Mostrando entradas con la etiqueta KangTeuk. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta KangTeuk. Mostrar todas las entradas

domingo, 16 de febrero de 2014

WGM

WGM

            Cuando me enteré que JungSoo estaba participando en el programa llamado We Got Married con una actriz guapísima bastante más joven que él se me revolvieron las tripas. Jamás había pensado que nuestro líder hiciera algo parecido.

            Claro que yo tampoco podía juzgar aquella acción. En los inicios de aquel programa había grabado algunos episodios con una chica muy mona, sin embargo, no había traicionado su confianza. En aquella época nosotros no estábamos saliendo, ahora sí lo hacíamos y que él estuviera grabando aquello decía muy poco de la promesa que me había hecho.

            Cuando regresó a casa después de terminar de hacer uno de los programas con “su esposa” me entraron ganas de retorcerle el cuello como me habían enseñado a hacer en el ejército, pero me contuve. No podía matar al líder de Super Junior solo por un ataque de celos, en el juicio no podría decir que fue por eso.

            Inspiré varias veces y luego intenté responder a la cálida sonrisa que me dedicó antes de darme un abrazo. Los chicos comenzaron a silbarnos y a chincharnos, ninguno sabía lo nuestro, pero parecía que lo intuían. Por eso los mandé callar y les eché una mirada asesina. El salón quedó despejado en apenas unos segundos y nosotros nos quedamos solos.

            Lo guie al sofá y nos sentamos cerca. Durante unos minutos solo estuvimos así, sin mirarnos, sin hablarnos, sin hacer nada. Cuando fui a abrir la boca para reclamarle, él se me adelantó.

            ―No quería hacerlo ―fue lo primero que dijo―. No quería grabar el programa, pero en esa época hubo algunos rumores que había que acallar y yo era el más indicado para ello ―se excusó mirándome a los ojos para que pudiera ver que era sincero―. Lo siento.
            ―No pasa nada ―acabé diciendo. Ni yo mismo supe por qué lo dije, quería tenerlo solo para mí y solo junto a mí, pero no había tenido opción, así que lo dejé correr―. Cuando se acaben las grabaciones podremos volver a estar juntos ―JungSoo se mordió el labio inferior y luego escondió su cabeza en mi pecho.
            ―Estaremos juntos ―murmuró.



lunes, 1 de julio de 2013

When an Angel Lies


When an Angel Lies


   Cuando un ángel miente, es que todo está mal, fuera de lugar y no tiene más remedio que hacerlo. Cuando un ángel miente significa que por dentro está quebrado y ya no le importa ir al Infierno por mentir. Cuando un ángel miente todo se ha perdido ya.

   -¿Estás bien?- preguntó KangIn acercándose a él tras salir del escenario, pero no obtuvo respuesta- ¿hyung?- le puso una mano en el hombro y el otro por fin reaccionó, algo asustado porque no se esperaba a nadie con él, y menos que lo tocaran- ¿estás bien?- volvió a preguntar, preocupado, pero obtuvo una gran sonrisa como respuesta, aunque sus ojos castaños reflejaban otra cosa.
   -Claro que estoy bien- dijo- ¿qué te hace pensar otra cosa?- preguntó intentando no mostrar cómo se sentía por dentro.
   -No sé… parecías distraído allí arriba- contestó KangIn y obtuvo un fruncimiento de labios del otro.
   -Tengo demasiadas cosas en la cabeza- respondió- ya sabes, cómo soy el líder, me tengo que saber la agenda de todos, todos los días y arreglar los desajustes que haya en cualquier sitio.
   -Ya… pero nunca antes habías estado así- llevó una mano al rostro de su hyung distraídamente y le acarició la mejilla levemente.
   -No dormí muy bien anoche…- contestó alejándose del chico y poniendo una sonrisa cansada.
   -¿Cuándo terminas tu agenda?- le preguntó a su hyung y éste repasó en su mente todo lo que ya había hecho.
   -Ahora- dijo LeeTeuk y el menor sonrió.
   -Yo también- contestó- ahora te llevaré a casa, te haré una buena sopa caliente y te arroparé para que duermas bien- y tras esto, se fue a cambiarse esa estridente ropa de los escenarios y dejó a su hyung, quien bajó la comisura de sus labios hasta que paró de verse su hoyuelo.

   Aunque KangIn lo hiciera con la mejor intención, todo aquello hacía que a LeeTeuk le doliera más, porque era la presencia del otro, lo que lo tenía así, o su inminente no presencia. KangIn pronto no iba a estar a su lado.

