sábado, 27 de julio de 2013

Take a Shower with Me, Please {TaoRis}

3/8 Take a Shower with Me, Please {TaoRis}

   Solos. Nos habíamos quedado solos en el apartamento debido a que algunos de los chicos tenían que ir a algunos programas y los demás se habían ido a ensayar. Nosotros habíamos ido a jugar al basket y así hacer un poco de ejercicio, pero ya habíamos vuelto, sudados a más no poder porque hacía demasiado calor en la calle y por el partido que habíamos jugado.

   Me tiré en el sofá y él se tiró en el otro. Las piernas le sobresalían de este bastante cacho, las mías también lo hacían, pero de una manera menos exagerada. Yo no era tan alto como mi gege, aunque quisiera y me estuviera esforzando para crecer, pero parecía que mi etapa para crecer se había acabado, no como la de SeHun, que cada día era más alto.

   Suspiré y me gané una mirada de mi gege. Negué con la cabeza dándole a entender que no me pasaba nada, pero él no pareció creerlo. Se levantó del sofá y fue hacia dónde yo estaba, agachándose para quedar a la altura de mi rostro.

-¿Te pasa algo, Tao?- preguntó.
-No, nada- dije.
-Pues si no es nada, vamos a la ducha antes de que lleguen los demás.

Se levantó del suelo y me tendió la mano. Remoloneé un poco, pero tras un poco de insistencia me levanté, claro, que eso no quería decir que me moviera del sitio en cuanto estuve de pie. Él intentó moverme, pero yo tengo mucha más fuerza que él, por lo que no me movió ni un milímetro.

-Oh, vamos ZiTao- se quejó en mi oído y aquello me hizo temblar.

Él aprovechó ese momento para agacharse rápidamente y agarrarme por la cintura de una manera muy fuerte. No me esperaba que lo siguiente fuera que me levantara del suelo y me cargara como si fuera un saco de patatas en su hombro.

-¡Gege!- me quejé, pero él no me hizo ningún caso.

Comenzó a avanzar conmigo pataleando a través del apartamento que compartíamos los doce y el mánager. Salió del salón y se encaminó a uno de los baños, al que pillaba más cerca. Luego entró, conmigo todavía en aquella posición tan vergonzosa, intentando que no me pegara contra el marco de la puerta. Me dejó en el suelo y luego me sonrió de una manera tan brillante que las piernas me temblaron y casi caigo al suelo. No lo hice gracias a que me sujetó.

-Cuidado…- murmuró.
-Lo siento.
-No lo sientas- sonrió y luego se separó de mí- vamos, dúchate, que ya mismo llegan los demás.

Se giró para salir del baño, pero antes de que lo hiciera lo agarré por la cintura y lo atraje fuertemente hacia mí. Noté su cuerpo rígido ante mi abrazo, pero no por eso me separé de él. Caminé hacia atrás llevándolo conmigo más cerca de la bañera, hasta que me topé con ella y paré. Fue entonces cuando él habló.

-¿Qué haces, Tao?
-¿Quieres que me duche?- pregunté- entonces dúchate conmigo.
-Ya no eres un niño pequeño…
-Sí lo soy.
-Tao…- murmuró intentando soltarse de mi abrazo- déjame.
-No te soltaré hasta que te metas conmigo en la bañera- sentencié.

Él bufó y luego se quedó quieto, seguramente cavilando las opciones. Yo era mucho más fuerte que él y no me hubiera movido del salón si no me hubiera hablado de aquella manera tan sexy en mi oído. Pero ahora yo tenía la ventaja, él lo sabía y yo lo sabía. No podía hacer más que meterse conmigo en la ducha.

-Está bien- dijo al final, rindiéndose y yo hice un pequeño sonido de victoria que lo hizo reír. Su cuerpo vibró contra el mío por su risa grave y temblé como un flan- vamos a la ducha.

Se deshizo de mi abrazo en ese momento y fue a cerrar la puerta del baño con el pestillo. Luego se giró hacia mí mirándome fijamente con aquella mirada penetrante. Pasó por mi lado, rozando mi brazo y comenzó a echar agua en la bañera. Me volví hacia él y lo vi quitándose la camiseta, dejando expuesto su torso levemente marcado.

Ninguno de nosotros tenía muchos abdominales y menos súper marcados, de hecho, ye era el que más tenía de todo el grupo, pero los abdominales de mi gege eran completamente perfectos. Su espalda era ancha y su cintura pequeña, aunque no tanto como la de SeHun. Sin embargo, lo que más llamaba la atención de la parte superior de su cuerpo, eran sus tatuajes.

