Mostrando entradas con la etiqueta SHINEXO. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta SHINEXO. Mostrar todas las entradas

sábado, 18 de julio de 2015

There is no secret between us

Título: There is no secret between us
Autora: Minako Aino (Riz Aino / Annalovesasianboys) (@sbeaea)
Pareja: TaeKai (TaeMin x Kai) (SHINEXO – SHINee x EXO)
Clasificación: PG–13
Géneros: romance, drama y fluff
Número de palabras: 2.108 palabras
Resumen: JongIn y TaeMin nunca han tenido secretos entre ellos… hasta ahora…
Notas: fic escrito para el cumpleaños de TaeMin. Ya sabéis que este niño no es santo de mi devoción… pero bueno, estoy intentando no odiarlo con toda mi alma y este es un pequeño paso para conseguirlo.
Comentario de autora: tras ver el 4 Things Show de TaeMin del verano pasado, vino a mí una idea para hacer algo con ellos dos. TaeMin y yo no nos llevamos demasiado bien… pero lo tolero un poco cuando lo veo con JongIn. Espero que os guste ^^



domingo, 19 de abril de 2015

Running Man

Título: Running Man
Autora: Minako Aino (Riz Aino / Annalovesasianboys) (@sbeaea)
Pareja: TaeKaiHun (TaeMin x Kai x SeHun) (SHINEXO)
Clasificación: NC–17
Géneros: pwp, smut
Número de palabras: 2.912 palabras
Resumen: Kai acaba lleno de barro después de su pelea en Running Man y SeHun y TaeMin creen que será muy divertido si se lo quitan entre ambos.
Advertencias: sexo explícito
Notas: un gif bonito del programa.
Comentario de autora: estos tres fueron este verano al programa Running Man y en el momento me dieron muchas ganas de escribir algo, pero no lo hice. Reviendo el programa en Navidades me dije que lo hacía o lo hacía… y aquí está. Espero que os guste.


lunes, 5 de mayo de 2014

My Sister, My Friend

My Sister, My Friend

            Habían pasado unas semanas de la vuelta de TaeMin de Japón y todavía no había podido verlo. Tenía una cosa muy importante que contarle, pero por kakao talk no podía hacerlo, así que esperaba impacientemente a que mi mejor amigo pudiera venir a mi casa. Así que, el día que me confirmó que venía, estaba un poco nervioso, pero no dejé que el pánico me superara y me relajé tomándome un par de cervezas.

            Escuché el timbre de la puerta y fui a abrir, encontrándome a TaeMin en el umbral. Lo hice pasar y le llevé una cerveza cuando estuvo acomodado en el sofá y después me senté junto a él, cogiendo la fotografía que quería mostrarle.

            —¿Recuerdas que mis padres me contaron que antes de mí tuvieron una niña, pero que la tuvieron que dar en adopción porque en aquella época no tenían medios para poder criarla? —le dije y él asintió lentamente—. Estuve buscándola y la he encontrado.
            —Eso es fantástico —comentó TaeMin.
            —¿Quieres verla? —asintió, así que le mostré la fotografía. En cuanto vio a mi hermana, su rostro se heló—. ¿Taem?
            —Conocí a esa chica… En Japón —murmuró—. Se me insinuó en una discoteca… Kiko Mizuhara…

            Cuando mi amigo pronunció su nombre me quedé de piedra. Había conocido a mi hermana durante su estancia en Japón y ella se le había insinuado. Al parecer, teníamos los mismos gustos. En ese momento, una idea asaltó mi cabeza. Si mi hermana podía insinuársele, ¿por qué yo no?

            —Taem… —comencé con una voz suave—. Ya que estás aquí… ¿Por qué no te quedas esta noche en casa?
            —No estaría mal, tu sofá es mucho más cómodo que mi colchón —contestó, así que sonreí y me levanté del sofá, acariciando su rostro.
            —¿Quién te ha dicho que vas a dormir en el sofá?
            —¿Vas a dormir tú allí? —negué con la cabeza y me incliné un poco para quedar a su altura, estando así, muy cerca de su rostro.
            —No creo que esta noche vayamos a dormir mucho —le guiñé un ojo y, en ese momento, TaeMin pareció captarlo—. Solo dime una cosa, ¿arriba o abajo?

