Título: She’s not good
Autora: Riz Aino
Pareja: NanBin (Nancy + SuBin) (VICTONLAND – VICTON +
MOMOLAND)
Calificación: PG–13
Géneros: highschool!AU, drama, light romance
Número de palabras: 1.794 palabras
Resumen: a pesar de lo que le digan sus amigos sobre
ella, SuBin está enamorado de Nancy.
Advertencias: hacia el final del fic hay cosas un poco más
chungas, leedlo bajo vuestra responsabilidad.
Notas: drabble escrito después de que aparecieran ambos en un
programa para aprender a actuar.
Comentario de autora: cuando vi dicho programa me dieron
ganas de escribir algo sobre ellos dos y, después de darle muchas vueltas,
acabé decidiendo hacerlo. Espero que os guste.
She’s
not good
—Sigo
sin entender cómo te puede gustar esa chica —comentó HanSe mientras estaban en
la cafetería durante el almuerzo—. Si tiene una bitch face que no se la aguanta.
SuBin
levantó su cabeza del plato y vio cómo HanSe estaba dedicándole una mirada
desaprobatoria a la chica que se encontraba a dos mesas de ellos. El menor no
pudo evitar suspirar porque de aquella forma era como empezaban todas las
conversaciones que SuBin no quería volver a tocar. Todos sus amigos le habían
dicho ya a aquellas alturas del curso un millón de veces que la chica que le
gustaba no era buena para él, pero por muchas veces que se lo dijeran los
demás, él no podía evitarlo.
—¿Estás
seguro de que era ella la que recogió al gatito de la calle? —cuestionó
ByungChan, con la boca llena—. Porque a mí no me parece que le sobre amor para
regalárselo a otro ser vivo.
SuBin
se abstuvo de responder. En lo que llevaban de mañana ya había contado aquello
tres veces y se negaba a contarlo de nuevo porque la historia no había cambiado
desde la primera vez que la había contado. Simplemente había ido a dar una
vuelta por su barrio la noche anterior porque estaba que se tiraba de los pelos
para terminar un trabajo y se había encontrado con ella, se había encontrado
con la chica que le gustaba, con Nancy, por la calle, cuidando de un gatito que
estaba metido en una caja de cartón y después se llevó al animal.
—¿Estás
seguro que no se lo llevó para hacer con él un ritual satánico? —preguntó
SeJun, riéndose de su propia broma.
—¿Y
si por eso recogió al gato? —dijo Chan, como si se le hubiera iluminado la
bombilla—. Por eso de que es una bruja y tal…
Sus
amigos se rieron ante aquella broma, pero a SuBin no le hizo ninguna gracia,
por eso bufó y después pinchó un trozo de pollo con el tenedor con bastante
fuerza, llamando la atención de todos, pero sobre todo, de los dos mayores de
su grupo, que aun no habían dicho ni una palabra.
—Niños…
—murmuró entonces SeungSik—. Dejad de meteros con la niña que le gusta, si a él
le parece un encanto, pues no hay más vuelta de hoja.
SuBin
estuvo a punto de agradecerle al otro que hubiera dicho aquello, porque
normalmente sus sabias palabras hacían enmudecer a los demás; sin embargo, no
pudo hacerlo porque el timbre tocó y todos se levantaron rápidamente para
dirigirse a sus respectivas clases. El timbre había sonado en el momento exacto
para que la conversación no siguiera, pero SuBin sabía que, de camino a casa,
todos se iban a aprovechar de que iban para el mismo sitio y continuarían dónde
lo habían dejado, para su desgracia.
Todavía
seguía sin entender el motivo por el cual los demás estaban tan en contra de
que le gustase Nancy, el motivo por el cual la odiaban tanto.
—SuBin
—lo llamó SeungWoo. El chico se giró hacia el mayor de todos sus amigos y vio
cómo éste se acercaba a él, por lo que lo esperó—. Vamos en la misma dirección
—comentó, echándole un brazo por los hombros.
SuBin
asintió y ambos echaron a andar por los pasillos del instituto de aquella
guisa, sin decir ni una sola palabra hasta que llegaron a la clase en la que
SuBin se tenía que quedar. En ese momento, SeungWoo volvió a hablar.
—Los
niños solo quieren lo mejor para ti —comentó—, aunque parezca que lo que
quieran sea burlarse de ti.
—Podrían
cambiar entonces sus formas —respondió SuBin.
—Lo
sé, lo sé —murmuró el mayor—. Lo intentaré hablar con ellos… pero, en serio,
los niños tienen razón en que esa chica no es buena para ti —el chico trató de
replicar a aquello, porque SeungWoo estaba haciendo lo mismo que los demás—. No
digas nada, esta tarde en mi casa hablaremos todos tranquilamente del tema.
—Vale…
—acabó contestando SuBin, aunque no muy convencido.
SeungWoo
le dedicó una amplia sonrisa antes de despedirse de él con la mano y echar a
andar hacia su propia clase, dejando a SuBin entrar a la suya. En la cabeza del
chico no paraba de dar vueltas a lo que le acababa de decir el mayor, porque
tenía que ser algo muy serio lo que le querían decir si era necesario que se
juntaran todos en su casa. Por estar pensando en aquello, aquel día SuBin no
estuvo atento a los movimientos de Nancy —que se encontraba en su mismo salón—
durante el resto de las horas que le quedaban de clase, como siempre solía
hacer. Y con la mente totalmente ocupada, las horas se le pasaron muy rápido,
tan rápido que casi no se dio cuenta de que las clases se habían acabado, solo
se percató cuando ChangBin, uno de los chicos de su clase, le tocó el hombro y
se lo indicó.