Tenía dos tatuajes, uno en cada brazo y ambos eran excitantes, por lo menos para mí. Aunque el que me dejaba con la boca abierta siempre que lo veía era el de su brazo izquierdo. Un escorpión recorría todo su musculoso antebrazo y me dejaba sin respiración. Casi sin darme cuenta, avancé hacia él y comencé a rozar con mis dedos el dibujo.

Lo noté estremecerse ante el contacto y luego vi su sonrisa, por lo que me atreví a hacer más presión y recorrer el contorno y el interior de aquella figura una y otra vez.

-¿Te gusta?- preguntó y yo asentí levemente con mi cabeza.
-Ojalá pudieras enseñarlo siempre… es muy bonito…
-Ya sabe que eso no está en mis manos- contestó y se alejó de mí- vamos ya a ducharnos.

Asentí mientras él cerraba el grifo de la ducha y me comencé a desnudar. Me quité la camiseta de tirantes y luego bajé mis pantalones, intentando no mirar fijamente o de reojo el cuerpo de mi gege, que ya desnudo, se introducía lentamente en el agua. Terminé por sacarme los boxers y tragué saliva cuando sentí su mirada fija sobre mi cuerpo. Casi me atraganto con ella cuando me llamó con su mano para que entrara a la bañera y me sentara entre sus piernas.

-¿Ahí?- pregunté y él asintió- pero…
-¿No dijiste que eras un niño pequeño?- alzó su ceja y yo bufé.

No me quedó otra más que meterme en la bañera y sentarme allí. En cuanto lo hice, él me atrapó con sus brazos, pasándolos por mi cuello y apretándome contra él, haciendo que mi trasero chocara contra su miembro. Me mordí el labio inferior con fuerza para no jadear.

-Acércame el champú- susurró contra mi oído y me estremecí.
-¿Para qué?- logré preguntar.
-Para lavarte el pelo.
-Primero tendrá que estar mojado- murmuré y él rio.
-Cierto, pásame entonces la alcachofa de la ducha- dijo.

Alargué mi brazo hacia ella y se la di, luego abrí el grifo y el agua comenzó a salir a chorros por ella, mojándonos a ambos. Mi gege movió de un lado a otro la alcachofa, hasta que acabamos empapados. Seguro que era lo más incómodo del mundo, pero él no dejaba de apretarme contra su cuerpo mientras nos mojaba.

-Finish- susurró- ahora el champú- bufé mientras cogía la alcachofa y la dejaba en su sitio. Luego cogí el bote del champú y se lo pasé- thanks.

A los pocos segundos ya tenía sus grandes manos sobre mi cabeza y comenzaba a lavar mi pelo. Sus manos se movían de un lado a otro, masajeándome la cabeza y a la vez llenándolo de espuma, espuma que comenzaba a caer por mi cara, metiéndoseme en los ojos.

-Gege- me quejé limpiándome la espuma.
-Cierra los ojos.

Hice lo que me ordenó y cerré mis ojos. Aquello fue lo peor que pude hacer. Con los ojos cerrados, lo único que podía hacer era concentrarme en cada lugar de mi cabeza que tocaba con sus manos de una manera completamente deliciosa. Un suspiro de placer dejó mis labios sin que yo pudiera detenerlo y justo después, él dejó lo que hacía.

-Lo siento…- susurré girando mi cabeza hacia él- yo… no era mi intención…
-Shhh…- puso un dedo en mis labios y callé inmediatamente- creo que hace mucho tiempo que no recibes atención, Tao…
-¿Gege?
-Deja que te preste atención…

En ese momento volvió a girarme y volví a quedar sentado entre sus piernas. Una de sus manos acabó sobre mi estómago, mientras que la otra se quedó a la altura de mi pecho. Iba a comenzar a protestar cuando noté sus labios contra mi cuello. Jadeé y abrí mis ojos como platos por la sorpresa.

-Gege…

Su boca comenzó a deslizarse de un lado a otro, besando y chupando cada rincón que se encontraba a su paso entre mi cuello y mi hombro. Eché mi cabeza hacia atrás mientras cerraba mis ojos y los dedos de mis pies se doblaron sobre sí mismos. Sus besos eran demasiado para mi sensible piel.

Las sensaciones se incrementaron en el momento en el que la mano que tenía sobre mi pecho comenzó a buscar mi pezón izquierdo y lo pellizcó. Jadeé fuerte si poder controlarlo, mientras mi pezón era maltratado, al igual que mi cuello. Apenas podía pensar, menos siquiera coordinar para intentar hablar, todo lo que me él estaba haciendo me estaba dejando seco. Demasiadas sensaciones juntas.

No pude evitar, esta vez gemir fuerte cuando me hincó los dientes en la piel de mi cuello, como si fuera un vampiro. Aquello me había dolido, joder, sí, Kris gege era un bestia, pero más que eso, el mordisco me había excitado de sobremanera y ahora una parte de mi cuerpo comenzaba a acaparar toda la sangre que bombeaba mi corazón.