   Cuando un  par de horas después, ya en casa, y tras haber cenado una sopa caliente, ambos se encontraban en la cama del líder. KangIn había insistido en que se quedaría más tranquilo si sabía que dormía bien y LeeTeuk no había podido negarse. Por eso se encontraba ahora abrazado por la espalda y sintiendo un cálido aliento en su nuca.

   Debería ser capaz de dormir en aquellas circunstancias, pero no podía, su corazón martilleaba ensordecedoramente contra sus costillas al sentir aquella presencia tras de sí y estaba en tensión aun con aquellos cálidos y reconfortantes brazos rodeándolo.

   -¿No puedes dormir?- escuchó preguntar a KangIn en su oído.
   -No…- susurró y el menor lo atrajo más hacia sí.
   -¿Mejor?- preguntó y LeeTeuk asintió mientras una solitaria lágrima descendía por su mejilla- ¿estás bien?
   -Sí…- mintió y sintió cómo algo moría en su interior, porque cuando un ángel miente, se va consumiendo lentamente.
   -Vale…- susurró KangIn y poco después, se quedó dormido, pensando en qué hacer para volver a ver la sonrisa de su hyung.

   Los días pasaban y LeeTeuk cada día estaba peor. Apenas atendía a lo que se le decía, no sonreía y casi siempre estaba en su mundo, parecía más YeSung que el líder de Super Junior al que todos respetaban y que todos apreciaban.

   Cada vez que se le hacía la pregunta: “¿estás bien, hyung?”, él asentía y ponía una sonrisa falsa, para después darse la vuelta e ignorarlos a todos, volviendo a su mundo.

   -¿Hyung?- llamó KangIn. Ya había pasado un mes desde que el líder estaba mal y eso hacía infeliz al menor.
   -¿Sí?- contestó el líder intentando aparentar normalidad.
   -¿Estás bien?- preguntó por millonésima vez.
   -Claro- LeeTeuk esbozó una sonrisa, pero no convenció para nada al menor.
   -No me mientas- dijo KangIn- no me mientas a mí, no te mientas a ti- se acercó y lo abrazó por los hombros- no nos mientas a todos y deja salir todo aquello que te preocupa- el líder se dejó abrazar, sintiendo la calidez de aquel cuerpo y grabándola en su mente, pero no dijo nada- vamos… sabes que por muy malo que sea nunca dejaré de estar a tu lado.
   -Dentro de unas semanas ya no estarás a mi lado- susurró LeeTeuk.
   -Físicamente- rectificó el otro- no estaré físicamente, pero aun así, estaré contigo- se separó un poco para mirar los ojos de su líder- estaré en todo lo que hagas, porque dejaré tantas cosas aquí mías que nada más dar un paso en cualquier dirección, me encontrarás y sabrás que estoy aquí- el mayor sonrío sinceramente por primera vez en más de un mes- y ahora… cuéntame…
   -No quiero que te vayas…
   -Es mi deber- contestó- pero… ¿eso es lo que te preocupa?- el líder asintió y dejó de notar cómo el peso que sentía sobre sus hombros se aligeraba un poco- otra vez mintiendo…- murmuró KangIn.
   -Es la verdad… es porque te vas…
   -Y por algo más… ¿qué es ese algo?- LeeTeuk se mordió su labio inferiror con nerviosismo.
   -Si te lo cuento me odiarás- dijo al final y el menor sonrió.
   -¿Quién podría odiarte?- tocó su nariz con la suya- nadie puede odiarte, eres un encanto.
   -Te quiero.
   -Y yo a ti.
   -No de esa manera- KangIn se quedó callado unos segundos, pero luego su sonrisa se hizo más amplia.
   -Yo tampoco- el líder no supo que decir, pero se abrazó fuertemente a su dongsaeng- ¿era esto lo que te tenía preocupado?- el mayor asintió contra su hombro, siendo sincero por primera vez- babo- LeeTeuk sonrió y sintió como todo lo que lo había estado consumiendo por dentro, lo abandonaba poco a poco- no deberías mentir… hyung… cuando un ángel miente… provoca que los demás se preocupen por él…









lunes, 18 de febrero de 2013

La Verdad Tras El MV De No Other

La Verdad Tras El MV De No Other


   No Other. Así se llamaba la nueva canción. El líder de Super Junior peleaba con la persona encargada de hacer el MV porque quería hacer otra cosa completamente distinta a la que ese hombre proponía. Cuando Park JungSoo se proponía una cosa, hacía todo lo posible para llevarla a cabo, todo, así que, después de peleas y discusiones, acabó saliéndose con la suya. Salió del despacho triunfante, y se acercó a sus dongsaengs con una sonrisa de oreja a oreja.