            La sonrisa que me dedicó no me dejó duda alguna de lo que quería, así que, me separé de él y fui directo a la cama, escuchando sus pasos detrás de mí.



martes, 8 de abril de 2014

I Can't Believe

I Can’t Believe


            Aquella era nuestra duodécima pelea en una semana. Nuestros nervios estaban a flor de piel por la salida del álbum en el que ambos participábamos, a pesar de pertenecer a distintos, incluso teníamos una canción juntos y eso, que debía ser motivo de alegría, hacía que mi corazón pesase y las dudas comenzasen.

Está bien si camino rápido, sin necesidad de coincidir contigo
Voy a comprar ropa para mí, en lugar de tu foto, me miro en el espejo

            Me gritas con tu potente voz y me encojo sobre mí mismo porque nunca antes has hecho eso. En ese momento parece que te das cuenta de lo que has hecho e intentas acercarte para hablar tranquilamente, pero yo me alejo de ti, caminando a paso ligero.

            Si lo único que querías era que no te volviera a mirar, no lo haré, para eso tengo mi reflejo.

Alguien opuesto a ti, se convirtió en mi condición
Los hábitos míos que no te gustan
Los aprovecho de nuevo, así tampoco te gustaré

            Decidí que cada vez que me cruzara contigo, haría cosas que te molestaran, para que así comenzaras a dejar de observarme, como si fueras un cachorro abandonado cuando creías que yo no te veía, para que dejaras de quererme, para que otros sentimientos sepultasen el amor que pudiera quedar en tu corazón.

El problema es que luego de irte, todas mis razones son tú

            Me sentía un poco estúpido haciendo las cosas que te molestaban solo para hacerte rabiar, para que me olvidaras. Ya no deberías importarme como algo más, solo tengo que dedicarme a cantar contigo y a sonreír como si fuéramos amigos durante las presentaciones; aun así, toda mi vida gira en torno a ti.

No puedo creerlo, sí, es verdad
Porque el que no estés a mi lado ha terminado conmigo
Por más que trato de liberarme, mis días se rigen por ti

            Mi corazón duele cada vez que estás cerca de mí, cada vez que nos cruzamos y ni siquiera me miras. No puedo creerlo, pero es la verdad, estás tan hondo en mi corazón que no puedes salir de él y con tus acciones me dejas completamente destrozado, aun cuando fui yo quien empezó con esto.

Incluso si me encuentro con un amigo, incluso si me encuentro con chicas
La razón es que intento pensar en otras cosas para vaciar mi cabeza de ti

            Me paso la mayor parte de mi tiempo con MinHo, intentando molestar a nuestro Maknae, haciéndole la vida imposible, pero él ya ha aprendido a defenderse de nuestros ataques y el blanco de nuestras burlas, se vuelve aburrido. De esa forma acabo en la sala de ensayos con TaeYeon, cantando una y otra vez el single del álbum, ese que tú cantas también, pero en chino.

Pero el problema es que sigo queriendo escuchar tu voz

            Intento no pensar en ti cuando salgo al escenario junto a TaeYeon, pero entonces recuerdo tu sonrisa cálida mientras cantas con LiYin y mi corazón duele porque lo único que quiero es que llegue nuestro turno y cantemos juntos aquella canción.

No puedo creerlo, sí, es verdad
Porque el que no estés a mi lado ha terminado conmigo
Por más que trato de liberarme, mis días se rigen por ti

            Sin poder creer que te amo tanto, sin poder asimilar que te he tenido que perder para darme cuenta de ello, sin poder hacer nada para que regreses conmigo, sin poder olvidarte; así son mis días.

Esa mano tan familiar, no
Tu esencia que está en lo profundo de mi alcance
Me lavo las manos y me pongo perfume
Me retuerzo para liberarme, dime que no eres tú, si no otro tú

            Cada noche sueño contigo, sueño que tus manos acarician mi cuerpo, que tu olor invade mis fosas nasales mientras nuestros cuerpos danzan a su propio ritmo, creando una intensa música con nuestros gemidos, casi creo que todo es real, pero entonces me despierto y todo se desvanece.

            No eres tú, tú no estás a mi lado ahora.

