EXO

Capítulo 5

I’m Sorry

   Al final, después de esa pequeña conversación sobre como LuHan había conocido a SeHun, seguimos andando y llegamos al apartamento en el que vivíamos. Al entrar en el portal nos llevamos una sorpresa bastante grande. Allí estaba nuestro casero, con un montón de maletas intentando cargarlas hasta su casa de la planta baja.

   -SooMan sunbae- dije y fui hacia él a ayudarlo con una maleta que pesaba demasiado.

   -Oh, YiXing, es bueno volver a verte- contestó y ambos terminamos de entrar la maleta.

   -¿Qué hace aquí?- le pregunté interesado, ya que el hombre rara vez iba por aquel lugar, aunque todos los apartamentos de aquel edificio fueran suyos.

   -Me he cansado de mi vida en el campo y quería volver a la gran ciudad- respondió- ¿y dónde mejor que en un lugar que es completamente mío?- sonreí- oh… ¿quién es esa chica tan guapa?- preguntó y yo me giré hacia donde señalaba, encontrándome con LuHan. Sonreí ante la cara de malas pulgas que puso y luego me volví hacia el casero.

   -No es una chica- dije y el hombre se sorprendió- es nuestro nuevo compañero.

   -¿Él es el chico?- preguntó y yo asentí- encantado de conocerte- se dirigió hacia él- debes ser Xi LuHan, entonces- él asintió- ¿cómo se están portando los chicos contigo?

   -Bien, sunbae- contestó él.

   -Me alegra- se volvió hacia mí- si no es molestia… ¿os importaría ayudarme con las cosas?- negué con la cabeza.

   -Será un placer.

-oooOOOooo-

   -Minnie…- me llamó mi compañero de habitación, pero yo seguí a lo mío, debía acabar de leerme aquel capítulo, ya que el profesor nos haría una prueba al día siguiente- vamos Minnie… hazme caso…- terminé de leer un párrafo y me volví hacia él.

   -Jong… intento hacer esto para sacar buena nota, si tú eres tan listo que no necesitas hacer nada más que el examen, no me molestes- contesté algo cabreado y él frunció sus labios mirándome mal por encima de las gafas enormes que ahora utilizaba.

   -Es que llevas toda la tarde con el libro- murmuró- el capítulo no puede ser tan largo…

   -Desde la página 23 a la 132- dije.

   -¿Por cuál vas?

   -Por la 129- una sonrisa triunfante apareció en su rostro.

   -Te dejo entonces, por ahora.

   -Gracias- y seguí leyendo, notando sus ojos fijos en mi espalda.

-oooOOOooo-

   Apagué la tele. Ya me había cansado de intentar ver aquel dorama con Kevin dando vueltas por el salón como si fuera un león enjaulado y murmurando como una vieja. Me crucé de brazos y lo miré fijamente, unos momentos después, él me devolvió la mirada.

   -¿Por qué estás así?- le pregunté.

   -YiXing me dijo que iba a detenerlo- contestó- si lo hubiera hecho no tardarían tanto.

   -Tú mismo has dicho antes que pasaría como en el pasado… que no podrían estar separados.

   -Sí, pero…- intentó protestar, pero no lo dejé.

   -Kris- llamé y él me miró- ven y siéntate- y él lo hizo.

   -Odio cuando me condicionas de esta manera- murmuró cruzándose de brazos.

   -Es la única manera de que hagas caso y pienses.

-oooOOOooo-

   Nada más llegar a casa, ambos subimos a mi habitación sin prestar atención a nada. Me había mosqueado un poco eso de que BaekHyun quisiera hablar conmigo de una manera tan seria. Bueno, no me había mosqueado, me había asustado. ¿De qué quería hablar? Lo miré mientras me sentaba en mi cama y me temí lo peor. A lo mejor me iba a decir que él no me quería, que dejara de decir chorradas y cosas así. Eso antes me habría provocado dolor, ahora… ahora me mataría.

   -Channie…- murmuró caminando hacia mí- yo…- se colocó delante de mí y tragó saliva- Channie…- sus ojos me miraban de una forma muy penetrante, tanto que parecía que intentaba atravesarme con ellos. No pude aguantar su mirada y desvié la mía, hacia sus labios, mordiéndome los propios con deseo- Channie…- volvió a susurrar, y el movimiento de sus labios diciendo mi nombre fu algo que no pude soportar.

   Llevé mis manos a su cintura y lo atraje hacia mí, abriendo mis piernas para quedar más cerca. Después, alcé mi cabeza aprovechando que aunque él estuviera de pie, podía llegar hasta sus labios y lo besé. No fue más que un leve contacto con sus suaves labios que me hizo salir de mi ensimismamiento, dándome cuenta de lo que había hecho. Me alejé rápidamente, agachando mi cabeza avergonzado.

   -Lo siento- murmuré.

   Noté sus manos en mi rostro y sentí un escalofrío por el contacto. BaekHyun me alzó la cabeza de nuevo y se situó muy cerca. Sentí su aliento cálido durante unos segundos antes de volver a tener sus labios contra los míos.

   -No te disculpes…- susurró cuando nos separamos- puedes besarme siempre que quieras…

   -¿Puedo besarte ahora?- pregunté como en una nube.

   -Sí- y nos volvimos a besar.

-oooOOOooo-

   Después de que pasara un rato allí sentado, escuché la puerta abrirse y me levanté como un resorte del sofá. Por ella entraron YiXing y LuHan, hablando animadamente y sonriendo. Me entró una mala leche infinita por el cuerpo. Fue un sentimiento parecido al que tuve cuando vi a YiXing con la espalda al descubierto, siendo toqueteado por JongDae y gimiendo. No pude contenerme y fui hacia ellos. Cuando YiXing me vio, dio un paso hacia atrás marcando distancias.

