sábado, 14 de septiembre de 2013

Canella Passion {TaoKai}

5/8 Canella Passion {TaoKai}

   Estaba en mi habitación, solo, como me gustaba estar. En Seúl no había playa, por lo que no podía dar paseos por ella y el río Han siempre estaba lleno de gente y de sasaengs que me seguían a todos lados. Además, no era lo mismo.

   Me encantaba pasear por la orilla de la playa, sintiendo la fresca arena bajo mis pies y de vez en cuando, las olas romper suavemente contra mis tobillos. En el río eso no lo podía hacer.

   Por eso estaba allí, en la habitación que compartía con XiuMin ge, BaekHyun y ChanYeol hyung, solo. Los demás se habían ido a dar vueltas por la cuidad, a que les diera el aire en nuestro día libre. Me preguntaron si quería ir, pero prefería estar solo y pasear por la playa a ir con once chicos más a dar vueltas por una ciudad que parecía un hervidero.

   Me estiré en mi cama como un gato y me relajé. La soledad era lo mejor.

   En ese momento, la puerta de la habitación se abrió de par en par y yo me asusté. Había entrado un ladrón o peor, quizás había entrado alguna sasaeng y me quería violar. Me encogí sobre mí mismo e intenté hacer desaparecer mi cuerpo entre las sabanas. Pero claro, eso era imposible.

   Tenía miedo. Mucho miedo. Pasos se acercaban lentamente hacia mi cama. Gotas se escuchaban caer contra el suelo. ¿Y si era un fantasma como el que habían visto Chen y ChanYeol hyung en Rusia? Comencé a temblar y a sudar. Si era eso seguro que me mataría.

   De repente sentí cómo “eso” que había entrado tiraba de las sábanas para descubrirme, así que las agarré fuertemente, para no quedarme sin esta defensa natural. Pero “aquello” era muy insistente y también muy fuerte. En un par de tirones acabó por quitarme las sábanas de la cabeza y yo me tapé los ojos con las manos.

   -Si no lo veo, no existe- comencé a murmurar en chino- si no lo veo, no existe…
   -ZiTao, deja de hacer el gilipollas- dijo la “cosa” con una voz que me resultaba vagamente familiar.
   -Cállate, fantasma con voz conocida- contesté y “eso” comenzó a reírse de una forma que no podía confundir por nada del mundo. Solo él se podía reír así- no te rías como JongIn, fantasma- la risa se hizo mucho más fuerte y mucho más histérica de lo que ya era.
   -Dios, ZiTao- dijo- eres como un niño pequeño- una mano sólida en mi cabello y yo hice un bloqueo para quitármela de encima- joder, eso duele- gritó la voz y abrí un poco mis ojos, solo una rendija, para ver la cara de JongIn con una mueca de dolor.
   -Eres un fantasma con la apariencia de JongIn- dije y él me miró con una ceja alzada- vade retro, satanás.
   -Tío, soy yo, no soy ningún fantasma.
   -Imposible, estoy solo en casa- contesté.
   -Idiota- me intentó quitar las manos de la cara hasta que lo consiguió- no me he ido con ellos, he estado viendo una porno en el salón.

   Abrí mis ojos como platos. No podía ser un fantasma, solo podía ser JongIn. Me sentí como un tonto miedica e hice un puchero. Él tocó con sus dedos mis labios y me sonrió.

   -Es mi culpa- murmuró- no quería asustarte, debí tener más cuidado- asentí y él se inclinó sobre mí para darme un pequeño beso en los labios- ¿quieres ver una peli?
   -¿Porno?- pregunté y él asintió.
   -Solo tengo de eso en mi disco externo- fue lo que contestó.

   Ver una película porno con JongIn era la cosa más excitante que podías hacer en tu vida. La película hacía de ambiente y luego, cuando él estaba completamente excitado, comenzaba lo bueno.

   Pasear en soledad por la playa me gustaba muchísimo, pero tener sexo salvaje con JongIn mientras veíamos una porno era lo mejor del mundo.

   -¿Cómo se llama la película?- pregunté mientras me levantaba de la cama. Él me sonrió y comenzó a caminar en dirección al salón.
   -La que quiero ver se llama “El cartero siempre te la mete dos veces”- contestó.
   -Un título muy bonito- ironicé siguiéndolo y él se giró hacia mí con una gran sonrisa.
   -Un título de peli porno.