No puedo creerlo, sí, es verdad
Porque el que no estés a mi lado ha terminado conmigo
Por más que trato de liberarme, mis días se rigen por ti

            Estoy hundido desde que no estás a mi lado, me siento muerto sin tu presencia y lo único que necesito es que vuelvas conmigo, porque por más que intento librarme de estos sentimientos por ti, no puedo hacerlo.


            Te amo demasiado, JongDae.

sábado, 22 de marzo de 2014

Mutante

Mutante

            Llegué del trabajo agotado. Había estado todo el día persiguiendo a un mutante que se había escapado de las instalaciones del Gobierno. Su poder era el de controlar el tiempo, así que no era nada fácil encontrarlo, ya que mientras el tiempo estaba detenido para los demás, él simplemente avanzaba, dejándome atrás.

            Al final del día había sido relevado de mi puesto por mi compañero K. esperaba sinceramente que durante la noche capturara a ese maldito mutante, porque si por la mañana tenía que perseguirlo de nuevo, cuando lo encontrara no lo llevaría a las instalaciones, directamente lo mataría y luego diría que había sido un accidente.

            Fui al baño y me di una ducha relajante, después, intentando no hacer ningún ruido que despertara al otro inquilino del apartamento, mi novio JongIn, me dirigí a la habitación. Cuando abrí la puerta e iluminé con la linterna de mi reloj la estancia, descubrí que allí no estaba mi chico.

            Era algo extraño, no me había dicho que iba a salir. Claro que, yo tampoco le había dicho que iba a volver esa noche.

            Fui hacia el salón, dispuesto a esperarlo para luego echarle un sermón sobre la confianza en la pareja y, aunque él no supiera que yo trabajaba para el Gobierno, porque aquello era secreto, debía contarme qué era lo que lo había llevado a salir de casa por la noche cuando había muchas amenazas en Nueva Seúl.

            En el momento en el que entré al salón, escuché un sonido raro y el aire de una parte de la estancia tuvo un color raro durante apenas un milisegundo. Parpadeé y donde antes no había nada, ahora se encontraba mi novio con el sujeto al que había estado persiguiendo todo el día apoyado contra él, sangrando. JongIn alzó la vista y me vio. Sus ojos se abrieron como platos y el miedo se apoderó de ellos.

            En ese momento supe que mi novio tenía conocimiento de mi trabajo y que era un maldito mutante.



sábado, 1 de marzo de 2014

90' Line

90’ Line

            Cuando nuestros hobbaes de EXO debutaron me sentí muy orgulloso de todos ellos. Habían trabajado muy duro para poder llegar  a debutar, como todos lo que lo habíamos hecho y por fin todo su esfuerzo y trabajo se veía recompensado.

            Era el primer grupo que la empresa debutaba desde hacía varios años, porque después de F(x) no había debutado gente nueva, así que todo estaba patas arriba. Todo el mundo estaba preocupado, había sido una gran campaña de marketing y los chicos ya tenían bastantes fans, pero no por eso quería decir que el grupo fuera un éxito.

            Sin embargo, lo que más me preocupaba no era nada de eso, sino que uno de aquellos chicos, uno que compartía conmigo el mismo mes y año de nacimiento, se iba.

            ―Sé que la empresa hace esto para daros más alcance y más promoción ―comenté enredando al chico que yacía conmigo en la cama en las sábanas―. Pero… ¿Por qué eres tú quién se tiene que ir a China?
            ―No sé si lo recordarás, Jjong… Pero soy chino ―suspiró.
            ―Claro que lo recuerdo, a veces titubeas al hablar coreano ―contesté―. Pero no quiero que te vayas, LuHan…

            El chico se giró y se deslió de las sábanas en las que yo llevaba rato intentado atraparlo para que no pudiera salir de mi cama hasta el día del juicio final. Me miró a los ojos fijamente y yo no pude evitar caer en su mirada brillante.

            ―Sabes que voy a volver a Corea muchas veces. No es como si me fuera para no volver ―murmuró. Tomó mi mano y comenzó a darle besos a mis dedos, haciéndome cosquillas.
            ―Lo sé… Pero la 90’Line de la empresa se va a quedar muy vacía… Yo me voy a quedar muy vacío… ―repliqué.
            ―¿Acaso crees que yo no? ―preguntó haciendo un puchero―. Pero debemos aguantar.

