I Can Fly

I Can Fly

            El doctor YiFan entró en su consulta y dejó las carpetas que llevaba en sus brazos sobre la mesa, después, se sentó en su silla de cuero y abrió la tapa de la primera carpeta. En la primera página aparecía la foto del paciente y esta parecía tener cara de psicópata —aunque claro, en aquel lugar la mayoría de las personas eran psicópatas, por lo que al doctor no tenía por qué extrañarle—, y también aparecía la mayor parte de la información que necesitaba para aquel primer encuentro, la restante se repartía en las siguientes veinte páginas.

            El joven médico comenzó a leer, abstrayéndose de todo lo que sucedía a su alrededor hasta que unos golpes en la puerta lo devolvieron a la realidad. Dijo un adelante con su voz grave y un enfermero de rostro fino y aniñado entró en la consulta, guiando a un muchacho muy alto que mostraba una sonrisa escalofriante. Aquel era Park ChanYeol, su primer paciente.

            —Le dejo aquí al señor Park —comentó el chico—, cuando acabe la consulta solo debe apretar el botón que hay sobre la mesa para avisarme —se acercó un poco al doctor—. Si tiene algún problema, solo debe apretar el botón que hay bajo la mesa —YiFan asintió lentamente—. Os dejo solos —y se fue.

            —Bien… —comenzó el doctor, pero fue interrumpido.

            —Eres nuevo —dijo el chico con una voz grave, más grave incluso que la suya—. ¿Dónde está el doctor SuHo?

            —¿SuHo? —preguntó el hombre, justo antes de caer en que debía ser su anterior médico—. Oh, el doctor Kim. Se ha ido de vacaciones y yo estoy a cargo de todos sus pacientes ahora. Mi nombre es Wu YiFan —se presentó.

            —¿Cuándo volverá?

            —Dentro de un mes.

            —Cuide de mí, entonces —el doctor asintió y miró sus papeles una vez antes de alzar la cabeza de nuevo y encontrarse en el paciente una expresión completamente distinta a la que le había mostrado hasta ahora—. Yo le podría dar algunas indicaciones de cómo tiene que tocarme para hacerme llegar al orgasmo.

            —Eso está fuera de lo que yo puedo hacer —comentó YiFan.

            “Trastorno disociativo de la personalidad” pensó “no creía que lo mostraría tan rápido, pero le ha alterado un poco ver a otra persona y no a su doctor habitual”.

            —SuHo lo hacía.

            “Si el doctor Kim lo hacía, yo puedo volar” se dijo.

            —Pero yo no soy el doctor Kim —contestó—, así que no puedo hacer eso por ti.

            —En la cama me comunico mucho mejor y si me dejas te haré sentir en el paraíso —ChanYeol le guiñó el ojo y YiFan suspiró.

            Podía tratar con todo lo que se le pusiera por delante, pero con un paciente pesado que se le insinuaba tan directamente era algo para lo que no estaba preparado. Wu YiFan tendría que hacer acopio de paciencia para todo lo que se le venía encima durante el mes de vacaciones del doctor Kim.