   -Parece que lo has conseguido, ¿no JungSoo?- comentó HeeChul con algo de malicia.
   -Por supuesto que sí- contestó el líder- van a cambiar el guion, mañana nos lo dan y comenzamos a grabar.
   -Perfecto- dijo HeeChul- así me gusta.
   -Bien, ahora todos a descansar a casa- LeeTeuk encabezó la marcha, pero después de unos pasos se dio la vuelta cuando notó que nadie lo seguía- ¿qué pasa?- les preguntó. Todos se miraron para ver quien hablaba, hasta que al final, KyuHyu lo hizo.
   -Hyung… mmm… pues… esto… tenemos más cosas que hacer esta tarde, no podemos irnos…- LeeTeuk negó con la cabeza y sonrió de nuevo, formándosele el hoyuelo en su mejilla izquierda.
   -He conseguido que nos den la tarde libre.
   -Woahh- dijeron todos asombrados a la vez, y emocionados, salieron corriendo a abrazar a su querido y buen líder, incluso el arisco de HeeChul.
   -Ya, ya, niños… soltadme que me asfixio- todos soltaron al líder.
   -Eres el mejor hyung del mundo- dijo RyeoWook expresando los pensamientos de los demás.
   -Ah, ¿no soy yo el mejor hyung?- se indignó YeSung.
   -Tú también eres un buen hyung- contestó el eterno maknae abrazándolo.
   -Pero tú no nos consigues días libres- terminó KyuHyun.
   -Venga, niños, nada de peleas, dobles sentidos, ni comentarios maliciosos y a disfrutar de la tarde libre.
   -Sí- dijeron todos y salieron corriendo hacia la puerta.
   -Ains… estos niños…- murmuró el líder.

   Pero, ¿cuál era la razón por la que LeeTeuk había pasado por tantos problemas para cambiar la historia que contaba el MV?

    Flash Back.

   Abrazaba a KangIn fuertemente mientras éste escondía su rostro en su hombro y mordisqueaba la parte de piel del líder que quedaba expuesta y tenía a su alcance. Llevaban ya mucho rato así, en silencio, sólo abrazados sobre la cama. De repente, el menor, se dignó a hablar.

   -No me olvides- LeeTeuk se quedó unos momentos sin saber que decir, pero luego habló.
   -Tranquilo- susurró- yo nunca te olvidaré- acarició suavemente la cabeza rapada de su novio.
   -No dejes que nuestros niños me olviden.
   -Ellos te quieren mucho, no te olvidarán.
   -Las fans sí lo harán… a KiBum apenas lo tiene en cuenta ya…- murmuró. (N.A.: Aclaración, estos no son mis pensamientos, KiBum sigue en mi corazón ^^)
   -No te olvidarán, yo me encargaré de que no te olviden- dijo LeeTeuk- te nombraré en cada lugar al que vaya, contaré anécdotas tuyas, les recordaré siempre que volverás y que tendrás aquí tu sitio de nuevo, te lo prometo, nadie te olvidará.
   -Te quiero- KangIn alzó la cabeza y le dio un suave beso en los labios.
   -Yo también te quiero.

    Fin Flash Back.

   Y por eso fue que LeeTeuk se había tomado todas esas molestias, porque amaba a su dongsaeng, porque quería mantener su promesa y quería demostrarle que estando él allí, nadie lo olvidaría.






jueves, 17 de enero de 2013

Ginseng


Ginseng


   Me levanté esa mañana muy temprano, bueno, como siempre, e intente salir de la cama sin despertar al otro inquilino. Cuando lo conseguí, salí de mi habitación y me dirigí al baño a darme una ducha. Deje el agua correr hasta que estuvo caliente mientras me desnudaba, luego, me metí en la bajo el agua hasta que mis músculos se despertaron, a la vez que mi cerebro. Cuando termine de darme esa ducha reparadora, me dirigí de nuevo hacia mi habitación, encontrándome por el pasillo con un RyeoWook no muy despierto.

   -Buenos días, Ryeo- salude y el con un movimiento de cabeza hizo su saludo y siguió su camino hacia el baño.