            Lo miré durante unos momentos más. Su rostro dulce, sus labios pálidos, sus ojos castaños y luego asentí. No es como si no nos fuéramos a ver más en la vida, lo volvería a tener entre mis brazos muchas más veces y los dos nacidos en el noventa volveríamos a ser uno.



domingo, 17 de noviembre de 2013

Nombres OTPS

Hola Hermosas Criaturas.

Otra vez estoy aquí con una entrada random. Debido a que he visto que hay mucha gente por el mundo que no se sabe los nombres de las OTPS, he pensado que podría ayudar un poco con esta sección. Debo aclarar primero que yo tampoco soy una experta y que en la mayoría voy a poner lo que primero se me venga a la cabeza, pero bueno, se intentará.

En esta primera entrada os pondré las OTPS de EXO y de SHINee y para que sepáis más o menos mis gustos, os señalaré en negrita las que me gustan ^^

EXO

XiuHan/LuMin                                           
XiuRis/KrisMin                                                      
XiuHo/SuMin                                           
XiuLay/LayMin                                 
XiuBaek/BaekMin                          
XiuChen/ChenMin                            
XiuYeol/ChanMin                                       
XiuSoo/KyungMin                                   
XiuTao/TaoMin                           
XiuKai/KaiMin                 
XiuHun/SeMin

LuKris/KrisHan
LuHo/SuHan
LuLay/LayHan
LuBaek/BaekHan
LuChen/ChenHan
LuYeol/ChanLu
LuSoo/KyungHan
LuTao/TaoHan
LuKai/KaiLu    
HanHun/HunHan

KrisHo/SuKris
Kray/LayRis 
KrisBaek/BaekRis
KrisChen/ChenKris 
KrisYeol/ChanKris   
KriSoo/KyungKris   
KrisTao/TaoRis
KrisKai/KaiRis 
KrisHun/SeKris

SuLay/LayHo
SuBaek/BaekHo
SuChen/ChenHo
SuYeol/ChanHo
SuSoo/KyungMyeon
SuTao/TaoHo
SuKai/KaiHo
SuHun/SeHo

LayBaek/BaekLay                    
LayChen/ChenLay                     
LaYeol/ChanLay                            
LaySoo/KyungLay                                
LayTao/TaoLay                         
LayKai/KaiXing           
LayHun/SeXing

BaekChen/ChenBaek 
BaekYeol/ChanBaek
BaekSoo/KyungBaek
BaekTao/TaoBaek
BaeKai/KaiBaek
BaekHun/SeBaek

ChenYeol/ChanChen
ChenSoo/KyungChen 
ChenTao/TaoChen 
ChenKai/KaiChen
ChenHun/SeChen

ChanSoo/KyungYeol
ChanTao/TaoYeol
ChanKai/KaiYeol
ChanHun/SeYeol

KyungTao/TaoSoo                 
KyungKai/KaiSoo            
KyungHun/SeSoo

TaoKai/KaiTao 
TaoHun/SeTao

KaiHun/SeKai


SHINee

OnHyun/JongYu                                
OnKey/KeyNew                        
OnHo/MiNew               
OnTae/TaeNew

JongKey/KeyHyun 
JongHo/MinHyun
JongTae/TaeHyun

KeyMin/MinKey
KeyTae/TaeKey

2Min


SHINEXO

TaeKai/KaiTae


Próximamente más...

martes, 12 de noviembre de 2013

Lap Dance

LAP DANCE



–Muy bien, SeHun. Esto ya no tiene gracia –dijo un chico de pelo castaño y piel oscura y ojos igualmente castaños, aunque estaban ocultos tras una corbata–. ¿Dónde cojones me lleváis?
–Es una sorpresa –dijo SeHun, retirándose el flequillo rubio del rostro.
–Todos sabéis que odio las sorpresas –protestó el castaño.
–No te quejes, JongIn –reprendió LuHan agarrándolo por los hombros y guiándolo hacia la derecha–. Ya quisiera yo que hicieran por mí lo que estamos haciendo hoy por ti –le dirigió una mirada significativa a SeHun, que simplemente se encogió de hombros ante esta.
–Eso que acabas de decir no me da muy buena espina –JongIn se estremeció.
–Tranquilo, no te vamos a tirar por la ventana, ni nada parecido –dijo SeHun intentando tranquilizar al chico.
–No sé por qué… pero eso no me tranquiliza como debería… –el castaño se detuvo en mitad del pasillo, haciendo fuerza para que no lo pudieran mover sus amigos. Sin embargo, estos eran más fuertes que él y lo obligaron a seguir andando–. Me da miedo que me vayáis a hacer un rito satánico de sexo salvaje en cualquier sala. No me fío ni un pelo de vosotros.
–¿Sabes qué? –dijo LuHan–. No vas muy desencaminado con esos pensamientos.
–¿Qué?

