Título: 훔쳐 (Steal your heart)
Autora:
Riz Aino
Pareja: TaeHa
(TaeJun + ParkHa) (LUCENTE)
Clasificación:
PG
Géneros:
AU, romance, fluff, humor
Número de palabras:
616 palabras
Resumen:
JongYeon hará todo lo posible por robarle el corazón a TaeJun… le cueste lo que
le cueste.
Notas: drabble
escrito para mis niñas del grupo de WhatsApp de LUCENTE.
Comentario de autora:
adoro a LUCENTE, los adoro demasiado porque es un grupo completamente perfecto
y cada vez que escribo de ellos soy de lo más feliz. Espero que os guste.
훔쳐 (Steal
your
heart)
—¿Dices que te has enchochado del chico que trabaja conmigo
en la cafetería? —cuestionó su amigo MoonSeong.
—No me he enchochado… —replicó JongYeon.
—Ah…
es verdad… —murmuró el otro, como si se hubiera dado cuenta de algo—. Que los
niños de ahora lo llamáis crush.
—Hyung… —se quejó
el chico, provocando la risa en el mayor—. No estoy enchochado… ni tengo un crush… hyung… esto es amor verdadero…
—JongYeon… —dijo MoonSeong seriamente—, que lo has visto dos
veces y simplemente te ha servido cafés… ¿qué te pasa en la cabeza?
—Tú eres un sieso que no te enamoras —replicó JongYeon—. Yo
me he enamorado de TaeJun y no voy a parar hasta que él no se enamore de mí
también.
Raro. JongYeon sabía que era raro
que se hubiera enamorado de aquella manera del chico, pero no había podido
evitarlo, se había enamorado perdidamente de él y lo único que deseaba era
poder robarle el corazón de la misma forma que TaeJun se lo había robado a él —aunque el otro se lo había robado sin ser
consciente siquiera de ello—, pero JongYeon iba a hacer todo lo que estuviera
en su mano para que el otro se enamorara también de él. Porque JongYeon otra
cosa no, pero era cabezota y persistente, y no se rendía por más difícil que
fuera el objetivo que quisiera conseguir, así que, no se rendiría hasta que
TaeJun no acabara queriéndolo un mundo —o hasta que el otro chico lo mandara a
la mierda directamente, que todo podía pasar—.
Así, comenzó la rutina de JongYeon,
la rutina de ir a aquella cafetería cuando eran los turnos de TaeJun y quedarse
allí todo el tiempo que podía, haciendo miles de cosas para no perder tampoco
el tiempo especialmente.
Siempre le pedía el café al chico
con una sonrisa encantadora y le decía cosas bonitas, hacía que el chico le
devolviera la sonrisa de la misma forma y poco a poco comenzó a entablar
pequeñas conversaciones con él cuando no había mucha gente. También, cuando
TaeJun recogía las mesas que estaban a su alrededor, le hablaba, le comentaba
cosas, y, cuando el chico no estaba especialmente ocupado acababa sentándose
con él a pasar el rato. Todo esto, hacía que JongYeon se sintiera cada vez más
emocionado —a pesar de las
miradas de desaprobación que MoonSeong le echaba cuando tenía el mismo turno
que el otro chico—.
Podía ser que había empezado todo
aquello por la locura del amor a primera vista, pero JongYeon estaba super
encantado con haberlo empezado porque TaeJun era un chico maravilloso y se
alegraba de haberse enamorado de él… aunque se puso todavía mucho más feliz
cuando finalmente el chico comenzó de verdad a darle bola a sus sentimientos y
JongYeon por fin pudo completar su objetivo de robarle el corazón a TaeJun,
porque vivir enamorado de aquel chico y que este estuviera enamorado también de
él era un maravilloso sueño.
Notas finales:
—Tenía ganas de algo super cuqui y monis y se
me ocurrió esta historia sobre la marcha, pero mientras la estaba escribiendo
me encantaba un mundo.
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