utilicé para esto porque me moló intensamente. Espero que os guste.

The art of theft (or the theft
of art)

            JinYoung se encontraba ante una de las piezas más importantes del Museo Nacional Arte Contemporáneo de Seúl, un cuadro pintado por el joven artista Ars, un pequeño lienzo que mostraba la fragilidad del alma humana en tan solo unos pocos trazos abstractos mezclando colores fríos y cálidos. Era precioso y JinYoung sabía demasiado bien que su valor era infinito en aquel lugar y en el resto del mundo. Era perfecto… perfecto para robar.


            —¿Es este? —le cuestionó una voz a su lado. JinYoung asintió—. No parece gran cosa.
            —¿Quién es el experto aquí? ¿Tú o yo? —replicó, girándose.
            —Obviamente tú —dijo Jackson, levantando las manos en señal de rendición—, por eso te contraté —y le guiñó un ojo.

            JinYoung puso los ojos en blanco y después echó a andar por el amplio pasillo del museo, sus pasos rápidos sobre el suelo de losa resonando en las paredes del lugar a pesar de los murmullos de las personas que se encontraban visitando aquel espacio. Todavía se cuestionaba de vez en cuando por qué había aceptado trabajar para Jackson… pero éste había aparecido en un momento de su vida en el que de verdad necesitaba el dinero y le había hecho una oferta demasiado tentadora. Habían pasado dos años desde ese momento… dos años en los que JinYoung había dejado de ser un post estudiante de historia del arte a un ladrón de guante blanco. Quizás no era el trabajo más honesto del mundo, pero al menos cobraba bastante dinero y estaba poniendo en práctica sus conocimientos del mundo del arte.

            —¿Crees que es factible? —le cuestionó Jackson, que lo había seguido—. Quiero decir… ya sabes…

            Jackson se refería al robo. A pesar de ser una obra bastante importante no se encontraba en una zona con demasiada protección del museo, tampoco había demasiadas cámaras que apuntaran a ella o en la dirección en la que debían dirigirse para cogerla el día del robo. Tenía muchos puntos ciegos y no había tampoco sistema de infrarrojos a su alrededor, todo lo cual jugaba a su favor. Además, Ars, el creador de la obra era bastante apreciado en diversos círculos internacionales —y en algunos de ellos seguro que había alguna que otra persona dispuesta a pagar una millonada por ella—. Su pequeño tamaño la hacía también fácil de llevar sin ser descubiertos y no necesitaban demasiado material para poner en práctica aquella misión, por lo que, para JinYoung, era perfecta.

            —Sí. Es factible —respondió.
            —Voy a ir entonces hablando con YuGyeom para comenzar con los preparativos e ir metiéndonos en el sistema de seguridad desde ya —dijo Jackson—. Nuestro hacker favorito seguro que tiene ganas de empezar a trabajar. Gracias, pichón.

            Y tras decir aquello, Jackson se acercó a él para dejarle un sonoro beso en la mejilla que resonó en las paredes del museo y que provocó que un grupo de niños que estaban de visita con el colegio se giraran hacia ellos. Jackson se hizo el loco y cogió su móvil para llamar a YuGyeom, alejándose rápidamente del lugar y JinYoung simplemente suspiró de forma profunda para seguirlo después en dirección a la salida. Aquel iba a ser un robo magnífico.








Notas finales:
—Y ya está, con esta historia llegamos al final de esta pequeña colección en conmemoración de haber ido al concierto de GOT7. Han sido algunos más cortitos y algunos más largos, pero todos ellos han sido escritos con todo mi amor. ¡Nos vemos en lo siguiente que escriba!

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