Título: Flower (You)
Autora: Riz Aino
Pareja: YoungPo (Im
YoungMin + Jeong SeWoon) (YDPP)
Clasificación:
PG–13
Géneros:
AU, college, romance, fluff, humor
Número de palabras:
1.943 palabras
Resumen:
SeWoon jamás lo admitiría, ni aunque lo torturaran lo haría, pero últimamente
está escribiendo muchas canciones sobre el amor y solo hay un culpable de que
se haya vuelto tan moñas: Im YoungMin.
Notas: historia
escrita para Livy, que me lo pidió amablemente por la colección.
Comentario de autora:
tuve esto en stand by durante muchísimo tiempo porque no sabía qué podía hacer,
no se me ocurría nada, hasta que una noche sin nada en especial me vino la
inspiración y lo escribí todo del tirón. Espero que os guste.
Flower (You)
Baby it’s U
(Hey you know that you’re my only one)
Baby it’s U
(Make me wanna stayin’ all night long)
Under the starlight that resembles you
I wanna dream of eternity with you
Baby it’s U
—¿Otra canción de amor? —pregunta GwangHyun,
haciendo que el chico que está escribiendo sobre su libreta se sobresalte y lo
tire todo de la mesa—. Es la quinta del mes, ¿no?
—No —responde SeWoon, aunque es verdad lo que
su compañero de habitación está diciendo.
—Espérate, hago recuento, pero yo creo que con
esta van cinco —comenta el menor—. Está la canción que vamos a cantar juntos
para la clase, la canción tsundere, la que decías que ibas a llamar Just U, la
de que la vida y el amor eran complicados con más de veinte y ahora esta… —enumera—.
Sí. Son cinco.
—¿Me cotilleas la libreta? —cuestiona SeWoon,
girándose hacia el chico, mirándolo con los ojos entrecerrados, tratando de
mostrar enfado, pero realmente lo que está es avergonzado porque GwangHyun se
está dando cuenta de que algo está cambiando en él—. Y yo que creía que podía
confiar en ti, a partir de ahora no la voy a dejar nunca en ningún lugar.
—No cambies de tema, hyung —responde el chico—.
¿De quién te has enamorado?
—No me jodas, GwangHyun —replica—. ¿De quién me
voy a haber enamorado si no hago más que ir de aquí a las clases y de las clases
aquí?
—Pues yo qué sé, hyung, por el camino —dice el
menor, cruzándose de brazos—. El amor a primera vista también existe y tú estás
muy raro últimamente, escribiendo canciones de amor a todas horas.
—No digas estupideces —contesta SeWoon.
El chico comienza a recoger las
cosas que ha tirado antes por el sobresalto, tratando de aparentar toda la
calma y serenidad que puede, sintiéndose observado completamente bajo la atenta
mirada de GwangHyun. No sabe si lo acaba consiguiendo o no, pero no puede dejar
que su compañero se entere de que se ha enamorado de un chico con el que va a
una de sus clases de composición y que es completamente precioso. Quizás cinco
canciones de amor en dos semanas dan mucho el cante, pero SeWoon no había
contado con que su amigo le cotilleara la libreta.
—Sabes que lo voy a averiguar, hyung —le dice
GwangHyun, cuando el chico cree que la conversación se ha acabado—. Es mejor
que me lo digas.
Pero SeWoon no se da por aludido y
sigue trabajando en la letra de la canción que ha compuesto aquella misma
mañana en un rato, justo después de su clase junto al chico del que se ha
enamorado, porque ha sido demasiado encantador en clase, porque su sonrisa lo
dejó totalmente embelesado.
~
Durante una clase terriblemente
aburrida y soporífera, que GwangHyun no sabe cómo va a poder soportar sin
quedarse dormido, su compañero de banca y amigo empieza a comentarle algo que
hace que todos sus sentidos se activen. Un cotilleo es mucho más interesante
siempre que aquellas clases teóricas en las que no aprenden absolutamente nada
útil, porque, ¿de qué le iba a servir a él musicalmente saberse la vida de
Mozart? Era estúpido. Así que, le agradece infinitamente a DongHyun que el
chico empiece a contarle cosas sobre su compañero de habitación, YoungMin.