JongIn comenzó a forcejear de nuevo, dispuesto a salir corriendo a la velocidad de la luz en el sentido contrario al que lo estaban llevando. No podía permitir que le hicieran cosas raras.

–Estate quieto, Kim JongIn –la voz de LuHan era bastante dura–. Cómo no dejes de forcejear me veré obligado a decirle a KyungSoo que “ese” regalo ñoño de cumpleaños anónimo fue tuyo.

El chico se congeló. Aquello era apuntar donde más dolía. LuHan era una mala persona y él sólo le había regalado aquel peluche de un lobo muy mono porque KyungSoo quería tener algo de lobo en la habitación en cuanto se enteró de que la canción con la que harían el ComeBack se llamaría Wolf. Había hecho como si el regalo lo hubiera encontrado en el buzón y luego se lo había dado al mayor.

Nadie se dio cuenta de nada, excepto LuHan.

–Eso es chantaje –dijo al final el chico.
–Lo sé. Y ahora sigue caminando.

Volvieron a reanudar la marcha a través de los pasillos de la empresa, esta vez sin que JongIn protestara. Había surtido su efecto la amenaza. El chico fue guiado por sus dos amigos, hasta que pararon varios minutos después y abrieron una puerta.

Entraron al lugar y por el sonido que hicieron sus pisadas sobre el suelo, JongIn supo inmediatamente que era una sala de baile.

–¿Qué hacemos en una de las salas de baile de la compañía? –preguntó, pero no obtuvo respuesta–. Me estoy mosqueando mucho, chicos…
–No te mosquees –dijo SeHun–. Ven –lo tomó de la mano y lo guio lentamente hasta el centro de la habitación, donde había una silla–. Aquí. Siéntate aquí.

El chico lo ayudó a sentarse y lo acomodó, sujetándolo fuerte mientras LuHan, silenciosamente se colocaba tras él y le ataba las manos a los reposabrazos de la silla. En cuanto JongIn sintió el roce le las cuerdas sintió pánico. No se fiaba ni un pelo de sus amigos.

–¿Qué me hacéis? ¿Qué es esto? –preguntaba moviendo la cabeza como si estuviera intentando encontrarlos.
–Nada, no es nada –dijo LuHan–. Qué pases un buen rato.
–¿Qué?

Los pasos de los chicos comenzaron a alejarse de él hasta que dejaron de oírse después de que cerraran la puerta. JongIn estaba de los nervios y también muy asustado. No solo le habían vendado los ojos para que no pudiera ver nada, sino que le habían atado los brazos y las piernas (ahora lo había notado) a la silla y habían desaparecido.

Al castaño le daba igual que SeHun y LuHan fueran sus amigos. Él los iba a torturar muy lentamente por lo que le estaban haciendo pasar.

A los pocos minutos, escuchó la puerta de la sala abrirse y pudo identificar, por el sonido de las pisadas que esta vez era solo una persona y no dos, seguramente alguien que lo había visto por la puerta iba a rescatarlo. JongIn sonrió, iba a poder llevar a cabo su venganza muy pronto.

–Por favor, ayuda –dijo, pero la persona que había entrado a la sala no dijo ni una palabra–. ¿Quién eres? ¿Por qué no dices nada? Por favor ayúdame. Mis enemigos mortales me han atado aquí y no puedo liberarme.

Sin embargo, ninguna de sus súplicas tuvo respuesta. JongIn empezó a ponerse más nervioso. ¿Y si era algún o alguna aprendiz y le estaba sacando fotos con el móvil para luego sacarlas en la red? ¿Y si era alguien pervertido que se iba a aprovechar de él? ¿Y si…?

Todos sus pensamientos se congelaron en el momento en el que sintió una mano ascendente por su muslo. Su cuerpo se tensó y comenzó a retorcerse.

Era un pervertido que lo quería violar.