   Me fui hacia mi habitación de nuevo, sonriendo, ése chico simplemente ni se había dado cuenta de que se había cruzado conmigo. Entré a mi habitación y descubrí al otro ocupante de mi cama medio despierto, estirándose como un gato.

   -Buenos días- murmuró.
   -Buenos días- me acerqué a él y le toqué la cabeza- ¿cómo has dormido?
   -Bien… hasta que te levantaste…- sonreí.
   -Eres un cielo…
   -Y tú un ángel- contestó y me puse algo colorado por sus palabras, así que, para que él no lo viera me giré y fui hasta mi escritorio, abrí un cajón y de él saqué mi toma diaria de mi revitalizante, para poder terminar ese largo día perfectamente.
   -He leído que eso es malo, hyung- dijo abrazándome por el cuello y quitándome mi toma de las manos, para después ponerse a mirarla fijamente. Me había sobresaltado al notarlo tan cerca, ya que no lo había escuchado salir de la cama, pero ahora estaba más tranquilo, pensando en que me tenía que devolver lo que me había quitado- tiene muchos efectos secundarios.
   -No es nada malo, es un revitalizante- intenté quitarle la toma, pero él la quitó de mi alcance- YoungWoon, dámela- ordené, pero él no me hizo ningún caso.
   -De verdad, hyung, esto a la larga te pasará factura…- murmuró.
   -Es una toma al día, ¿qué mal me va a hacer?- de nuevo fui a quitársela pero la apartó.
   -Tomada eventualmente, actúa cómo revitalizante, mejora la concentración y la memoria, y también sirve de afrodisíaco sexual- comenzó él- pero si se toma con regularidad puede provocar diversos trastornos… no es bueno que se tome más de dos meses seguidos, y yo te llevo viendo tomártelo ininterrumpidamente desde que regresé del ejército, y quién sabe desde cuando te lo estarás tomando…
   -No hace falta que me digas todo eso… ya lo sé, YoungWoon- tendí la mano hacia él- devuélvemela- pedí, él estuvo resistiéndose durante unos momentos, hasta que al final optó por dármela- gracias- dije, y me la tomé.
   -Sigo pensando que eso es malo.
   -Soy mayorcito, YoungWoon… sé lo que hago…- me giré y tiré el envase a la papelera y en ese momento, sentí sus brazos alrededor de mi cintura y su cabeza sobre mi hombro- ¿qué pasa ahora?
   -Sólo me preocupo por hyung…- murmuró en mi oído.
   -No hace falta que hagas eso…- me giré un poco y le di un beso en la mejilla- venga, y ahora suéltame para que podamos arreglarnos, que tenemos que ir a ensayar- pero él no me soltó, se apretó más fuertemente a mí- YoungWoon…
   -¿Cuándo te darás cuenta…?- preguntó en un susurro.
   -¿Darme cuenta de qué?- bufó en mi oído y luego comenzó a rozar mi mejilla con la suya, de una manera totalmente cariñosa, como un perro en busca de caricias.
   -De que te quiero, JungSoo…
   -Eso ya lo sé…- sonreí con cariño y le devolví el roce- yo también te quiero… os quiero a todos mucho, incluso al impertinente de HeeChul…- sentí cómo apretaba más fuerte mi cintura y sus músculos se tensaban.
   -Yo… no me refiero… a eso… yo… te quiero de otra… manera…
   -YoungWoon…

   No me dio tiempo a decir nada más. Fui girado en sus brazos, para quedar cara a él y ver su sonrojo durante unos instantes, hasta que sus labios chocaron contra los míos, húmedos, calientes y suaves. Me dejé llevar por el beso, aunque al principio me negara y poco después, ni siquiera supe cómo, acabamos tumbados en la cama, él sobre mí, comiéndonos la boca y lo que no era la boca, ya que sus labios habían pasado a mi cuello y estaba haciendo de éste su desayuno.