—Está… como ido —es lo que le dice justo
después de empezar a hablar sobre el otro chico—. Se pasa todo el día
suspirando y rasgando las cuerdas de la guitarra melancólicamente, murmurando
cosas que ni se entienden y cuando llega de las clases se echa sobre la cama
con una sonrisa super creepy —DongHyun suspira—. Me parece que la facultad lo
ha vuelto majara.
—Vaya par de compañeros de habitación tenemos —comenta
GwangHyun, haciendo que el otro lo mire, extrañado—. El mío se pasa el día
escribiendo canciones de amor, pero como es un tsundere de mierda tiene la
desfachatez de negármelo.
DongHyun se ríe en ese momento,
tapándose la boca con la mano para tratar de no hacer ruido y que todo el
auditorio se entere. Algunos de sus compañeros que se sientan cerca de ellos se
giran para mirarlos mal porque se ve que a ellos sí que les interesa aquella
horrorosa clase —vaya
frikis— y DongHyun trata de dejar de reírse, consiguiéndolo a medias.
—Bueno… a ti al menos el tuyo te responde… —comenta
una vez la risa lo deja hablar—. El mío pasa de mi puta cara.
—El año que viene hacemos todo lo posible para
conseguir una habitación juntos —comenta GwangHyun.
—Por favor.
La clase acaba mucho tiempo después,
pero GwangHyun y DongHyun salen de ella con mucha energía, sobre todo energía
porque tienen ganas de comer y llegar pronto a la cafetería, porque sino se
forman unas colas kilométricas y no comen a su hora. Pero a mitad de camino se
detienen los dos bruscamente, justo al salir del edificio en el que se
encuentran. GwangHyun se detiene porque ve a SeWoon, con la funda de la
guitarra amarilla pollo que él le regaló hace años y que es casi más grande que
su amigo as su espalda; DongHyun se detiene porque ve a YoungMin, su compañero de
habitación con todos sus libros por los suelos.
Ambos se detienen porque sus amigos
están el uno frente al otro y se están comportando muy raros el uno con el
otro, teniendo sonrisas tímidas en sus rostros, no pudiéndose mirar a los ojos
y moviendo sus cuerpos de forma errática mientras tratan de recoger los libros
del suelo.
—No puede ser —dicen ambos a la vez… pero sí
que puede ser… y, de hecho, es.
~~
DongHyun y GwangHyun solo tardan dos
días en confirmar todas sus sospechas, solo tardan dos días porque sus dos
amigos son lo más obvio del universo y ambos están enamorados del otro, pero no
se han dado cuenta. DongHyun se pregunta cómo no han podido darse cuenta si lo
único que les falta llevar son carteles de neón en los que ponga “me gusta
(insertar nombre)”. Son obvios a más no poder y eso hace que él y GwangHyun se
estresen un poco ahora que saben quién es el interés del otro.
Por eso, ambos aprovechan sus
aburridas clases de Historia de la Música para idear el mejor plan del universo
para juntar a sus dos amigos y que toda aquella estupidez de estar embelesados
el uno con el otro sin decirse nada acabe.
~~~
—¿Repíteme otra vez por qué estamos aquí? —cuestiona
YoungMin, jugueteando con sus manos sobre la mesa de la cafetería.
Solo una hora atrás estaba
tranquilamente en su habitación, tumbado sobre la cama, pensando en la sonrisa
que Jeong SeWoon le había dedicado aquella mañana, cuando DongHyun lo había
sacado de allí a tirones y lo había llevado hasta aquella cafetería del centro
en la que están sentados en una mesa para cuatro personas, como si estuviesen
esperando a que llegara alguien más a aquel lugar.
