When
an Angel Lies
Cuando
un ángel miente, es que todo está mal, fuera de lugar y no tiene más remedio
que hacerlo. Cuando un ángel miente significa que por dentro está quebrado y ya
no le importa ir al Infierno por mentir. Cuando un ángel miente todo se ha
perdido ya.
-¿Estás
bien?- preguntó KangIn acercándose a él tras salir del escenario, pero no
obtuvo respuesta- ¿hyung?- le puso una mano en el hombro y el otro por fin reaccionó,
algo asustado porque no se esperaba a nadie con él, y menos que lo tocaran-
¿estás bien?- volvió a preguntar, preocupado, pero obtuvo una gran sonrisa como
respuesta, aunque sus ojos castaños reflejaban otra cosa.
-Claro
que estoy bien- dijo- ¿qué te hace pensar otra cosa?- preguntó intentando no
mostrar cómo se sentía por dentro.
-No
sé… parecías distraído allí arriba- contestó KangIn y obtuvo un fruncimiento de
labios del otro.
-Tengo
demasiadas cosas en la cabeza- respondió- ya sabes, cómo soy el líder, me tengo
que saber la agenda de todos, todos los días y arreglar los desajustes que haya
en cualquier sitio.
-Ya…
pero nunca antes habías estado así- llevó una mano al rostro de su hyung
distraídamente y le acarició la mejilla levemente.
-No
dormí muy bien anoche…- contestó alejándose del chico y poniendo una sonrisa
cansada.
-¿Cuándo terminas tu agenda?- le preguntó a su hyung y éste repasó en su
mente todo lo que ya había hecho.
-Ahora- dijo LeeTeuk y el menor sonrió.
-Yo
también- contestó- ahora te llevaré a casa, te haré una buena sopa caliente y
te arroparé para que duermas bien- y tras esto, se fue a cambiarse esa
estridente ropa de los escenarios y dejó a su hyung, quien bajó la comisura de
sus labios hasta que paró de verse su hoyuelo.
Aunque KangIn lo hiciera con la mejor intención, todo aquello hacía que
a LeeTeuk le doliera más, porque era la presencia del otro, lo que lo tenía
así, o su inminente no presencia. KangIn pronto no iba a estar a su lado.
Cuando un par de horas después,
ya en casa, y tras haber cenado una sopa caliente, ambos se encontraban en la
cama del líder. KangIn había insistido en que se quedaría más tranquilo si
sabía que dormía bien y LeeTeuk no había podido negarse. Por eso se encontraba
ahora abrazado por la espalda y sintiendo un cálido aliento en su nuca.
Debería ser capaz de dormir en aquellas circunstancias, pero no podía,
su corazón martilleaba ensordecedoramente contra sus costillas al sentir
aquella presencia tras de sí y estaba en tensión aun con aquellos cálidos y
reconfortantes brazos rodeándolo.
-¿No
puedes dormir?- escuchó preguntar a KangIn en su oído.
-No…- susurró y el menor lo atrajo más hacia sí.
-¿Mejor?- preguntó y LeeTeuk asintió mientras una solitaria lágrima
descendía por su mejilla- ¿estás bien?
-Sí…- mintió y sintió cómo algo moría en su interior, porque cuando un
ángel miente, se va consumiendo lentamente.
-Vale…- susurró KangIn y poco después, se quedó dormido, pensando en qué
hacer para volver a ver la sonrisa de su hyung.
Los
días pasaban y LeeTeuk cada día estaba peor. Apenas atendía a lo que se le
decía, no sonreía y casi siempre estaba en su mundo, parecía más YeSung que el
líder de Super Junior al que todos respetaban y que todos apreciaban.
Cada
vez que se le hacía la pregunta: “¿estás bien, hyung?”, él asentía y ponía una
sonrisa falsa, para después darse la vuelta e ignorarlos a todos, volviendo a
su mundo.
-¿Hyung?- llamó KangIn. Ya había pasado un mes desde que el líder estaba
mal y eso hacía infeliz al menor.
-¿Sí?- contestó el líder intentando aparentar normalidad.
-¿Estás bien?- preguntó por millonésima vez.
-Claro- LeeTeuk esbozó una sonrisa, pero no convenció para nada al
menor.
-No
me mientas- dijo KangIn- no me mientas a mí, no te mientas a ti- se acercó y lo
abrazó por los hombros- no nos mientas a todos y deja salir todo aquello que te
preocupa- el líder se dejó abrazar, sintiendo la calidez de aquel cuerpo y
grabándola en su mente, pero no dijo nada- vamos… sabes que por muy malo que
sea nunca dejaré de estar a tu lado.
-Dentro de unas semanas ya no estarás a mi lado- susurró LeeTeuk.
-Físicamente- rectificó el otro- no estaré físicamente, pero aun así,
estaré contigo- se separó un poco para mirar los ojos de su líder- estaré en
todo lo que hagas, porque dejaré tantas cosas aquí mías que nada más dar un paso
en cualquier dirección, me encontrarás y sabrás que estoy aquí- el mayor sonrío
sinceramente por primera vez en más de un mes- y ahora… cuéntame…
-No
quiero que te vayas…
-Es
mi deber- contestó- pero… ¿eso es lo que te preocupa?- el líder asintió y dejó
de notar cómo el peso que sentía sobre sus hombros se aligeraba un poco- otra
vez mintiendo…- murmuró KangIn.
-Es
la verdad… es porque te vas…
-Y
por algo más… ¿qué es ese algo?- LeeTeuk se mordió su labio inferiror con
nerviosismo.
-Si
te lo cuento me odiarás- dijo al final y el menor sonrió.
-¿Quién podría odiarte?- tocó su nariz con la suya- nadie puede odiarte,
eres un encanto.
-Te
quiero.
-Y
yo a ti.
-No
de esa manera- KangIn se quedó callado unos segundos, pero luego su sonrisa se
hizo más amplia.
-Yo
tampoco- el líder no supo que decir, pero se abrazó fuertemente a su dongsaeng-
¿era esto lo que te tenía preocupado?- el mayor asintió contra su hombro, siendo
sincero por primera vez- babo- LeeTeuk sonrió y sintió como todo lo que lo
había estado consumiendo por dentro, lo abandonaba poco a poco- no deberías
mentir… hyung… cuando un ángel miente… provoca que los demás se preocupen por
él…
Hay una canción de maná que se llama "cuando los angeles lloran" y no se porque cuando he leido esto me ha recordado a esa canción xd.
ResponderEliminarPor lo que veo que casi todo lo que has escrito es de ellos era de cuando se iba Kangin. Cuando tengas tiempo deberias hacer uno con la vuelta maravillosa de leetuk, aunque hiciste uno pequeñito xd.
¿Sí? No lo sabía, la tengo que escuchar, debe ser preciosa ^^
EliminarLa verdad es que sí... Porque cuando escribí estas cosas quería ser dramática y la ida de KangIn (y su vuelta y la ida de LeeTeuk) me tenían melancólica XD Algún día, sí, pero la cosa es que ahora SuJu no me inspira mucho XD