   Llegamos al salón y nos sentamos en uno de los sofás, muy cerca el uno del otro. Tan cerca estábamos que nuestros hombros se rozaban. Pero a mí eso no me molestaba, de hecho me encantaba porque esa cercanía hacía que lo bueno comenzara antes.

   JongIn cogió el mando de la tele y comenzó a rebuscar dentro de su disco externo la película que quería poner. Tenía un montón de porno, pude comprobar en ese momento. Me preguntaba cómo teniendo tantos archivos, sabía exactamente dónde tenía cada uno de ellos, porque solo vagó por unas cuantas de carpetas y ya tenía el archivo listo para darle al play.

   Me miró con una sonrisa pícara antes de hacerlo y luego soltó el mando y se acomodó bien en el sofá, pegándose mucho más a mí. Parecía que me tenía ganas. Yo también le tenía ganas. Hacía al menos un par de meses que no habíamos tenido tiempo para nada y menos para follar y desquitarnos un poco, relajarnos y reducir la tensión.

   Nos hacía falta sexo duro.

   La película comenzó y al principio, tras solo unos segundos, ya había una escena de sexo. Una chica estaba siendo follada por un uniformado cartero contra la pared de la entrada de una casa.

   Y desde ese momento, todo fue sexo, gemidos y cambios de ángulos de las cámaras que te enseñaban hasta el más mínimo detalle de la penetración.

   No pasó mucho tiempo cuando escuché a JongIn jadear levemente y supe que ya era hora de dejar de ver la película para ver algo mucho más excitante. Él miraba fijamente la televisión mientras con su mano derecha acariciaba levemente su pene por encima de la ropa, endureciéndolo.

   La cara de gusto que tenía en esos momentos me ponía a cien, mucho más que la película, que me dejaba un poco caliente, pero nada más. Esto era demasiado. Sus labios gruesos entreabiertos dejando escapar de vez en cuando un suspiro y sus ojos oscuros llenos de lujuria me llevaban por el camino de la amargura, pero también por el del placer.

   De repente, sentí una mano jugar con mi entrepierna y me tensé, pero inmediatamente me relajé al ver la sonrisa pícara de su rostro. Quería jugar conmigo y yo lo dejaría muy a gusto.

   Su mano era una experta en dar placer, aunque fuera la izquierda y él no fuera zurdo, la movía como si fuera la mano con la que hacía las cosas normalmente. Supuse que sería de los muchos años de práctica masturbándose con una y otra mano.

   Me tocaba por encima de la ropa, como estaba haciendo consigo mismo, pero ya estaba viendo las estrellas solo con eso.

   Cuando se escuchó un fuerte gemido procedente de la película apretó nuestros penes y ambos gemimos. Me pasé la lengua por los labios, que se me habían quedado resecos y lo vi morderse el labio inferior mientras cerraba los ojos, disfrutando de las sensaciones.

   No pude soportarlo más, así que me incliné sobre su cuello y comencé a besarlo, a chuparlo, a lamerlo, a mordisquearlo. Quería dejar marca, proclamar a los cuatro vientos que me lo follaba y era mío, pero la empresa había dejado muy claro que nada de tener marcas o las fans se nos echarían encima, por lo que me contuve de hacerlo.

   Subí por su cuello, llegando a su mandíbula, a la que le di un pequeño mordisquito y luego me desplacé besando hasta su oreja, que maltraté unos momentos.

   -Más…- le jadeé en pleno oído y él, por acto reflejo apretó mi pene de nuevo, haciéndome gemirle- mucho más…

   Mi orden fue acatada de inmediato, ya que en apenas unos momentos su mano ya se había colado por la cinturilla de mis pantalones y de mis bóxeres y tocaba la piel de mi miembro. Gemí de nuevo en su oreja por la sensación de placer que me estaba brindando.

   En ese momento, la película porno pasó a un segundo plano y nos concentramos el uno en el otro. Rápidamente, JongIn se sentó sobre mis piernas, dejando las suyas a cada lado de mi cuerpo, de rodillas. Sacó mi miembro de su prisión e hizo lo mismo con el suyo. Se apretó contra mi cuerpo y los juntó, comenzando a tocarlos a la vez y haciendo que se rozaran entre ellos.

   No paramos de gemir a partir de ese momento. Aquello se sentía demasiado bien. Piel con piel y movimientos acelerados. Era lo mejor del mundo.