—Últimamente no te da el aire más que para ir a
clase —le responde DongHyun—, así que he pensado que podíamos salir un rato y
encontrarnos con mi amigo GwangHyun, que todavía no te lo he podido presentar.
YoungMin asiente. No está muy
interesado en conocer al amigo de DongHyun, pero si el chico insiste tiene que
ser porque debe ser alguien importante para él. Quizás su amigo en realidad no
le estuviera presentando a un compañero de clase, sino a su novio, pero no
quisiera decírselo todavía porque estuvieran en un estadio muy temprano en la relación.
Sin embargo, YoungMin se da cuenta de que está muy equivocado en lo que está
pensando cuando ve al susodicho amigo de DongHyun acompañado por la persona por
la que se pasa suspirando todos los días desde hace ya unas semanas.
—No os importa que haya venido con mi amigo
SeWoon, ¿verdad? —pregunta el chico, sentándose a la mesa con el otro—. Quería
sacarlo a que le diera un poco el aire, que últimamente se pasa el día
encerrado escribiendo canciones de amor. ¡Auch!
YoungMin no ha visto si el otro le
ha dado una patada por debajo de la mesa, pero lo intuye por la queja de dolor
del chico que se la ha debido de dar. SeWoon desvía la mirada, no obstante, al
otro lado del local, como si no hubiera sido él y YoungMin no puede evitar
sonreír porque aquel chico es demasiado adorable. Los dos compinches que le han
llevado al chico del que se ha enamorado perdidamente ante él comienzan a hablar
y tratan de hacer que ambos entablen conversación, pero solo se dedican unas
pocas palabras sin mucho sentido, como los saludos que se dedican cuando se ven
en clases.
—¡Vaya! —dice en algún momento de la tarde
DongHyun, como si de repente se hubiera acordado de algo—. Tengo que ir a
recoger de la tintorería el traje que me tengo que poner para la presentación,
¿me acompañas un momento, GwangHyun?
—Sí, claro —dice el chico, levantándose. SeWoon
hace el amago de levantarse, pero el otro lo detiene—. No, vosotros quedaos
aquí, volvemos en un segundo.
Y tras aquello, los dos chicos se
van, dejándolos solos. Ninguno de los dos dice nada durante un rato, no se
miran a los ojos y el ambiente se ha enrarecido, a pesar de que se puede
escuchar el jaleo en la cafetería… pero alrededor de ellos hay una burbuja en
la que todo es incómodo. YoungMin no sabe qué tema de conversación sacar,
porque quiere hablar con el otro chico, ya que hablar cómodamente es el primer
paso que deben dar si es que él quiere algo más con SeWoon.
—Ehh… —comienza, llamando la atención de
SeWoon, que por fin alza la cabeza y lo mira a los ojos. El cerebro de YoungMin
se cortocircuita—. Me gustas —acaba diciendo y durante unos segundos entra en
pánico, sin saber por qué ha dicho aquello, sin saber cómo es que el filtro
cerebro-boca se le ha desactivado sin permiso, así que, trata de arreglarlo con
lo primero que ve—. Me gusta la flor que hay en el menú.
—A mí también me gusta mucho —le responde el
chico, con una sonrisa encantadora en su rostro.
YoungMin no sabe si lo que acaba de
pasar es que ambos han confesado sus sentimientos el uno por el otro, pero al
menos han conseguido romper el hielo con aquello y no desea irse de allí sin
conseguir su teléfono para seguir hablando con SeWoon.
Notas finales:
—Las canciones que
GwangHyun enumera cuando está haciendo el recuento de canciones de amor que SeWoon
ha escrito en los últimos tiempos, son realmente canciones del chico. Ordenadas
tal y como GwangHyun las enumera son:
—Oh! My angel (feat, GwangHyun)
—Never
Mind
—Just U
—20 Something
—Baby it’s U
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