   -Mmmm… ahh… YoungWoon… para…- él paró de maltratar mi cuello y me miró a los ojos, los suyos brillaban de deseo, y los míos, también, pero debíamos parar esa locura ahí- por favor… dejémoslo aquí…
   -No puedo…- contestó pasando sus manos por mis costados, acariciándolos levemente- no ahora que hemos empezado… no ahora que tú me estás correspondiendo…- sus manos llegaron hasta la parte de debajo de mi pijama- no ahora…- paseó sus manos por encima de mi miembro, del que en ese momento fui consciente que estaba erecto- que te has tomado tu mejunje… y tienes cuerda para rato…
   -YoungWoon…- comencé, pero él empezó a tocarme esa zona tan sensible y dejé mi réplica a medias, la verdad, yo tampoco quería parar, no ahora que mi corazón latía desenfrenadamente… no ahora que necesitaba probar sus labios una y otra vez desesperadamente… no ahora que me había tomado mi mejunje y podía hacer el amor las veces que me diera la gana… no ahora… que tenía algo, que por fin, había liberado ese algo enterrado en lo más profundo de mi ser, que me decía que este saeng pervertido, malicioso y bromista, era especial… no ahora… que tenía lo que siempre había deseado tener… no ahora que…
   -LeeTeuk hyung… KangIn hyung- se escuchó la voz de RyeoWook en la puerta- se nos hace tarde.
   -Déjalos, ya saldrán- contestó EunHyuk.
   -Pero es que los demás nos están esperando…
   -No… no abras la puerta- al escuchar eso, y al ver el pomo de la puerta girarse, YoungWoon dejó lo que estaba haciendo, para tirarse sobre mí en modo abrazo de oso y así fingir que dormíamos en el mismo momento en el que la puerta se abrió.

   -¿Ves, Ryeo? Están durmiendo- dijo EunHyuk- y ahora, vámonos y dejémosles tranquilos.
   -Pero tenemos ensayo…
   -No se van a morir por perderse un día de ensayo… además… LeeTeuk siempre está haciendo miles de cosas, debería descansar…
   -Sí… tienes razón…
   -Pues ahora vámonos…- se escuchó la puerta cerrarse, y unos segundos después, también se oyó la del apartamento.
   -Bien…- murmuró YoungWoon separándose un poco de mi cuerpo…- ¿por dónde íbamos?- y se inclinó sobre mí para besarme fogosamente los labios.



martes, 30 de octubre de 2012

Siempre Te Esperaré


Siempre Te Esperaré


   Fue algo muy duro separarme de ti la primera vez, ahora, la segunda, después de encontrarte por un breve tiempo, se me hace todavía más duro.

   -No quiero- lloriqueo como un niño pequeño sobre el regazo de YoungWoon.
   -JungSoo…- susurra mientras me sigue acariciando el cabello, aunque ya no tenía pelo que acariciar, me habían rapado la cabeza, y estaba horrible- ya no eres un niño, eres un hombre hecho y derecho, compórtate cómo tal…- no lo dice demandante, pero sí algo cansado de mis pataletas, llevaba dos semanas así.
   -Soy un niño…- susurro ahogándome con mis lágrimas y mis mocos. Inspiro fuerte, y me limpio un poco la cara con la manga de mi camiseta, que ya está asquerosa.
   -Esto es algo por lo que todos tenemos que pasar- me contesta- debes ser fuerte, y, además, podrás venir de vez en cuando de visita…
   -YoungWoon…- susurro- yo no quiero separarme de ti de nuevo… es… superior a mis fuerzas…
   -Yo tampoco quiero separarme de ti- dice- pero hay que ser fuertes para así poder demostrar que pase lo que pase, nos seguiremos queriendo… aunque tengamos que estar separados durante un tiempo…
   -No soy fuerte…
   -Claro que sí- YoungWoon me hace levantarme de su regazo y mirarlo a la cara, tomándome el rostro firmemente con sus grandes manos- tú eres muy fuerte, eres LeeTeuk, el líder de Super Junior, la persona más fuerte que he conocido en toda mi vida.

   No puedo contenerme más y me lanzo a besarlo. Él siempre intenta hacerme sentir bien, y lo consigue con sus palabras de ánimo. Además, debía de aprovechar cada oportunidad con él, no me quedaba mucho tiempo a su lado, y lo necesitaba, lo necesitaba tanto como al aire para respirar.

   -JungSoo…- me susurra cuando nos separamos brevemente para tomar aire. Es una advertencia. Si sigo a partir de ahí, ya nada podrá detenerlo.
   -Es mi última noche- le contesto- quiero sentirte.

   Me muevo sensualmente y al final acabo sentado sobre él, de rodillas sobre la cama y con las piernas abiertas a cada lado de sus caderas. Las lágrimas siguen cayendo de mis ojos y corriendo por mi rosto sin que yo intente retenerlas. Quiero verme sexy para él, pero sinceramente, estoy horrible.

   -JungSoo…- comienza a secarme las lágrimas con sus dedos- no puedo hacer nada si estás así, sería algo horrible por mi parte…
   -No quiero irme…- intento tranquilizarme y no puedo- estoy así porque no quiero irme… de tu lado… me da igual la gloria militar… sólo quiero estar contigo…- consigo decir al final, después de atragantarme varias veces con mi lágrimas.