   La temperatura de nuestros cuerpos comenzó a subir y el calor empezó a hacerse insoportable. Me quité mi camiseta y la lancé lejos, después lo hice dejar su trabajo con nuestros miembros para poder quitarle la suya. En cuanto sus brazos salieron de la camiseta, volvió con él.

   Nos mirábamos fijamente, con deseo, nuestras frentes estaban juntas y respirábamos el uno sobre el otro. Quería capturar sus labios. Quería seguir saboreando aquella piel color canela pasión y quería sentir su interior una vez más.

   El primero de mis deseos fue concedido. JongIn se inclinó más sobre mí y comenzó un beso en el que las lenguas y los dientes fueron los protagonistas. Cuando tuvimos respirar, nos separamos y nos miramos fijamente de nuevo.

   -Quiero que me la metas- demandó y yo sonreí.
   -¿Tenemos lubricante?- pregunté. Llevábamos mucho tiempo sin hacerlo y aunque quería metérsela hasta el fondo y a ser posible, ya, si lo hacía así, no podría moverse en unos cuantos de días.
   -No hace falta lubricante- se inclinó contra mi oreja- ¿por qué crees que antes he estado viendo otra peli porno?- susurró y luego me mordió el lóbulo- me estaba preparando para ti.

   No pude aguantarlo más y lo rodeé fuertemente por la cintura, para levantarme y cargarlo hasta cualquier otro lugar. Se la metería hasta el fondo. Él rio ante mi reacción, pero rápidamente se agarró con sus piernas a mi cuerpo y se dejó llevar. La primera habitación que encontré en mi camino fue el baño, así que entré, lo dejé en el suelo y cerré la puerta con el pestillo.

   -¿El baño?- preguntó.
   -¿Recuerdas que la última vez que lo hicimos en el salón nos echaron una bronca?- pregunté y él asintió- pues aquí no nos dirán nada.

   Me acerqué a JongIn rápidamente y le bajé los pantalones y los bóxeres en un suspiro. Después, hice lo mismo con los míos, dejándonos a ambos completamente desnudos y completamente excitados. Incliné mi cabeza y comencé a besarlo de nuevo. Sus labios gruesos eran de lo mejor que había en este mundo y debían estar prohibidos.

   Cuando nos separamos, me dirigí a la taza del váter y la bajé, para poder sentarme en ella cómodamente. En cuanto estuve colocado, le indiqué a JongIn que se subiera sobre mí y él lo hizo al momento. Mi miembro rozó su entrada y ambos jadeamos.

   -¿Estás seguro de que no necesitas preparación?- pregunté y él asintió.
   -No la necesito.

   En ese momento, agarró mi miembro con su mano y comenzó a descender, buscando su entrada. La punta rozó de nuevo contra ella y se mordió el labio inferior antes de bajar rápidamente y quedar sentado sobre mí, dejándome completamente dentro de él. Ahogué un gemido y él un gruñido.

   Nos miramos a los ojos mientras nos acostumbrábamos, él a la intrusión y yo a sentir esa calidez alrededor de mi miembro.

   Solo habían pasado unos momentos cuando JongIn comenzó a moverse. Primero empezó rotando sus caderas, haciéndome sentir cosas que nunca antes había sentido. Esa fricción en mi miembro me volvía loco y a él parecía que también, ya que de vez en cuando su rostro mostraba una inmensa expresión de placer.

   Comencé de nuevo a besar su cuello y ahora también su pecho, mientras JongIn se movía sobre mí. Adoraba esa piel, adoraba poder saborearla. Lo mordí un poco más fuerte de lo que hubiera debido cuando él empezó con el movimiento arriba y abajo. Lo miré con disculpa, pero él estaba concentrado en subir y bajar lentamente de mi cuerpo, auto-penetrándose con mi miembro.

   Era demasiado excitante. Aquello me estaba haciendo enloquecer. Kim JongIn era un dios del sexo y era solo para mí.

   -Ah… ah… Tao… ah…- empezó a jadear a medida que aumentaba la velocidad.

   Llevé una de mis manos a sus caderas y lo ayudé con el movimiento, arriba y abajo, cada vez más rápido. Con la otra mano comencé a masturbarlo para que llegara, porque me sentía próximo al orgasmo.

   Mi mano sobre su miembro, arrancándole gemidos y mi pene en su interior, arrancándomelos a mí. No pasó mucho cuando ambos gemíamos más fuerte que antes el nombre del otro y nos corríamos.