De repente, las manos lo sujetaron firmemente y los pocos movimientos que aun podía hacer, se vieron reducidos a nada. El corazón del castaño latía rápidamente. Estaba asustado. Alguien lo iba a tocar allí donde no lo había tocado nadie sin su permiso.

Sentía asco, repulsión y esas manos solo se movían por sus piernas. JongIn creía que acabaría vomitando si aquel desconocido llevaba sus manos a alguna zona prohibida.

–No te preocupes –dijo una voz desconocida pero que tenía un punto conocido–. No voy a hacerte daño. Solo te voy a hacer sentir más placer del que jamás has sentido en tu vida.

JongIn se tensó ante aquellas palabras. ¿Cómo podía un desconocido decirle aquello? ¿Cómo podía tocarlo así, como nadie nunca más que él se había tocado? ¿Cómo podía dejarlo cuando lo único que quería era que “esa” persona lo tocara? Él y nadie más que él.

–No quiero. Nadie me tocará.
–¿Por qué? –preguntó el desconocido y JongIn juró que esa voz le sonaba demasiado como para que le fuera totalmente desconocida. Debía saber quién era aquella persona.

El castaño sonrió de lado, como tanto le gustaba a sus fans y dejó estático a su violador.

–Porque tú no eres él.

En ese momento, JongIn pensó que había ganado y que esa persona lo dejaría tranquilo, sin embargo erró en su suposición.

El otro chico simplemente se colocó entre sus piernas y comenzó a respirar contra la entrepierna del castaño. JongIn se retorció en la silla sin embargo el aliento cálido de su captor contra sus partes y aun con la tela de por medio lo estaba excitando de sobremanera.

Las manos del desconocido comenzaron a subir por sus piernas, tocando sus muslos por la parte interna. Cerca, muy cerca de la zona prohibida.

El castaño tragó saliva anticipando un movimiento que nunca llegó, ya que sintió al otro alejarse un poco de su cuerpo. JongIn respiró tranquilo por unos momentos y dejó escapar todo el aire que había estado conteniendo hasta que se dio cuenta de que su captor no se había ido, sino que había cogido el mando de la mini-cadena y había puesto el CD en el que estaban grabadas las pistas de las canciones que utilizaba SHINee para hacer mucho ejercicio.

–¿Cómo…? –empezó JongIn, pero el desconocido no lo dejó continuar con su pregunta.
–Así no nos escucharan –susurró en su oído roncamente, haciendo que un escalofrío recorriera el cuerpo del chico.

Cuando iba a detenerlo, a empujarlo, a alejarlo, no pudo, se había quedado sin fuerzas. Reconocía aquella sensación, la había tenido antes, pero en esos momentos no podía recordar el por qué ni con quién.

Su mente se había desconectado de su cuerpo y no podía pensar con claridad. Sin embargo, su cuerpo estaba más sensible que nunca a cualquier roce debido a que no podía ver nada y sólo tenía este sentido para guiarse.

JongIn sintió un peso sobre sus piernas y supo que el desconocido se había subido sobre ellas. Notó las manos de este por su torso, intentando colarse por su camiseta. Forcejeó un poco, pero en ese momento, ocurrió algo que lo dejó sin aire.

El otro se inclinó rápidamente hacia sus labios y los besó con desesperación. El castaño se quedó en blanco, dejándose llevar por el excitante beso que su captor le daba, jugando con su lengua, saboreando su boca y dejándose morder.

No quería, sin embargo no podía detenerlo.

Se sentía muy extraño, como si aquello fuera algo que siempre había querido hacer, como si fuera alguien a quien conocía, alguien a quien quería.

JongIn estaba hecho un lío. No podía pensar con claridad. Los labios del otro no le daban tregua y apenas podía respirar, al igual que sus manos, que no paraban quietas en ningún lugar de su cuerpo.

El castaño comenzó a sentir calor y a respirar entrecortadamente. Le estaban gustando demasiado aquellos roces, demasiado como para que fuera bueno.

De repente, el chico cayó en la cuenta de que era un desconocido, de que lo estaba intentando violar y de que no debería estar dejándose por mucho que aquello lo estuviera excitando. Rápidamente mordió con fuerza el labio inferior del otro hasta que notó un sabor metálico en su boca. La otra persona dejó de besarlo al momento, profiriendo un alarido de dolor.

