Título:
Hug me
Autora:
Riz Aino
Pareja:
JohnHyuck (Johnny + HaeChan) (NCT)
Clasificación:
PG
Géneros:
romance, fluff
Número de palabras:
800 palabras
Resumen:
DongHyuck está demasiado nervioso y necesita algunos mimos, por eso no duda en
ocupar la cama de Johnny.
Advertencias:
no pasa absolutamente nada pervertido a pesar de que por el resumen lo pueda
parecer, personas mal pensadas (?)
Aclaraciones:
he usado el hecho de que fueron compañeros de habitación en su pequeño viaje a Tailandia
estos días para ambientar esto.
Notas: drabble
escrito para Elion, que me lo pidió hace demasiado tiempo y yo debería de
habérselo escrito en ese tiempo y no casi tres meses después. Lo siento un mundo.
Comentario de autora:
lo fluffy es lo que más adoro y lo que mejor se me da y este fic es lo más
fluff que he escrito en mucho tiempo porque estaba super inspirada en ello.
Espero que os guste.
Hug
me
DongHyuck estaba nervioso. Muy
nervioso. Demasiado nervioso. Llevaban algo de tiempo sin presentarse en Tailandia
y estaba desacostumbrado al calor del lugar, al calor de las fans, a cómo se
hacían las cosas en el lugar y tenía también un poco de miedo porque no sabía
cómo reaccionaría el público ante ellos, ante él. Su corazón latía rápidamente
dentro de su pecho solo de imaginarse en el escenario siendo el foco de
atención de todas aquellas personas y casi no podía soportarlo, no podía
soportar aquella opresión que sentía en su pecho porque su corazón quería
salirse de él, no podía soportar imaginarse equivocándose al hacer los pasos en
el escenario o estando fuera de tono porque entonces un dolor punzante aparecía
en su cabeza y el chico no sabía qué era lo que podía hacer para calmarse.
Habían llegado al hotel a soltar sus
cosas y a descansar un poco del viaje antes de montarse de nuevo en los coches
para ir hacia el lugar en el que se iban a presentar y DongHyuck estaba cansado
y debía de dormir un poco para poder aguantar el resto del día en buena forma,
pero era imposible para él hacer algo más que dar vueltas y vueltas en aquella
cama de hotel. El chico suspiró profundamente después de un rato y acabó incorporándose
en su colchón y exhalando otro suspiro más. Tras aquello miró a su alrededor,
viendo su maleta y la de Johnny por el lugar además del bulto del mayor debajo
de las sábanas de la cama contigua, descansando. DongHyuck odiaba molestar a
los demás con sus problemas porque éstos ya tenían suficientes con los suyos
propios, pero en aquellos momentos necesitaba unos brazos cálidos que lo
envolvieran y una voz dulce que le dijera que todo iba a salir bien, así que no
lo pensó mucho más y salió de su cama para dirigirse a la de Johnny. Con
cuidado de no molestarlo de forma excesiva, el menor levantó las sábanas de la
cama y se introdujo en ella lentamente, tumbándose en el colchón pegándose a la
ancha espalda de Johnny y acurrucándose contra ella.
Johnny no tardó en despertarse y en
girarse hacia él para envolverlo en su cálido abrazo y apretarlo fuertemente
contra su cuerpo, sin decir nada durante unos minutos. DongHyuck agradeció
infinitamente aquel abrazo porque poco a poco fue relajándose en los brazos de
Johnny, poco a poco su corazón dejó de latir de forma acelerada y poco a poco
el punzante dolor de su cabeza fue disminuyendo hasta que no fue nada más que
un recuerdo. Gracias a los brazos de Johnny envolviendo su cuerpo, el chico
dejó de pensar en lo que podía suceder en el escenario, dejó de sentirse tan
nervioso y se relajó por completo, aunque hacía tan solo unos minutos, cuando
todavía seguía dando vueltas en su cama, no pensaba que fuera a lograrlo.
—¿Mejor? —preguntó en ese momento
Johnny y DongHyuck asintió con su cabeza, sin querer hablar. No necesitaban las
palabras para saber qué era lo que le había sucedido al chico ni para saber cómo
se sentía al respecto al principio y en aquellos instantes—. Me alegra,
Hyuckie.
Inmediatamente después, los labios
cálidos de Johnny se posaron en su frente y DongHyuck esbozó una pequeña sonrisa
y cerró sus ojos para tratar de descansar un poco junto a la calma que
irradiaba el mayor antes de que tuvieran que irse del hotel para comenzar los
ensayos para su presentación en Tailandia.
Notas finales:
—Estaba
tan inspirada escribiendo esta cosita cuqui que literalmente la escribí en 15
minutos. Generalmente escribo 1k en media hora cuando me inspiro y tecleo en el
ordenador como si estuviera poseída, pero esto es todo un récord para mí porque
han sido 800 palabras en quince minutos y después de un bloqueo existencial muy
gordo.
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