   Él suspira fuerte y apoya su cabeza en mi hombro, cansado de todo. Roza mi cuello con su nariz y aspira hondo tratando de adsorber mi aroma.

   -Lo haremos…- termina diciendo- cuando te tranquilices…- sonrío y me pego más a su cuerpo, abrazándolo por la espalda- pero no aquí…
   -¿Por qué aquí no?- pregunto, y él alza su cabeza. Una sonrisa traviesa adorna sus labios.
   -Si quiero que sea algo inolvidable, no nos pueden escuchar… y aquí… hay altas posibilidades de que lo hagan.
   -Es verdad- me refriego los ojos un poco intentando secar lo que queda de lágrimas en ellos- los niños…
   -Vamos al otro- susurra.

   Me levanto de sus piernas y él se levanta de la cama. Salimos de mi habitación en el apartamento grande, para dirigirnos a la suya en el pequeño. En el pasillo nos encontramos con DongHae hablando por el móvil, caminando de un lado al otro del pasillo. Nos despedimos de él con un movimiento de cabeza y seguimos nuestro camino.

   En el salón, viendo una película, estaban KyuHyun y SungMin, aunque el mayor no veía más que los sueños que estuviera teniendo porque se había quedado dormido abrazado al torso del menor.

   Ninguno se dio cuenta de que nos íbamos, así que, simplemente, nos limitamos a salir de allí y a dirigirnos al otro apartamento. Entramos y nos dirigimos directamente a su habitación. YoungWoon agarra mi mano fuertemente mientras caminamos hacia allí, y nada más pasar al dormitorio nos tumbamos en la cama abrazándonos.

   -Sabes que te quiero, ¿no?- me dice acariciándome el rostro con el dorso de su mano.
   -Lo sé…- susurró y él sonríe.
   -Esta noche haré que no se te olvide…

   Y comenzaron los besos, las caricias, los nombres susurrados, los suspiros, las respiraciones entrecortadas, y todas mis preocupaciones volaron a la vez que caía preso de una tremenda debilidad al llegar al orgasmo.

   -Te quiero- le digo a YoungWoon abrazándolo fuerte.
   -Yo también te quiero, para siempre.

   Flash Back.

   Ser fuerte, eso era lo que intentaba mientras KangIn se despedía de sus fans y se convertía en YoungWoon para comenzar su vida en el Ejército.

   Su vida se separaba de la mía por dos años, por algo que todavía no llegaba a comprender bien. Cuando entró y la verja se cerró tras él, mi fuerza comienza a flaquear y no lo aguanto más. Nada más entrar en el coche me derrumbo y mis dongsaengs intentan consolarme.

   Fin Flash Back.

   No puedo dormir, ni siquiera entre los brazos de mi amado. Sólo quiero pasar el mayor tiempo observándolo, observando cada detalle de su rostro, de su cuerpo, de su ser, para no olvidar nada, tal y como hice hacía algo más de un par de años.

   Flash Back.

   Durante una semana estuve como un loco, no sé como mis compañeros me aguantaban. Llegado el día, esperando en la puerta, mi corazón late fuertemente y al verlo de nuevo, se para de repente. Se detiene al verlo tan cambiado, tan fuerte, tan guapo.

   Sólo puedo caminar hacia él unos pasos y extender mis brazos para recibir su primer abrazo después de tanto tiempo. Volver a sus brazos, me hizo sentir calmado, feliz.

   -Bienvenido a casa, pequeño- le susurro y él sonríe.
   -Te he echado mucho de menos- contesta.

   Fin Flash Back.

   El sol comienza a asomar por entre los edificios de la ciudad de Seúl, trayéndome un nuevo día, un nuevo día en el que comenzaría una nueva vida, una en la que mi amor estaría lejos otra vez, una en la que mis compañeros no estarían a mi lado, una en la que todo lo que había conocido no me iba a ayudar, una en la que estaría solo…

   Mi nueva vida…





   Esto está dedicado a mi líder, a mi hombre y a mi niño. Todos son la misma persona y a todos amo. Estoy muy triste porque LeeTeuk se va, y durante dos años será Park JungSoo. Para no deprimirme demasiado pienso que esto serán unas merecidas vacaciones, y que cuando vuelva, será una persona todavía mejor que cuando se fue.

   Te quiero muchísimo y siempre te esperaré, no lo olvides.

   당신을 사랑