SuBin
recogió sus cosas rápidamente para no hacer esperar a sus amigos y después
corrió hacia la entrada del instituto, lugar en el que se encontraría con ellos
para dirigirse todos juntos a la casa de SeungWoo. Cuando llegó allí, los demás
ya lo esperaban, así que, simplemente echaron a andar, sin tener que esperar a
nadie más, en completo silencio, sin bromear, sin comentar cómo les había ido
el día y lo mucho que odiaban a sus respectivos profesores. SuBin estuvo
tentado a decir algo en un par de ocasiones para acabar con aquel incómodo
silencio; sin embargo, se contuvo de hacerlo porque la tensión se podía cortar
con un cuchillo.
Durante
el camino, el chico le dio muchas más vueltas al por qué de aquello y, para
cuando llegaron a la casa de SeungWoo, SuBin casi tenía miedo de qué era lo que
iban a decir sus amigos. Pero, por otra parte, no podía parar de pensar que sus
amigos eran un poco exagerados con todo aquello y estaban un poco obsesionados
con el tema de que no le debía de gustar Nancy. SuBin ni siquiera sabía
exactamente cómo había comenzado a gustarle la chica, pero no era algo que
pudiera dejar de hacer así como así tampoco.
—¿Sabes el motivo por el cuál apareció Nancy en mitad del
curso el año pasado? —le preguntó SeungWoo, una vez todos estuvieron instalados
en su habitación.
—Trasladaron a su padre a Seúl —respondió SuBin. Aquello
era de dominio público entre las personas que estaban en clase con ella y SuBin
se lo había comentado probablemente en alguna ocasión a sus amigos.
—¿Y sabías dónde vivía antes? —cuestionó HanSe.
—En TongYeon, ¿por qué?
SuBin vio a todos sus amigos mirarse los unos a los
otros, sin decir nada, por lo que el chico no pudo evitar ponerse un poco
nervioso. El silencio siguió hasta que finalmente SeungSik sacó su teléfono
móvil del bolsillo trasero de sus pantalones, buscó algo en él y luego le
tendió el teléfono.
—Hemos hablado y creemos que era mejor que te lo
enseñáramos —le dijo éste, justo antes de pulsar el play.
Y en la pantalla del móvil apareció una escena que hizo
que el estómago de SuBin se volviera del revés, pero que no pudiera apartar sus
ojos de la pantalla porque quería confirmar una y otra vez lo que estaba viendo
y que no se estaba equivocando, que sus ojos no lo estaban engañando. Pero por
más que trataba de convencerse de que aquello no era real… lo era… y en el
vídeo aparecía Nancy, con otro uniforme, y dándole una paliza a otra chica
mientras la insultaba. Cuando el vídeo finalmente terminó, SuBin tuvo que tragar
saliva porque su garganta se había quedado repentinamente seca.
—¿Desde cuándo lo sabéis? —tuvo que preguntarles a sus
amigos.
—No teníamos pruebas hasta hace un par de semanas
—contestó SeJun, después de mirar a los demás para ver si alguno contestaba por
él—, pero desde que comenzó este curso sabíamos que esa niña no era trigo
limpio porque Chan se equivocó un día y entró al baño de las chicas y la vio
robándole a una de las chicas de tu clase.
—Pero no le presté mucha atención realmente y simplemente
le dije a la chiquilla que, si tenía algún problema que me lo comentara y no ha
venido nunca a decirme nada, así que pensé que fue algo esporádico —comentó
Chan—. Tampoco te dije nada porque no creía que fuera importante, solo era una
niña de tu clase, no era nadie importante.
—Pero después viniste diciendo que te gustaba una chica y
era precisamente Nancy —dijo ByungChan—. Y entonces hyung nos contó lo que había visto y pensó que deberíamos
decírtelo, pero cada vez que sacábamos el tema te enfadabas, así que, empezamos
a buscar otra forma de mostrarte que la chica no era buena para ti.
—Rebuscando por internet encontré esto —completó
SeungSik—, y cuando se lo enseñé a los niños dijeron que ya no había vuelta de
hoja y que había que enseñártelo para que dejaras de pensar que esa chica era
una diosa.
SuBin tuvo que respirar hondo un par de veces antes de
asentir para hacerles ver a sus amigos que había captado el mensaje y que haría
todo lo posible para que Nancy dejara de gustarle, porque tal y como éstos le
habían dicho un millón de veces, no era buena para él. Sus amigos se acercaron
a él y lo rodearon en un abrazo en el que el chico no sabía dónde empezaban
unos y terminaban los otros, pero con el que se sintió muy reconfortado.
Notas finales:
—Básicamente estaba
escribiendo esto a la vez que veía School 2015, que trata el tema del bulling, y acabé por darle un final
sobre este tema al fic. De hecho, hay algunos guiños al dorama.
—Y no tengo nada en
contra de Nancy, simplemente quería escribir una historia que no fuera la
convencional en mí y elegí a estos dos de protas porque tenía ganas de escribir
algo de ellos.
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