miércoles, 1 de enero de 2020

[One Shot] GOT7 D-DATE: Nobody knows {Youngyeom}


Título: Nobody knows
Autora: Riz Aino
Pareja: Youngyeom (YoungJae + YuGyeom) (GOT7)
Clasificación: PG
Géneros: AU, high school, romance, fluff
Número de palabras: 1.216 palabras
Resumen: nadie sabe que YuGyeom está perdidamente enamorado del chico de su clase que parece ser invisible para el resto del mundo… pero eso está a punto de cambiar.
Notas: historia escrita más o menos hacia el año 2016, pero olvidada en un rincón de mi ordenador hasta que me lo encontré por casualidad y lo reformé y le di título, porque ni siquiera tenía título. Escrita también para el día 28 del 31 Days of Fluff, porque ya que estaba, le daba un buen uso.
Comentario de autora: un día estuve dándole vueltas a que creía haber escrito sobre este ship en algún momento de mi vida, pero no estaba muy segura, así que, me pasé un buen rato buscándolo hasta que aleatoriamente lo encontré en un word con un montón de fanfics que había desechado (en otras colecciones irán apareciendo todos aquellos a los que le he dado una segunda oportunidad). Espero que os guste.

Nobody knows

            Nadie sabe que YuGyeom está perdidamente enamorado del chico de su clase que parece ser invisible para el resto del mundo, porque hace tan solo unas semanas que llegó a su instituto y desde ese momento le hacen el vacío. Nadie lo sabe porque no le han preguntado y porque jamás se habrían imaginado que el chico más popular de la clase, el bailarín del cual todos están prendados, pueda estar enamorado de YoungJae, el chico que se sienta en primera fila, enfocado en sus libros y en absolutamente nada más, que no tiene amigos y que no habla con los demás. Nadie lo sabe, nadie sabe que está enamorado de él… pero aquello está a punto de cambiar.


            Aquella mañana en la que todos sus compañeros están totalmente enfrascados en odiar a su profesor de historia porque ha decidido ponerlos a hacer un trabajo en parejas complicadísimo, YuGyeom se acerca a la mesa en la que YoungJae está sentado, colocándose ante él y agachándose un poco para ponerse a la altura de sus ojos y que el chico lo vea. Éste no tarda más que unos segundos en levantar la vista de su libro de texto y sus ojos se encuentran, provocando que el corazón de YuGyeom comience de inmediato a latir muy rápido dentro de su pecho. Por un momento, la vergüenza lo ataca y quiere darse la vuelta y volver a su sitio, pero está allí y, en lo más profundo de su ser, quiere hablarle, quiere decirle lo encantador y precioso que es y que le gustaría hacer el trabajo que les han mandado con él para conocerlo más… pero se queda sin hablar, simplemente mirando a YoungJae, con los brazos cruzados sobre su pupitre y la barbilla apoyada en éstos, mirándolo embobado hasta que el chico rompe el silencio que se ha instalado entre ambos.

            —¿Necesitas algo, Kim YuGyeom? —le pregunta.

YuGyeom quiere morir por la forma en la que ha pronunciado su nombre, pero no es momento de hacer eso, tiene algo que decir. Tiene muchas cosas que decir, en realidad, pero en aquel momento solo quiere decir una.

            —Quería… mmm… preguntarte… mmm… ¿te gustaría hacer el trabajo de historia conmigo?

            YoungJae lo mira fijamente detrás de sus gafas redondas sin decir ni una palabra durante un rato, con una ceja levemente levantada, incrédulo. YuGyeom imagina que está pensando que le ha pedido que sea su compañero porque cree que es listo y no quiere hacer nada del trabajo y colgárselo todo a él para tener una buena nota sin esfuerzo. Aquello es lo que realmente piensa YoungJae, porque se evidencia en lo siguiente que dice.

            —Si quieres hacer el trabajo conmigo para tener nota sin esforzarte, puedes volver a tu asiento.
            —Quiero hacerlo contigo porque quiero conocerte y creo que es una oportunidad de oro para hacerlo —responde él, esbozando una sonrisa sincera. Su corazón late demasiado rápido dentro de su pecho cuando YoungJae responde a aquello inclinando su cabeza levemente, con curiosidad—. Quiero ser tu amigo… pero no me he atrevido a acercarme a ti porque siempre estás metido en tu mundo y me daba miedo molestarte…
            —No sé si creerme que el chico más popular de la clase quiera ser mi amigo —replica YoungJae—, pero voy a darte un voto de confianza porque eres la primera persona que se ha acercado a mi mesa en seis semanas.
            —No te arrepentirás —dice YuGyeom, encantado con que el chico haya aceptado su propuesta.

~

            En los siguientes días quedan juntos un montón de veces para hacer el trabajo en cada hueco que tienen entre las clases, los ensayos de YuGyeom y la academia de YoungJae y poco a poco se van conociendo. Cada cosa que YuGyeom descubre del chico hace que el chico le parezca cada vez más encantador; mientras que YoungJae poco a poco va viendo que él estaba siendo serio con lo de querer conocerlo mejor y ser su amigo y que no quería simplemente aprovecharse de él para tener buena nota en el trabajo de gorra. Sus compañeros de clase, por otra parte, después de verlos juntos en los descansos, a la hora de comer o tras las clases, no tardan en acercarse a YuGyeom para preguntarle por lo que se le pasa por la cabeza para estar junto al chico, cuando absolutamente nadie le hacía caso porque es nuevo y no se adapta a las dinámicas de la clase. YuGyeom solo les sonríe y les dice que le gusta estar con YoungJae, sin dar ninguna explicación, al menos no por el momento.

            Cuando entregan el trabajo, ya no tienen motivos académicos por los cuales pasar todo el tiempo juntos, pero YuGyeom no se aleja de YoungJae ni un solo segundo porque le gusta su compañía, le gusta ser su amigo y, en algún momento, le gustaría confesarle sus sentimientos y decirle que está perdidamente enamorado de él.

~

            Poco a poco, sus compañeros de clase comienzan a sentir interés por YoungJae, el chico que hasta hacía nada era invisible para todos y YuGyeom se alegra de que éste comience por fin a hacer más amigos aparte de él, porque su intención era aquella, tratar de que todo el mundo viera lo prefecto que el chico es y lo bien que lo hace absolutamente todo. Y, durante todo aquel tiempo, nadie sabe que YuGyeom lo ha hecho porque está enamorado de YoungJae… pero desde que se fijan en ambos, en sus interacciones y en las miradas que YuGyeom no para de dedicarle al chico, los rumores sobre que le puede gustar comienzan a circular por la clase y YuGyeom decide que es el momento de que alguien sepa que está enamorado de YoungJae.

            Por ese motivo, un día se acerca a él en el descanso y le pide que salgan juntos del lugar y caminen por los pasillos del instituto hasta llegar a un pasillo sin salida, un sitio en el que no van a ser molestados por nadie… y es en ese momento en el que, por fin, alguien sabe que YuGyeom está totalmente enamorado de YoungJae —y YuGyeom aprende que YoungJae también lo está, siempre lo estuvo—.



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