Título: It’s not what it seems (it’s worse)
Autora:
Riz Aino
Pareja:
JohnHyuck (Johnny + HaeChan) (NCT)
Clasificación:
NC–17
Géneros:
romance, humor, smut, pwp
Número de palabras:
1.126 palabras
Resumen:
cuando Johnny entra a la habitación que comparte con DongHyuck, se encuentra
algo que no se esperaba.
Advertencias:
masturbación… nada más y nada menos que eso.
Notas: tenía la idea
de hacer algo un poco más picante en contraste con la otra historia del ship
para la colección.
Comentario de autora:
llevaba de bloqueo existencial más de dos meses cuando al final me puse y
escribí esto de una sentada. Espero que os guste.
It’s not what it seems (it’s worse)
—¿Piso? Para mí solo. ¿Habitación? Cerrada. ¿Persianas? Bajadas.
¿Pañuelos? Justo al lado. ¿Airpods? Debidamente conectados al móvil. ¿Lista de
reproducción de youtube? Esperando para darle al play.
DongHyuck, sentado
sobre la cama de Johnny, en la habitación que ambos compartían en el dormitorio
de la quinta planta, recitaba todo aquello como si fuera una lista que tenía
que comprobar. Obviamente, todos esos eran los pasos que tenía que seguir para
que nadie lo interrumpiera. El chico siempre tenía que medir muy bien los
tiempos para que no hubiera nadie en el lugar, en la habitación preferiblemente,
si había alguien en el piso, con asegurarse de que nadie no pudiera entrar, lo
tenía todo listo. No eran muchas las oportunidades que tenía para aquello —cuando
se iban de giras solía aprovechar cuando tenía la habitación sí solo, pero
desde hacía cerca de un año no habían podido hacer giras— y tenía que
aprovechar aquella oportunidad de oro. Todos se habían ido a pasar las
vacaciones del año lunar a sus respectivas casas y Johnny, que no podía volver
a casa, había decidido quedar con un par de amigos a pasar unos días.
Con todo preparado, DongHyuck le dio
al play al primer vídeo de la lista de reproducción, una fancam de Johnny, de
la actuación de Kick It. Aquella era una de las más sensuales que había en toda la
red de su compañero de grupo y era una de las que al chico le hacía sentir más.
Porque sí, a DongHyuck le ponía muchísimo Johnny. Y cada día que pasaba,
aquello iba a peor, sobre todo desde que habían comenzado a compartir
habitación, porque debido a aquello había comenzado a ver otros lados de Johnny
que no había podido ver antes. Y habían sido demasiados los días que había
tenido que correr al baño con un problema entre sus piernas porque no se había
podido aguantar las ganas de saltarle encima y comérselo entero.
Obviamente, todo aquello no iba más
allá de su imaginación y de sus ganas por el mayor, porque DongHyuck nunca
empañaría la relación de amistad que tenían solo porque Johnny estaba demasiado
bueno y se lo quería comer enterito. Ganas no le faltaban de que fuera real…
pero era algo que no se podía permitir por nada del mundo, por eso se
conformaba con ver sus fancams o vídeos sensuales que editaban las fans, con
canciones que hablaban sobre sexo de fondo. Con aquello le bastaba para que sus
fantasías fueran un poco más nítidas y pudiera disfrutar de unos momentos a
solas para tocarse y pensar que era Johnny el que lo hacía.
DongHyuck se bajó los pantalones un
poco y comenzó a tocar su miembro, que comenzaba a pulsar simplemente por las
imágenes que le enseñaba la pantalla de su móvil. Embriagado con el olor de
Johnny que lo envolvía por estar en su cama y metido de lleno en los vídeos,
poco a poco su miembro se empezó a poner duro y mucho más sensible. No iba a
necesitar más que unos minutos de aquello para acabar corriéndose, demasiado metido
en aquel mundo de fantasía en el que eran las grandes manos de largos dedos de
Johnny los que envolvían su pene como para prestar atención a cualquier otra
cosa.
Quizás debería haber prestado más
atención.
De haberlo hecho, habría escuchado
cómo la puerta del piso que compartía con la mitad de sus compañeros de grupo
se abría, el sonido del cerrojo avisándole de ello. También habría escuchado
los pasos por el salón y el pasillo que llevaban hasta la habitación en la que
se encontraba y, sobre todo, habría escuchado la puerta abrirse con el leve
crujido que siempre hacía, viendo a su compañero de cuarto entrar.
Sin embargo, DongHyuck no se percató
de nada de aquello y cuando se dio cuenta de que Johnny había llegado a casa,
ya era demasiado tarde.
—Buen chiringuito
el que te has montado —dijo Johnny, sobresaltándolo.
Inmediatamente
DongHyuck soltó el móvil sobre la cama, dejando a la vista que era una fancam
del mayor lo que estaba viendo, subiéndose los pantalones y quitándose los
auriculares mientras en su cabeza trataba de buscar una excusa.
—No es lo que
parece —fue lo único que acabó diciendo, incapaz de pensar en nada.
—No es lo que parece,
no… —murmuró Johnny acercándose a la cama y viendo en el móvil reproduciéndose
su fancam—. Es peor.
DongHyuck se dio cuenta de que en el
móvil seguía la fancam y rápidamente lo cogió para salir de youtube y bloquear
la pantalla, sintiendo que se quería morir porque siempre había tenido
muchísimo cuidado y nunca había querido que sus fantasías salieran a la luz.
Nunca había querido encontrarse en aquella situación con Johnny… pero allí
estaba, abriendo y cerrando la boca una y otra vez tratando de decir algo que
lo sacara de aquello, sin éxito.
—Hyung… —acabo
murmurando, sin saber qué más decir.
—No hace falta
que pongas excusas —dijo Johnny, acercándose a él—. Es normal masturbarse —añadió
sentándose en la cama frente a él—. Y es bastante normal hacerlo viendo vídeos
de gente guapa.
DongHyuck sintió el
olor a alcohol salir de la boca del mayor ahora que estaba cerca de él y supo
que quizás tenía una oportunidad de salir airoso de aquello y que al final no
fuera nada grave, pero tenía que actuar rápido, antes de que la cosa fuera a
más. Sin embargo, antes de que pudiera hacer nada, Johnny alargó su mano hacia
su entrepierna, tocando su miembro por encima de su pantalón de chándal y
DongHyuck no pudo evitar que un leve gemido escapara de sus labios.
—Vamos a jugar un
rato —le dijo, introduciendo su mano dentro de sus pantalones—. Vamos a pasarlo
bien.
Y DongHyuck supo en el mismo
instante en el que los dedos del mayor tocaron su miembro, que estaba
completamente perdido.
Notas
finales:
—Dejo el final y lo que pasa entre ambos a la imaginación salvaje de
cada una de las personas que se atrevan a leer esto.
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