   -Kevin- murmuró, pero antes de que pudiera decir nada más, lo agarré bruscamente por la nuca y planté mis labios sobre los suyos, de una manera demandante. Cuando el beso se cortó él volvió a intentar hablar, pero volví a besarlo, esta vez de una forma menos brusca, saboreando cada rincón de su boca con mi lengua- ahh… Kevin…- suspiró entrecortado y en ese momento vi como Tao se llevaba a LuHan fuera del apartamento.

   -No hables- dije y pasé mis brazos por su cintura, apretándolo fuertemente contra mí para que sintiera la tirantez que con los besos se había instalado en mis partes bajas. Comencé a besar su cuello y bajé mis manos hacia su trasero, toqueteándolo y apretándolo mientras oía sus débiles suspiros en mi oído- te deseo…- murmuré contra su cuello.

   Lo hice envolver sus piernas en mi cintura y lo cargué hasta su habitación. Abrí la puerta como pude y luego lo senté en el escritorio, tirando varias cosas el suelo. No le eché muchas cuentas, pero hubo una cosa que me llamó la atención. Dejé el beso que había comenzado y me agaché al suelo a recoger aquello.

   Era una caja de condones. Cuando él se dio cuenta de lo que había cogido, intentó arrebatármela de la mano, pero no lo dejé y coloqué mi mano libre en su entrepierna, escuchándolo gemir fuertemente por el contacto y la presión que ejercía, debilitando también así, sus intentos de quitarme aquella caja de condones.

   -Kevin…- murmuró.

   -Eres un conejo travieso- murmuré y él me miró a los ojos, los tenía brillantes, como si fuera a llorar. Me aparté rápidamente de él, tirando la caja de condones al suelo mientras lo oía respirar profundamente antes de hablar.

   -Kevin… quiero guardar eso para el día en que no vengas a tomarme sí o sí…- dijo- quiero que esto signifique algo para ti… al igual que va a significar para mí…- respiró hondo otra vez- porque si la metes… será porque yo te he entregado todo de mí y quiero que tú me lo entregues todo igual…- lo observé mientras se bajaba de la mesa del escritorio para depositar un suave beso en mis labios- lo siento- susurró- pero todavía no estoy preparado para eso- intentó salir de su habitación, pero lo detuve dándole un abrazo por la espalda.

   -Lo siento, Lay- lo noté temblar entre mis brazos y le di un beso en la nuca para después salir de la habitación e ir al baño a bajarme aquella erección.

-oooOOOooo-

Me llevé a LuHan conmigo y salimos del apartamento mientras Kevin le comía la boca YiXing. No era algo muy agradable de ver, tampoco lo era escuchar los gemidos de YiXing, así que no tuve otro remedio, y parecía que LuHan me agradecía que lo hubiera sacado de allí. Nada más salir del ascensor me encontré con una persona que me extrañó ver, ya que hacía poco tiempo que me la había cruzado.

   -¿Victoria?- dije y ella sonrió.

   -Nos volvemos a encontrar, pequeño panda- contestó y yo me ruboricé. Llevaba años sin llamarme pequeño panda.

   -¿Has venido a verme?- pregunté y ella negó.

   -Pasaba por aquí y vi que el piso del 5 se alquilaba, así que pensé en trasladarme aquí con mis amigas- contó- está cerca de la Universidad y cerca de ti- sonrió- así mato dos pájaros de un tiro.

   -Oh, vaya… eso es…- no supe qué decir.

   -¿Magnífico? ¿Fantástico?- dijo ella.

   -No sé… es algo raro…- Victoria hizo un puchero y luego me pegó en el brazo.

   -Desagradecido…- murmuró- yo que lo hacía con buena intención…- y se giró hacia la puerta del Bajo, el lugar en el que supuestamente tenía su casa el casero, pero en la que no vivía. Iba a decir algo cuando noté que LuHan tiraba de mí.

   -¿Qué pasa?- pregunté.

   -Ese hombre me confundió con una chica antes, no quiero volver a verlo- contestó y me arrastró hacia la salida.

   -Adiós Victoria- pude decir antes de desaparecer y ver como ella me despedía con su mano y con una sonrisa.

-oooOOOooo-

   Me lancé en mi cama cerrando los ojos y suspiré de puro alivio. Se estaba muy bien en aquel mullido colchón después de haber hecho tanto esfuerzo. De repente sentí un peso a mi lado y supe que SeHun se había tendido conmigo. Sonreí.

   -Hunnie…- murmuré y él hizo un ruidito- ¿vas a verte con LuHan?

   -Sí- susurró- no puedo pasar tanto tiempo sin verlo.

   -Me alegra que hayáis podido arreglar eso…

   -Yo también me alegro- sentí sus brazos a mi alrededor y supe que se estaba acomodando para dormir- gracias por lo de hoy…

   -No hay de qué- contesté y le di un beso en la frente, para después quedarme dormido.

-oooOOOooo-

   -¿Has terminado ya?- oí preguntar a JongDae muy cerca de mí y me asusté al notar sus brazos alrededor de mi cuello y su barbilla sobre mi cabeza.

   -Sí- dije y él me giró para que quedara cara a él y me miró con una sonrisa.

   -Entonces vamos a congelar cosas.

   -¿Qué?- pregunté asustado, recordando cuando lo había congelado- no, Jong… yo…- él me miró adivinando lo que estaba pensando.

   -Esta vez no dejaré que me congeles- murmuró y me llevó con él.