JongIn se sentía sucio mientras normalizaba su respiración y regulaba los latidos de su corazón. Él amaba a una persona, pero se estaba dejando llevar con alguien que ni siquiera conocía. Se sentía como si fuera la peor persona del mundo. Si se llegara a enterar él de lo que había estado haciendo no se lo perdonaría en la vida.

–¿Por qué has hecho eso? –reprochó el otro.
–Estoy enamorado de una persona y no puedo hacerlo –contestó simplemente.
–Tu cuerpo no dice eso –murmuró el desconocido recorriendo con sus manos el cuerpo de JongIn, haciendo que este se estremeciera de placer.
–Me da igual mi cuerpo. Yo no quiero hacerlo.
–¿De quién estás enamorado? –un susurro ronco muy conocido, pero que JongIn no supo ubicar.
–No lo diré.
–¿Quién es él?
–Jamás te lo diré.
–¿Y si hago esto?

En ese momento el chico se deslizó y acabó de rodillas en el suelo, separando las piernas de JongIn con sus manos y metiendo la cabeza entre estas. Comenzó a masajear la entrepierna del otro, que se retorcía mitad lleno de placer, mitad lleno de repulsión.

Lo estaba tocando en un lugar que solo tenía el derecho de tocarse él mismo y lo estaba haciendo de una manera demasiado embriagadora. JongIn se fue abandonando de nuevo a esas sensaciones y solo pudo reaccionar cuando una respiración caliente chocó contra su miembro, ya erecto y fuera de su prisión.

–Te voy a hacer sentir bien –escuchó salir de aquellos labios antes de que estos comenzaran a hacer un gran trabajo con su excitación.

Los pensamientos del castaño estaban en contraposición. No quería dejar de sentir aquello, pero quería que se alejara porque solo podría darle permiso a una persona para que lo hiciera.

–Basta… –susurró–. Por favor, para. No quiero –su voz salió ahogada, estaba luchando por contener las lágrimas que querían escapar de sus ojos. No quería llorar, no quería parecer débil ante aquel desconocido, pero él no era TaeMin y nadie más que TaeMin podría hacerle jamás aquello–. Por favor, para… tú no eres él… tú no eres TaeMinnie…

El otro dejó rápidamente lo que hacía, dejando que el aire frío envolviera su miembro y se situó tras él para abrazarlo por el cuello. Aquella era una sensación demasiado conocida. Esos brazos cortos, ese aliento en su oído.

–Lo siento, JongIn… –una voz que reconocería en cualquier parte–. No quería hacerte llorar… solo quería hacerte sentir bien…
–¿TaeMinnie?
–Lo siento, pequeño –su abrazo se intensificó.
–Quiero verte… –susurró JongIn y el otro chico le quitó lentamente la venda de sus ojos. En cuanto estos quedaron liberados, el castaño se giró hacia él, sin poder creerse lo que estaba pasando–. Por favor, desátame.

El chico lo hizo. Primero desató sus piernas y luego fue a por sus manos. En cuanto JongIn estuvo liberado, se levantó rápidamente de la silla y atrapó el cuerpo de su hyung en un abrazo.

–¿Por qué me has hecho esto? –preguntó, comenzando a hipar–. ¿Por qué?
–Porque me gustas y no me atrevía a decírtelo –susurró TaeMin–. Entonces le pedí ayuda a LuHan hyung y a SeHunnie…
–Nunca le hagas caso a esos dos pervertidos –murmuró JongIn contra la boca del otro–. Me gustas mucho, TaeMinnie.
–Y tú a mí, JongIn.

Durante unos momentos, se miraron a los ojos, sin decidirse a cortar la distancia, pero como si se hubieran puesto de acuerdo, ambos lo hicieron a la vez. Sus labios, lenguas y dientes chocaron en un beso completamente desesperado que lo dijo todo. Solo se separaron cuando la falta de aire se hizo necesaria.

–TaeMinnie…
–¿Sí?
–Estoy excitado…
–Yo también…
–Hagámoslo.
–Sigamos donde lo habíamos dejado.
–No me ates, ni me ciegues… quiero ver tu expresión al llegar al orgasmo…


Los besos, los roces y los mordiscos dieron paso a una danza de cuerpos de dos bailarines en la que ambos acabaron gritando el nombre del otro cuando el placer les llegó.