   JongIn se inclinó hacia delante, agotado y dejó caer su frente contra mi hombro. Ambos respirábamos entrecortados y nuestros corazones latían a mil por hora, como si hubiéramos acabado una sesión intensiva de prácticas de baile, solo que esto era mucho mejor y mucho más placentero.

   Estábamos así, recobrando el aliento tras el esfuerzo, cuando escuchamos la puerta de la calle abrirse y nos tensamos.

   -No, otra vez no- se escuchó quejarse a JunMyeon hyung- ¿no podemos irnos un rato sin que se lo monten?
   -¿Dónde lo han hecho esta vez?- preguntó ChanYeol hyung y escuchamos un grito de BaekHyun hyung.
   -Ay, qué asco- dijo- yo no pienso volver a meterme en ese baño.
   -Ni yo pienso limpiarlo- terminó KyungSoo hyung.

   Ambos nos miramos y sonreímos. Nos daba igual lo que dijeran.






2 comentarios:

  1. Anda que no, el título lo dice todo en este shot XDDD Bueno, ahora te voy a explicar yo una cosa y es que tengo varios problemas... El primero es que Tao es mi ultimate y ugh, me gusta todo con él (?) (Qué mal suena, maemía XD) Y el segundo es que mis segundos bias (los dos junticos en amor y compañía) son SeHun y Kai, entonces mi perdición son todas las OTPs entre estos tres especímenes raros XD Así que el TaoHun y este me han llegado al kokoro (?) (el TaoBaek también, pero esos son motivos aparte)

    Me voy a repetir... PERVERTIDOS TODOS, COÑE. Si es que no te puedes ir tranquila, en cuanto te das la vuelta se están pajeando (?) Pero bueno, Kai y las pelis porno y todo lo que sea erótico-festivo deberían ser OTP, si hasta el mánager de SHINee dijo que alguna vez le había notado "algo raro ahí" a Jongin XDDDD

    Me meo de risa cada vez que leo lo de "Si no lo veo, no existe" XDDD O sea hello please, Tao, que tenemos una edad (?) Y bien que lo disfrutaste luego, so perro e_é

    "El cartero siempre te la mete dos veces"... No sé por qué creo que he escuchado eso antes XDD Claro que teniendo un amigo que le preguntó a su padre si la película "Alicia en el País de las Pornopesadillas" existía pues... ¿qué esperas? LMAO

    Sinceramente, aunque me gusta la pareja, es que me lo imagino como una pelea de semes (?) Es en plan: "no voy a dejar que me la metas" "pues yo tampoco" "pues tenemos un problema" "lo tendrás tú, yo me voy a pajearme" (?) En mi mente todo tiene sentido, lo juro (???)

    Al final, si yo fuera KyungSoo los obligaba a limpiar el cuarto de baño con sus cepillos de dientes, para que sufriesen (?) Y les gritaría algo como: "LO VAIS A LIMPIAR VOSOTROS CON LA LENGUA", que es muy de mi madre y me lo ha pegado XD

    Resumen: una vez más, pervertidos todos... Y menuda casualidad que se queden solos siendo doce tíos XDDD

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    1. Me como la cabeza para poner títulos que tengan cosas que ver con el fic... a veces lo consigo XD Bueno... si tú tienes ese problema yo también lo tengo... lo que son todas las combinaciones entre estos tres (incluso los tres junticos) me encantan, las adoro, pero sobre todas las cosas el TaoKai (pero nadie lee TaoKai -.-")

      Exactamente. Pero no te des la vuelta!! Qué te pierdes el espectáculo!!! Bueno... el manager de SHINee se encontró a Taem, SeHun y Kai viendo una peli porno y a Kai con un bulto abultado en los pantalones y las manos sobre él...

      Tao es un maldito crío para unas cosas, pero luego es un puto muy puto... (?)

      Ahh... creo que es una peli porno... aunque no lo sé con seguridad... -.-" Y la otra sí que es una peli porno... estoy haciendo una versión con TaeYeon (SNSD)

      En realidad eso que te imaginas va a pasar en el TaoKai de EXO... en la 3ª o 4ª Temporada XD Yo si fuera KyungSoo también XD

      Bueno... menuda casualidad no... es que esto es un fic... en la realidad sé de varios vagos que habrían dicho que se quedaban y que se unían a la fiesta XD

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