-Lo siento- lo oí decir- he sido un poco brusco- y tras esto, comenzó a besar y a lamer el lugar que había mordido previamente con dedicación haciéndome suspirar de nuevo.

La mano que había dejado quieta en mi estómago, comenzó a recorrer mi torso, arriba y abajo, mientas la otra no dejaba de maltratar mis pezones, endureciéndolos y haciéndolos más sensibles a todo, incluso al aire. Tantas sensaciones maravillosas en mi cuerpo necesitado de atención, que aunque no hubiera dado cuenta antes, la necesitaba, estaban a punto de hacerme llegar al orgasmo, sin siquiera haber rozado mi miembro.

Él pareció notar mi estado de excitación, porque inmediatamente, la mano que se entretenía subiendo y bajando por mi torso, acabó en mi entre pierna. Gemí fuerte, y esta vez no me importó hacerlo, él era quien me estaba tocando, yo no tenía por qué contenerme. Sus largos dedos entraron en contacto con la punta de mi miembro y me mordí el labio inferior fuertemente. Demasiado excitante.

Su gran mano arriba y abajo, lentamente me volvía loco de placer y sus labios en mi cuello tampoco ayudaban mucho. Poco a poco el fuego se fue acumulando en mi bajo vientre y cuando estaba a punto de llegar al orgasmo más exquisito de toda mi vida, él alejó su mano de allí.

-Gege- jadeé como protesta.
-Tranquilo- murmuró roncamente en mi oído- llegarás al orgasmo…pero sólo cuando yo la meta.
Abrí mis ojos como platos e intenté protestar, pero sin saber cómo había pasado, yo ya me encontraba de rodillas en la bañera y él estaba detrás de mí, comenzando a toquetear mi trasero. Me removí para estar lejos de su alcance, pero su mano firme en mi cintura no me dejaba escapatoria alguna.

Que me diera un poco de placer no me importaba, después de todo, su mano me había hecho casi tocar las estrellas, pero meterla… eso no podía permitirlo. Yo era un tío y él, otro, no pensaba dejar que me utilizara como a una mujer.

-No…
-Cuanto más te resistas más te dolerá.
-Pero yo no quiero…- mi protesta quedó en nada cuando la mano que me retenía por la cintura bajó hasta mi pene y lo agarró, haciéndome jadear. Sentí su cuerpo sobre mi espalda y su miembro erecto rozándome.
-Pero yo también estoy necesitado…- susurró roncamente contra mi oreja- demasiado necesitado- rozó su erección contra mi trasero- y más desde que comenzaste a gemir…
-Gege…
-Kris… gime Kris…

Su voz grave y ronca y sus dedos hábiles de nuevo sobre mi miembro hicieron que mi cuerpo pidiera más y me froté contra su entrepierna. Él me mordió el lóbulo de la oreja y luego retiró su cuerpo del mío para comenzar a prepararme.

Sus dedos se movían a sus anchas por mi trasero, primero toqueteando desde fuera y luego comenzando a tantear levemente mi ano. Tras algo de tiempo, sentí cómo uno de sus largos dedos entraba en mi interior y me tensé irremediablemente.

No dolía, molestaba y se sentía muy pero que muy raro, también, sobre todo, cuando comenzó a moverlo de un lado a otro y a sacarlo y a meterlo. Unos minutos después ya me encontraba jadeando y pidiendo por más. Debería haberme callado, porque en cuanto Kris gege introdujo dos dedos sentí que me moría. Grité, pero de dolor.

-Tranquilo- lo escuché decir- en cuanto encuentre el lugar que te hará gemir todo el dolor se desvanecerá.
-Eso lo dices porque no te están metiendo los dedos por el culo- repliqué trabajosamente, la penetración me había dejado sin respiración. Lo escuché reír detrás de mí.
-Eres un protestón… luego me pedirás que te dé más fuerte.
-Nunca.
-Ya lo veremos.

Comenzó a mover aquellos dos dedos en mi interior y yo sentía cómo si me estuvieran desgarrando por dentro. Solo mucho más tarde, volví a jadear. Ya no sentía tanto dolor y el que sentía eran leves pinchazos que se podían sobrellevar perfectamente y más, cuando de vez en cuando rozaba la punta de mi miembro.
Cuando sacó los dedos y metió el tercero vi las estrellas, pero no en el buen sentido, sino en el malo. En ese momento pensé que moriría de dolor, pero sus dedos hábiles ya estaban toqueteando mi miembro y mis testículos para distraerme de este mientras sus dedos campaban a sus anchas en mi interior.

En un momento dado, tocó un lugar al que antes no había llegado que me hizo gemir alto. Si ese lugar era el que él decía, que me diera allí todo lo que le diera la gana. Era demasiado placentero.

