Título: What’s your
name?
Autora: Riz Aino
Pareja: ChangLix
(ChangBin + Felix) (Stray Kids)
Clasificación:
PG
Géneros:
AU, high school, romance, fluff
Número de palabras:
954 palabras
Resumen:
Chan le había advertido que no se acercara a un chico llamado Seo ChangBin…
pero Felix ya se había enamorado de ese chico antes de preguntarle siquiera su
nombre.
Notas: drabble
escrito para xoko, por haber ganado uno de mis muchos juegos de twitter.
Comentario de autora:
estaba un poco escasa de ideas muy cute para estos dos porque se pasan todo el
día moviéndose las cejas el uno al otro e insinuándose, hasta que finalmente me
vino la inspiración divina. Espero que os guste.
What’s
your name?
En su primer día en el nuevo instituto, Felix
se sentía un poco nervioso. Todo era nuevo para él en aquel lugar y apenas se
comunicaba bien en coreano, así que, era bastante normal que no supiera si le
iba a ir bien o no. Además, su primo Chan, la única persona que podría haber
conocido en aquel lugar, se había graduado justo aquel año, dejándole
simplemente la advertencia de que “hiciera lo que hiciera, no se acercara a un
chico llamado Seo ChangBin”. Por eso Felix estaba todavía más nervioso de lo
que debería, porque no solo estaba en un instituto nuevo, de un país nuevo del
que todavía no sabía bien el idioma, sino que además tenía que ir con cuidado
por el instituto para evitar a aquel chico que según su primo era un malaje.
No obstante, también se sentía expectante.
Porque todo era nuevo para él y porque tenía muchas ganas de hacer nuevos
amigos y poder vivir la experiencia de un instituto coreano. Por ese motivo, el
chico trató de quitarse de encima todos sus nervios y de disfrutar, porque si
iba con otra mentalidad seguro que no podría hacer absolutamente nada y él no
quería sentarse solo durante los almuerzos y no tener con quien hablar.
Sin embargo, a pesar de que cuando llegó a su
clase trató de hacer amistad, los chicos del lugar ya se conocían de antes y
habían formado grupitos en los que no cabía nadie más y Felix se sintió
totalmente desplazado en los descansos de clase. A pesar de ello, el chico no
perdió la esperanza, porque seguro que conseguiría hacer amigos, quizás no en
el primer día, porque eso era bastante precipitado, pero seguro que durante la
primera semana lo conseguiría. Por eso, cuando llegó la hora del almuerzo, el
chico se dirigió a la cafetería con los ánimos renovados, pensando que, aunque
no hubiera encontrado ningún amigo en su clase, siempre podía conocer a alguien
en la cafetería o por los pasillos, no tenían que ser necesariamente compañeros
de clase sus amigos.
Y fue allí, en la cafetería, donde encontró
alguien con quien hablar y con quien poder pasar el rato.
Cuando Felix había llegado a la cafetería,
prácticamente todas las mesas estaban ocupadas, así que, tuvo que dar vueltas
por la sala hasta encontrar un hueco en una de las mesas. Ésta estaba un poco
apartada y solo había un chico sentado en ella, así que, Felix se dirigió hacia
allí, se sentó y después comenzó a entablar conversación con aquel muchacho
desconocido, que si bien no era muy hablador, fue bastante simpático con Felix,
quien no podía ser más feliz en ese momento, puesto que al fin había conseguido
hablar con alguien en aquel instituto.
Después de aquello, Felix se siguió sentando
con aquel muchacho todos los días en la hora del almuerzo, hablando de mil y
una cosas y descubriendo que tenían un montón de cosas en común, a pesar que
por fuera eran completamente distintos, como el día y la noche, como la luz y
la oscuridad. Y, antes de que Felix se diera cuenta, se había enamorado
perdidamente de aquel muchacho que poco a poco se iba abriendo más y más a él y
dejaba ver que tenía un lado bastante dulce que Felix jamás se había esperado.
Por ese motivo, el chico quería seguir pasando todos los días junto a él.
No obstante, un día, Felix se dio cuenta de que
el otro jamás le había dicho su nombre a pesar de todo lo que habían hablado.
El primer día simplemente se habían dado cuenta de que iba a un curso superior
y desde entonces lo había estado llamando “hyung”,
además, el chico nunca llevaba puesta la chaqueta del uniforme, por lo que,
Felix había sido incapaz de ver la pequeña chapita con su nombre. Llevando
cerca de un mes sentándose juntos en el almuerzo y hablando cada día, al chico
le parecía un poco rudo preguntarle por su nombre a aquellas alturas, pero era
mejor hacerlo más pronto que tarde, así que, ese mismo día, el chico le
preguntó.
—Sé que es raro que te pregunte ahora que
llevamos un mes conociéndonos… pero ¿cuál era tu nombre?
—ChangBin —respondió el chico, sin que
pareciera que le hubiera molestado aquella pregunta—. Seo ChangBin.
En ese momento, Felix quiso echarse a reír
porque la única persona que su primo le había pedido que evitara a toda costa,
era la única persona con la que había entablado una amistad… y no solo eso,
porque Felix se había enamorado de aquel chico por completo. Sin embargo, el
chico no se echó a reír, simplemente le dedicó una pequeña sonrisa a ChangBin y
le dio las gracias por no enfadarse con él por no saber su nombre después de
tanto tiempo, antes de seguir hablando con el chico como si absolutamente nada
hubiera cambiado.
Porque realmente nada había cambiado. Felix
seguía queriendo pasar todo el tiempo del mundo junto a él.
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