[Drabble] Ask Drabbles 6: Midnight thoughts {MarkBam}

Título: Midnight thoughts

Autora: Riz Aino

Pareja: MarkBam (Mark + BamBam) (GOT7)

Clasificación: PG

Géneros: romance?, drama?, fluff

Número de palabras: 827 palabras

Resumen: BamBam no puede dormir por culpa de sus pensamientos.

Notas: drabble escrito para mí porque siempre me han parecido muy monis estos dos aunque sea un ship terriblemente olvidado.

Comentario de autora: a veces, es mejor escribir que dormir, salen cosas que nunca te esperarías que saldrían y la mayoría de las veces son bonitas. Espero que os guste.

Midnight thoughts

BamBam dio la quinta vuelta en su cama en los últimos diez minutos y después de eso decidió que sería incapaz de dormirse por más que lo intentara aquella noche, así que salió de la habitación que compartía con YuGyeom para no molestarlo y se fue al salón a tratar de hacer algo productivo con su vida al menos… pero aunque lo trató, el chico no pudo ponerse a hacer nada, teniendo solo un único pensamiento en su mente, un pensamiento que llevaba dando vueltas durante mucho tiempo en su cabeza. ¿Qué habría sido de él si Mark no lo hubiera ayudado tanto como lo había hecho cuando llegó a Corea con nada más que esperanzas y sueños y los bolsillos vacíos?

A pesar de que BamBam no solía mostrar sus pensamientos o sus sentimientos, el chico siempre se había sentido muy agradecido por todo lo que el mayor había hecho por él y había veces en las que un sentimiento de culpabilidad se instalaba en su pecho porque Mark había hecho —y seguía haciendo— muchísimo por él, pero BamBam no había hecho absolutamente nada por el mayor. Y eso era lo que algunas noches, como aquella, hacía que el chico no pudiera conciliar el sueño, porque se sentía muy culpable por no saber cómo darle algo a cambio a Mark.

Perdido en sus pensamientos y en la oscuridad del salón, BamBam no se dio cuenta de que alguien salía de una de las habitaciones y se dirigía hacia él hasta que sintió un peso a su lado hundiendo el cojín del sofá y un brazo rodeando sus hombros y atrayéndolo a un cuerpo muy conocido. Como si con sus pensamientos lo hubiera llamado, Mark se encontraba allí con él, queriendo ayudarlo a pesar de que no sabía qué era lo que le estaba pasando por la cabeza al menor. Mark siempre había sido así con todos, parecía que vivía en su propio mundo, pero se daba cuenta de todo lo que iba mal y los ayudaba a todos a seguir adelante.

—¿Qué haces aquí a estas horas de la madrugada? —le cuestionó, con la voz todavía tomada por el sueño—. ¿No puedes dormir?

—Solo pensaba —respondió BamBam, sin poder evitar pegarse aún más al cuerpo del mayor.

—¿Y en qué pensaba esa cabecita loca tuya?

—Nada en especial —susurró, no queriendo contarle qué era lo que le pasaba por la cabeza, porque contárselo equivalía a hacer que Mark se sintiera mal por ser el culpable de que BamBam no pudiera dormir.

—Por nada en especial no te pasas la noche en vela, BamBam —replicó el mayor—. Te conozco demasiado bien.

Mark comenzó a acariciar su nuca, haciendo que todos los músculos del cuerpo del menor se relajaran y se recargara aún más sobre su cuerpo. Mark tenía la habilidad de hacer que todas sus barreras cayeran sin que tuviera tiempo siquiera de darse cuenta de que lo estuvieran haciendo. BamBam no quería contárselo porque lo haría sentirse mal… pero a la vez necesitaba soltarlo para dejar de pensar en ello. Por eso, después de unos momentos en los que el silencio se apoderó completamente de la habitación, BamBam comenzó a decir lo que le pasaba por la cabeza y no le dejaba dormir.

—Pensaba en lo mucho que hiciste por mí cuando éramos trainees —comenzó—. En lo mucho que has seguido haciendo por mí durante todos estos años a pesar de que yo no he hecho absolutamente nada por ti… ni siquiera darte las gracias…

—No lo he hecho porque quisiera algo a cambio —respondió Mark, con una sonrisa que BamBam notó contra su frente antes de que el mayor le dejara un pequeño beso en esta—. Quería ayudarte, quería estar para ti cada vez que me necesitaras… y no quiero nada a cambio, solo con ver que eres feliz me basta.

BamBam suspiró profundamente, tratando de aguantarse las repentinas ganas de llorar que estaba sintiendo porque Mark era demasiado bueno con él y no se lo merecía. Sin embargo, después de tener aquella conversación, el chico tuvo claro que, aunque Mark le hubiera dicho que no quería nada a cambio, BamBam buscaría cualquier forma para devolverle al mayor todo lo que había hecho por él, para así poder tener su conciencia tranquila y para así poder hacer feliz a aquella persona tan maravillosa que estaba a su lado y que no lo iba a dejar nunca.