El chico del Bubble Tea

Título: El chico del Bubble Tea

Autora: Minako Aino (Riz Aino / Annalovesasianboys) (@sbeaea)

Pareja: HunHan (SeHun x Lu Han) y leve Kray (Kris x Lay) (EXO)

Clasificación: PG

Géneros: AU, romance, humor

Número de palabras: 1.050 palabras

Resumen: Lu Han lleva siglos queriendo entablar una conversación con el chico que siempre pide un Bubble Tea en la cafetería de sus padres, pero a pesar de lo lanzado que siempre es, aquello es una tarea imposible… hasta que JongDae le da la clave para hacerlo.

Notas: esta historia es un side de “Foto en blanco y negro”.

Comentario de autora: junto con terminar el otro fic, me propuse terminar este side que tampoco llegué a acabar y así quitármelo de en medio también. Espero que os guste ^^

El chico del Bubble Tea

            Lu Han no paraba de observar al chico que siempre pedía un Bubble Tea en la cafetería cada vez que este llegaba al lugar y todas las personas que lo rodeaban se ponían de los nervios al ver que simplemente lo miraba como si quisiera desnudarlo con sus ojos, pero no era capaz siquiera de acercarse a tomarle el pedido. YiXing era quien más lo sufría, porque trabajaba con él todas las tardes en compensación porque su familia lo dejara quedarse en su casa, y quien tenía que atender al muchacho ante la incapacidad de Lu Han para decir una mera sílaba en su presencia. A todos les extrañaba que el siempre extrovertido y un poquito cabroncete de Lu Han no fuera capaz de acercarse a un chico y ligar con él porque lo tenía todo para no ser rechazado, pero él se empeñaba en observarlo solamente, como si de aquella forma, el chico, del que ni siquiera sabía el nombre, se acercara a él, movido por algún poder divino.

            Una tarde como cualquier otra, el chico del Bubble Tea apareció en el local, llamando la atención de Lu Han inmediatamente, que se quedó embobado sin atender a que estaba manteniendo una conversación con JongDae sobre la relación que habían comenzado hacía poco YiXing y YiFan.

            —Oye, ¿me estás escuchando? —se quejó el menor, viendo que el otro no le hacía caso—. ¿Lu Han? —al no obtener ninguna respuesta siguió la mirada de su amigo hasta dar con el causante de aquello.

            Era un chico alto, con el pelo tintado de rubio y un rostro fino con una expresión de estar cabreado con el mundo que a JongDae le sonaba muchísimo. Se enfocó un poco más en aquel muchacho y, unos segundos después, ya tenía la respuesta al por qué le sonaba. Junto a aquel chico se encontraba otro que JongDae reconocería hasta encerrado dentro de un botijo: su hermano menor JongIn, por lo que el otro debía ser su amigo del alma SeHun. JongDae esbozó una sonrisa porque tenía información que a Lu Han le interesaba y sacaría buen provecho de ella.

            —Conozco al chico por el que estás pillado —comentó mirándose las uñas, como quien no quiere la cosa. Lu Han rápidamente se volvió hacia él, interesado completamente en lo que él le quisiera decir—. Es amigo de mi hermano —dijo—. El chico moreno —aclaró.

            —No me lo puedo creer… —murmuró Lu Han—. ¿Es en serio? ¿No me estás tomando el pelo?

            —Me ofendes —JongDae llevó una mano a su pecho como si se sintiera demasiado ofendido por aquello—. Te lo de mostraré —el chico se aclaró la garganta y luego elevó la voz por encima del gentío, alzando su mano también para ser visible—. ¡NiNi! —dijo.

            Inmediatamente, el chico moreno se giró y buscó entre la multitud a la persona que lo había llamado, esbozando una sonrisa cuando encontró a JongDae. En apenas unos segundos, el muchacho se acercó a la barra, donde JongDae llevaba sentado un par de horas con un café ya frío mientras cotilleaba con Lu Han.

—Hola, hyung —dijo—. No esperaba encontrarte aquí.

—Yo tampoco —sonrió JongDae—. No sabía que frecuentaras este lugar.

—A SeHun le gusta venir después de clases a por un Bubble Tea —comentó—. Es adicto a esa bebida y le encanta la que le preparan aquí.

JongDae miró disimuladamente a Lu Han, que se había puesto colorado al saber que le gustaba lo que le preparaba y también al conocer, de una vez por todas, el nombre del chico del Bubble Tea.

            —Vaya —murmuró—. pues si queréis veniros conmigo aquí —señaló la barra—. Tengo favoritismo porque soy amigo del hijo del dueño —le guiñó un ojo a Lu Han.

            —Claro, se lo digo a SeHun y vuelvo —el chico se fue trotando por el local, en dirección a su amigo.

            —Como no aproveches la oportunidad que te estoy brindando, Lu Han —siseó JongDae—, acabaré por decirle yo mismo a SeHun que quieres estamparlo contra una pared y comértelo… —Lu Han asintió lentamente, con el corazón latiendo desbocado dentro de su pecho—. Eso sí, que sea en un lugar privado, el chico todavía es menor, asaltacunas.

            Lu Han obvió aquel último comentario porque sentía un revoltijo de emociones en su interior. Su corazón latía a mil por hora, un nudo de nervios se había instalado en su estómago, la garganta se la había quedado seca y las manos habían empezado a sudarle. Estaba nervioso y aquello no era algo que le hubiera pasado muchas veces, solo le pasaba cuando se trataba de SeHun. SeHun. Ojalá pudiera pronunciar aquel nombre en voz alta, ojalá pudiera gemirlo mientras ambos danzaban.

            —Buenas —dijo una voz desconocida y Lu Han alzó su cabeza para ver justamente al chico de sus sueños sonriéndole cálidamente.

            —Chicos, este es Lu Han —presentó JongDae—. Está siempre a vuestra disposición, así que pedidle lo que queráis.

            —¿Qué queréis tomar? —les preguntó con un hilo de voz a ambos, aunque su mirada estaba fija en SeHun.

            —Un Bubble Tea —respondió el chico—, el de siempre.

            Lu Han les tomó el pedido a ambos y luego comenzó a prepararlo como una sonrisa en su rostro, dándole las gracias internamente a JongDae por haber hecho algo como aquello y pensando que, ahora que lo tenía más cerca, no era alguien inalcanzable y que debía hacer progresos con él, con el chico del Bubble Tea.