Título: I’m falling
Autora: Riz Aino
Pareja:
JiChan (JiBeom + JooChan) (Golden Child)
Clasificación: PG
Géneros:
AU, high school, romance, drama, fluff
Número de palabras: 848 palabras
Resumen: con cada cosa que JiBeom hace… JooChan se enamora más y
más de él.
Notas: esta historia ha sido escrita siguiendo la letra de la
canción I’m falling de Golden Child, porque me parece una maravilla y tenía que
usarla sí o sí aquí.
Comentario de
autora: estuve buscando qué
parejilla poner para esta última historia de la colección y vi que estos dos
niños eran muy tontos y bonitos juntos y al final caí en sus encantos y escribí
de ellos. Espero que os guste.
I’m falling
JooChan
no recuerda cómo comenzó, no recuerda cómo se enamoró perdidamente de JiBeom;
no lo recuerda, pero sabe a la perfección que el latido errático de su corazón
cada vez que el chico lo mira, le sonríe o le habla, es el síntoma principal
que le indica que está enamorado hasta las trancas de su amigo, aunque no es
solo eso lo que se lo indica. Cuando JiBeom no aparece por el instituto algún
día, JooChan no hace más que pensar en él, echarlo de menos, contar el tiempo
que le queda para volverlo a ver otra vez, como hace también los fines de
semana, porque su ausencia es demasiado perceptible para el chico. Es por eso,
para no echarlo terriblemente de menos, que JooChan ve su rostro en la mayoría
de sus sueños y siente que flota como en una nube en cada uno de ellos simple y
llanamente porque el rostro del chico aparece en estos.
Para
JooChan, que no recuerda cuándo comenzó a enamorarse de JiBeom, estar enamorado
de él se ha convertido en su rutina y, desde el fondo de su corazón, desea que
el chico comparta aquel mismo sentimiento y esté también enamorado de él,
aunque eso es algo que realmente no está en su mano. JooChan, no obstante, lo
desea con todas sus fuerzas porque si JiBeom también está enamorado de él, todo
sería perfecto para ambos.
El chico
no sabe si en el corazón de JiBeom él ocupa el mismo espacio que el otro en el
suyo, no lo sabe y le da muchísimo miedo preguntarlo porque si la respuesta es
negativa, JiBeom ya no se comportaría con él de la misma forma que lo ha estado
haciendo todo el tiempo que se conocen, por eso tiene mucho miedo a descubrir
su corazón, tiene mucho miedo a tratar de hacerle ver a JiBeom que su corazón
ha caído rendidamente ante él, pero JooChan sabe también que la única forma de
saber qué es lo que el otro siente es descubriéndose a sí mismo y, por eso,
cada día piensa que debe ser el día adecuado para confesar sus sentimientos,
para confesar que no puede dejar de pensar en él… pero cada día pasa y JooChan
no lo hace.
Sin
embargo, el aleteo de su corazón nunca cesa cuando está junto a JiBeom, no cesa
y se hace mucho más fuerte, lo que le indica a JooChan que cada día que pasa
está más y más enamorado del otro; tan enamorado que a veces su corazón duele;
tan enamorado que a veces salta de alegría y regocijo; tan enamorado que a
veces el chico no sabe qué sería de su vida si no tuviera aquel sentimiento por
JiBeom presente en ella de forma continua, porque éste se le ha metido bajo la
piel de una forma tan profunda que JooChan duda que en algún momento pueda
sacarlo.
Poco a
poco, a medida que crece su amor por JiBeom, también crece la determinación de
JooChan de querer saber cuáles son los sentimientos del chico hacia él, por lo
que, finalmente acaba por mentalizarse y acaba por confesar sus sentimientos
por el otro. Los segundos en los que espera la respuesta de JiBeom son bastante
angustiosos para JooChan, a pesar de que se ha mentalizado tanto para la
aceptación como para el rechazo. Su corazón late fuerte y dolorosamente dentro
de su pecho y es plenamente consciente de todo lo que lo rodea, del ruido que
hacen los estudiantes que cruzan los pasillos circundantes a aquel desierto en
el que ellos se encuentran, de su respiración y de cómo sus piernas cada vez se
le vuelven más de mantequilla. JooChan desea que la respuesta de JiBeom, lo
desea con todas sus fuerzas, pero casi desea más que el otro le dé la respuesta
pronto, sea cual sea esta, antes que hacerlo esperar durante mucho tiempo más
dentro de un torbellino de pensamientos, sentimientos, sensaciones que lo
ahogan.
Pero
JiBeom no contesta, JiBeom no pone en palabras su respuesta. El chico se acerca
hasta JooChan y lo abraza fuertemente contra su cuerpo para darle un beso en la
frente y su corazón se calma durante unos segundos antes de volver a enloquecer
porque a pesar de que la respuesta no ha sido dicha, es afirmativa. Entonces,
JooChan desea poder estar junto a JiBeom y compartir su amor por siempre.
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