Título: The Fire
Autora: Riz Aino
Pareja: SeriHam (Lee SeRim + Ham
WonJin) (CRAVITY)
Clasificación: PG–13
Géneros: AU, romance, drama, fluff
Número de
palabras:
1.000 palabras
Resumen: quizás es por la forma hipnótica en la que el
fuego se refleja en sus ojos o quizás es SeRim realmente tiene sentimientos por
él… pero esa noche ya no puede contenerse más.
Notas: historia escrita para
Nina, que me la pidió en ao3.
Comentario
de autora:
al principio no sabía qué hacer con esta petición y le estuve dando vueltas
durante mucho tiempo y al final pensé algo de este estilo era una buena idea.
Espero que os guste.
The Fire
—Me voy
a dormir yo también —comentó MinHee, levantándose del sitio en el que había
estado sentado hasta el momento, justo después de que lo hiciera SeongMin—. Mañana
vamos a madrugar otra vez, ¿no?
—Sí —respondió SeRim—. Mañana
volvemos a salir temprano.
MinHee asintió y les dio las buenas
noches. SeongMin bostezó antes de despedirse de ellos y, después, ambos
acabaron metiéndose en la tienda de campaña que estaban compartiendo aquellos
días de acampada. Se quedaron entonces solos alrededor de la fogata SeRim y
WonJin. Era la primera vez que se quedaban solos desde que días atrás, antes de
que comenzara la acampada, WonJin le había declarado sus sentimientos. SeRim no
lo había estado evitando, no al menos conscientemente, pero ahora que estaban
solos, le gustaría poder salir corriendo, meterse en el bosque que los rodeaba
y perderse en él. Quizás eso era un poco cobarde y él nunca había sido uno,
pero por una vez no le molestaba ser un poco cobarde si tan solo podía escapar
de aquella situación porque no sabía cómo enfrentarse realmente a WonJin. ¿Qué
le podía decir? Nunca se había planteado si el menor le gustaba o no. El chico
había sido siempre uno más de su grupo de amigos y los quería a todos ellos por
igual, sin excepciones. No obstante, desde que el chico se le había confesado,
no había podido parar de pensar en ello por si, de alguna manera, encontraba la
respuesta indicada que no hiciera a WonJin desgraciado, porque no sabía cómo
interpretar sus sentimientos correctamente y no quería hacerle daño.
El silencio cayó sobre ellos, pesado, solo roto por el crepitar
del fuego en la fogata que tenían ante ambos y por los sonidos que emitían los
animales del bosque. Probablemente WonJin tampoco sabía qué decir para romper
aquel silencio y SeRim no lo culpaba, él mismo no sabía si lo más adecuado era
irse rápidamente a dormir, excusándose porque al día siguiente debían de
madrugar o quedarse allí, sin hacer nada más que mirar sus manos o al fuego. Se
sentía extraño estando allí solo junto al chico, cuando habían estado todos
allí, cenando y hablando sin parar, bromeando, todo había estado perfecto, pero
en aquellos momentos era raro. SeRim no pudo evitar mirar de reojo a WonJin
para ver qué era lo que el chico estaba haciendo, encontrándose directamente
con sus ojos, observándolo fijamente. Tragó saliva, su boca se le había quedado
de repente completamente seca, y se llevó la mano al pecho, su corazón latiendo
desbocado dentro de éste. No se había esperado que el chico lo estuviera
mirando de aquella forma, era por eso que había reaccionado de aquella forma,
no porque tuviera algún tipo de sentimientos por WonJin, ¿verdad?
—Hyung —le dijo WonJin, llamando su atención, haciéndolo
salir de sus pensamientos, provocando que SeRim tuviera que enfocarse en él—.
Si lo… que te dije el otro día… te hace sentir… incómodo… lo retiro —murmuró,
en voz muy baja, casi como un susurro—. No quiero que… todo entre nosotros… sea
raro… no quiero que me… evites o me trates… diferente… solo olvida lo que pasó…
y será como si… nunca hubiera pasado… —terminó, bajando su cabeza y mirando sus
manos.
SeRim no le contestó al momento
porque se quedó completamente paralizado tras escuchar aquello. En ningún
momento había querido herir a WonJin, pero la forma en la que había huido de él
casi sin percatarse de que lo hacía, lo había herido y se sentía un poco culpable
por ello. SeRim se mordió el labio inferior, indeciso sobre lo que hacer y lo
que decir. No quería hacer como si nunca hubiera pasado, no quería olvidar que
WonJin le había declarado sus sentimientos y no quería hacerlo, no quería
olvidarlo, porque eso sería ignorar por completo los sentimientos del chico y
realmente SeRim no quería ignorarlos, no sabía qué respuesta darle, pero no
quería ignorarlos y hacer sentir mal a WonJin por ello.
—No quiero olvidarlo —le respondió
al final—. No quiero hacer como si nunca hubiera pasado porque son tus
sentimientos y son válidos.
WonJin alzó su cabeza de nuevo y sus
ojos volvieron a mirarlo fijamente, expectantes. SeRim se quedó paralizado,
perdido en su mirada, sin saber qué más podía decir o hacer. Nunca había mirado
los ojos de WonJin durante tanto tiempo, nunca se había dado cuenta del color
chocolate oscuro que éstos tenían ni cómo eran dos pozos profundos en los que
se podía perder perfectamente, iluminados en aquel momento por la luz de la
fogata. Su corazón volvió a latir rápidamente dentro de su pecho y SeRim tuvo
que tragar saliva otra vez, lamiéndose los labios. Y quizás fue por la forma
hipnótica en la que el fuego se reflejaba en sus ojos o quizás fue porque SeRim
realmente tenía sentimientos por él… pero esa noche ya no pudo contenerse más.
SeRim se levantó del lugar en el que
había estado sentado toda la noche y caminó hacia WonJin, colocándose a escasos
centímetros de su cuerpo, tomando su rostro con sus manos y alzándolo, a la vez
que él se inclinaba hacia abajo. Sus labios se encontraron en un beso que SeRim
jamás había planeado y del que no sabía cuáles serían las consecuencias, pero
que en aquel momento le pareció la única respuesta.
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