martes, 21 de mayo de 2013

BAOZI


BAOZI


   Baozi. Así me había apodado LuHan. ¿Por qué? Él había contado una versión light en la televisión, pero la realidad era otra completamente distinta. La verdad era que un día, después de hacerlo, LuHan se quedó dormido y tuvo un sueño con bollos, y al despertar, lo primero que vio fue mi rostro, comparándolo con el de un bollo. Y así se me quedó el mote.

   Podría parecer que me importaba el que me llamase así, pero no era cierto. La verdad, me parecía bien, hasta había que darle la razón que en que si inflaba los mofletes y me ponía el pelo de punta, parecía un bollo completamente, así que, no me importaba. Además, aunque pareciera insignificante, aquello había hecho nuestra relación mucho más buena que antes, puesto que podíamos bromear sin cabrearnos. Pero todo tiene un límite.

   Nos insultamos, nos gritamos, nos ignoramos y dejamos de hablarnos durante bastante tiempo, hasta que nuestra mala relación comenzó a ser notada por los demás integrantes del grupo, y al final, JongDae un día me pilló por banda y tuve que contarle todo lo que pasaba. Él me dio un consejo muy útil, “aclarar las cosas con LuHan” pero yo no lo haría, no hasta que él se disculpara conmigo, y así se lo hice saber a JongDae.

-oooOOOooo-

   -¿Has hablado con él?- me preguntó YiXing en cuanto me vio aparecer por el salón, y yo asentí- cuéntamelo todo, JongDae- dijo, y le conté todo. Al final de la explicación, YiXing se levantó del sofá y me dio una palmada amistosa en el brazo- intentaré que el tozudo de LuHan se disculpe y así deje de haber tensiones, que tienen a Kevin de los nervios y ya me está poniendo de los nervios a mí.
   -Eso te pasa por compartir cama con él- murmuré, y él me dio una patada al estilo de nuestro KungFu Panda en la espinilla antes de irse del lugar- me aburro…- murmuré al rato- voy a ir a darle la lata al líder.

-oooOOOooo-

   Después de hablar con JongDae y que me lo contara todo, me dirigí a mi habitación, que compartía con LuHan, para hacerle entrar en razón, pero nada más verme, y sin haber llegado a decir ni una sola palabra, ya me estaba prácticamente echando de allí.

   -Si vienes a hablarme de él, vete.
   -No, me vas a escuchar- dije y él se encogió de hombros indiferente, así que me acerqué a él- esto se tiene que acabar, tú tienes la culpa y debes pedirle perdón, él está dispuesto a aceptar las disculpas y a hablar contigo.
   -No pienso hacerlo- me contestó.
   -Oh, claro que sí, cómo que me llamo Zhang YiXing que te vas a disculpar.

-oooOOOooo-

   No recordaba que YiXing fuera tan pesado, así que, al final, tras tres horas escuchando su sermón, acabé aceptando que debía pedirle perdón a MinSeok, así que, fui a la cocina e hice, como medianamente pude, unos pequeños bollos rellenos de carne. Después, con estos escondidos tras mi espalda, me dirigí a la habitación que éste compartía con Tao. Nada más entrar, le dije al pequeño que nos dejara y él así lo hizo.

   -¿Vienes a disculparte?- preguntó con recelo y asentí, acercándome a él, sentándome en su cama y dejando el plato con los bollos a mi espalda, para que él no los viera.
   -Lo siento… lo siento muchísimo- murmuré arrepentido, lo sentía mucho realmente y lo había echado tanto de menos, su sonrisa, su voz agradable, sus caricias- no tenía derecho- continué- lo siento, lo siento, de verdad, te quiero mucho, muchísimo… pero el orgullo…
   -Vale, vale- me cortó- no hace falta que te humilles más, te perdono- sonreí.
   -Bien… ya me he quitado un peso de encima- murmuré, pero seguí viendo su mirada sombría- ah, es verdad, tenemos que aclarar lo otro.
   -Sólo dejaré que me llames de una manera aparte de por mi nombre- dijo- baozi, y nada más- asentí y me lancé a sus brazos.
   -No sabes cuánto te he echado de menos- murmuré.
   -Yo también te he echado mucho de menos- susurró en mi oreja y fue entonces, cuando vio lo que había dejado detrás de mí. Se separó y alzó una ceja- ¿bollos?- asentí.
   -Y rellenos de carne- me giré y cogí el plato- como ofrenda de paz, como muestra de mi amor y porque es la única comida que me sale con un sabor medio decente.
   -Está bien- dijo él tomando el plato de mis manos y dejándolo en la mesita- lo acepto y te acepto a ti… te quiero, LuHan…
   -Yo también te quiero- y nos acercamos lentamente para fundirnos en un suave y tierno beso.






No hay comentarios:

Publicar un comentario