Título: Crush on you
Autora: Riz Aino
Pareja: Unnies (Gaeul + Yujin) (IVE)
Clasificación: PG
Géneros: AU, high school, sports, romance, fluff
Número de palabras: 1.007 palabras
Resumen: Gaeul simplemente estaba sentada en el
banquillo, descansando unos momentos antes de volver a salir a pista, cuando
toda su vida cambió…
Notas: esta historia fue inspirada por este maravilloso momento.
Mil gracias bb por mandarme el vídeo porque sabías que me iba a encantar.
Comentario de autora: tenía varios huecos libres para llenar
en esta segunda parte de la colección de los rookies y cuando vi el vídeo no
pude evitar querer plantear esta recreación. Espero que os guste.
Crush
on you
Gaeul estaba sin aliento cuando se
sentó en el banquillo, recargando su espalda contra la pared que tenía a sus
espaldas y tomando su botella de agua para beber un buen trago. El partido se
estaba volviendo bastante intenso y había tenido que correr para salvar los
balones que el equipo contrario lanzaba una y otra vez a los puntos que se
quedaban sin defensa durante tan solo unos momentos. Cuando se bebió el agua
que le quedaba en la botella, Gaeul inspiró profundamente para volver a
recuperar su respiración normal y su ritmo cardiaco, no quitándole la vista al
partido ni un solo segundo porque el marcador estaba muy igualado y su equipo
estaba perdiendo en aquellos momentos por un par de tantos, algo que no se
podían permitir si querían avanzar hacia las semifinales de aquel torneo entre
los institutos de la ciudad. Era su último año en el instituto y por una vez,
le gustaría poder jugar una semifinal, con llegar a la semifinal ella ya
estaría contentísima porque era mucho más lejos de lo que habían llegado nunca.
Descansaría allí unos momentos y después le pediría al entrenador volver a la
pista para ayudar con la remontada… al menos, ese había sido su plan, porque
tan solo tres segundos después, todo cambió para ella…
3…
Wonyoung recibió una pelota del
equipo contrario en una posición tan extraña, que cuando la golpeó para
servirla para remate, ésta no acabó yendo en la dirección deseada, en el centro
de la pista, donde se encontraba Yujin, lista para golpear la bola, si no que
salió disparada hacia el lateral, el mismo lateral en el que se encontraban los
banquillos y en el mismo y exacto sitio en el que Gaeul se encontraba sentada
descansando junto con Hyunseo antes de volver a pista. Yujin vio cómo la pelota
no se dirigía hacia el sitio que debía también y pareció decidir no dejar
escapar aquel punto, siendo tan competitiva como era y teniendo en cuenta que
en aquellos momentos estaban perdiendo, no podía dejarlo escapar, Gaeul tampoco
habría podido dejar escapar aquella pelota y habría tratado con todo su ser
devolver la al juego.
2…
La pelota y Yujin se dirigían hacia
Gaeul en ese momento y la chica se quedó completamente paralizada sin poder
hacer absolutamente nada. Ni un múscullo de su cuerpo se pudo mover, ni
siquiera sus manos para tratar de cubrirse la cara por su Yujin no llegaba a
tiempo. No. Lo único que Gaeul pudo hacer en aquel momento fue observarlo todo
sin parpadear siquiera, viendo cómo Yujin avanzaba hacia ella, sus labios
apretados por el esfuerzo, su larga melena castaña recogida en una coleta alta,
danzando tras ella, sus brazos en posición, con sus muñecas juntas, preparada
para golpear la pelota, sin apartar su mirada de ésta, cayendo de rodillas al
suelo a tan solo un metro de distancia de Gaeul, golpeando la pelota con todas
su fuerzas hacia atrás, para tratar de dirigirla de nuevo a la pista y que o
bien Rei o bien Jiwon pudieran devolverla al equipo contrario y así no perder
más puntos y que el otro equipo tuviera todavía más ventaja.
1…
Debido a la inercia por la carrera
que se acababa de dar, Yujin acabó deslizándose sobre el suelo, de rodillas, en
su dirección abriendo sus brazos, alzando sus manos y acabando con ambas a cada
lado de la cabeza de Gaeul, su rostro a apenas solo unos centímetros de distancia,
provocando que el corazón de Gaeul latiera demasiado rápido dentro de su pecho
al tener a la otra chica allí, tan cerca, tan guapa, tan perfecta, respirando
de forma entrecortada por el partido, su respiración caliente chocando contra
la piel de la mayor. Sus ojos se encontraron, los de Yujin castaños, brillando
como si contuvieran miles de millones de estrellas en ellos, observándola
fijamente, como si quisiera hacerle una pregunta, pero pareciera habérsele
olvidado —y Gaeul podía entender perfectamente ese sentimiento porque ella
misma se había olvidado de respirar—. Siempre había sabido que Yujin era guapa,
siempre había pensado que era increíble y siempre había admirado que fuera tan
tenaz y competitiva, que nunca se dejara vencer por muy difícil que fuera la
situación para ella… pero en aquellos momentos, para Gaeul Yujin era un ángel
caído del cielo.
—¿Estás bien, Gaeul unnie?
—preguntó entonces la voz de Hyunseo a su lado, haciendo que Gaeul saliera de
su ensimismamiento y mirara a la menor para asentir con un movimiento de su
cabeza—. ¿Estás bien, Yujin unnie?
—Sí. Estoy bien.
Yujin se levantó del suelo y volvió
inmediatamente al partido, que todavía seguía en juego y Gaeul, una vez rota
aquella magia que las había envuelto durante tan solo tres segundos, dirigió su
atención al juego, aunque todas sus prioridades habían cambiado. Gaeul ya no
tenía como prioridad que el equipo de vóley su instituto llegara a jugar unas
semifinales en su último año en aquel lugar, no… su prioridad en aquellos
momentos era enamorar a Ahn Yujin antes de tener que marcharse porque esos tres
segundos lo habían cambiado todo y el pequeño crush que la mayor no
negaba que hubiera tenido desde un tiempo, había crecido y explotado en un
sentimiento demasiado intenso dentro de su pecho y no iba a dejar escapar la
última oportunidad que tenía para conquistarla.
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