Con la maravillosa sensación que aquella embestida de sus dedos me había dejado ni me di cuenta de cuándo sacaba estos y comenzaba a empujar lentamente en mi interior hasta que intentó introducir más que la punta. En ese momento volví a gritar. Kris gege no la tenía precisamente pequeña.

-Para- supliqué y él detuvo todo movimiento.
-Lo siento…- volvió a inclinarse sobre mí y me abrazó. Su cuerpo estaba caliente sobre mi espalda y sus manos juguetonas sobre mi torso- no me volveré a mover hasta que tú me digas.
-Gracias- susurré.

No sé cuánto tiempo pasamos así. Él abrazado a mí con la mitad de su miembro caliente en mi interior e intentando calmarme y hacer que me acostumbrara a la intromisión dándome pequeños besos y rozando de ven en cuando mi miembro.

Más tarde comenzó a moverse levemente, apenas unos milímetros adentro y afuera, enterrándose en mí poco a poco, empujando para acabar en lo más profundo. Cuando entró por completo lo oí gemir roncamente y todo su cuerpo tembló, mandándome una exquisita sensación.

A partir de ahí todo fue más fácil y más placentero. Me seguía doliendo, claro, me estaban metiendo por el culo algo demasiado grande, pero no podía quejarme. De hecho, no podía pensar de nuevo. Todas las sensaciones que me mandaba aquella penetración eran completamente deliciosas.

Las embestidas dejaron de ser suaves y cuidadosas para comenzar a ser rápidas y salvajes, y al contrario de lo que pudiera parecer, en cuanto él tocó aquel lugar, no podía parar de gemir su nombre, ni de gemir que me diera más y más en aquel sitio.

Su mano viajó de nuevo hasta mi miembro y al rápido ritmo de las embestidas comenzó a masturbarme de nuevo. El fuego comenzó a crecer rápidamente de nuevo en mi bajo vientre y poco después, me corrí en su mano. El orgasmo que me había provocado me hizo temblar y las fuerzas me fallaron. Mi vista se nubló y casi ni pude sentir cómo él se corrió gritando mi nombre de una manera completamente excitante.

Estaba hecho un asco. Sudaba a mares, mi pelo se había acartonado por la espuma que no había sido retirada y de mi ano salía un líquido viscoso y blanquecino. Si en aquel momento no hubieran llegado los demás dando voces al apartamento, me hubiera cobrado con creces aquello.

La próxima vez que ambos estuviéramos necesitados, sería él quien me pidiera más. Sin embargo, tuve que salir de mis pensamientos de venganza por mi orgullo perdido cuando lo sentí darme pequeños besos por cada lugar que alcanzaba.

-Perdóname si te he hecho daño- susurró entre beso y beso- pero llevaba demasiado tiempo aguantándome…- me hizo sentarme sobre mi trasero y él se colocó sobre mí para darme un pequeño beso en los labios- te quiero, Tao- y comenzó a besarme de nuevo, esta vez más demandante, mientras yo lo correspondía, demasiado perdido en sus labios, en sus roces y en los rápidos latidos acompasados de nuestros corazones.





6 comentarios:

  1. Creo que deberías seguir escribiendo Kray te quedan mejor. Pero bueno me he divertido n_n

    Creo que me gusta ver a Tao seme (?)

    Es algo raro pero bueno ya que...

    Quiero ChenTao complace mis fujoshis deseos lol

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    Respuestas
    1. Ya... eso pensé yo... no soy buena para escribir TaoRis -.-"
      Kris... uke??? No... él es el seme por antonomasia en EXO no uke (se le va la pinza porque no puede imaginarlo)
      Ahhh... haré ChenTao en otra ocasión porque Chen es tan inmortal que en la realidad no se baña con Tao, por lo que no puedo -.-

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  2. ASDFGHJKLÑLASDFGHJJKASDFGHJKLL MORI :Q________
    AWWWWWWWWWWWWWWWWW KRIS ESE HOMBRE *W*

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  3. Tengo que confesarte cuatro cosas ahora mismo...
    1. No me gusta el TaoRis LOL
    2. Me he tenido que releer este.
    3. Me he saltado el lemon (?) Por pereza más que nada XD
    4. Se me han ocurrido un montón de cosas ingeniosas que decirte y he olvidado la mitad XDDD
    Por favor, San Siwon, patrón de las fangirls, perdóname (?)

    Y ahora que he confesado... KRIS, YO TAMBIÉN SOY UNA NIÑA PEQUEÑA, DÚCHATE CONMIGO Y ASGHFDASDGJAFSDGHKFAGHKSDFA Pero no me laves el pelo, ni hablar del peluquín, que me da una rabia que me lo toquen... cosa mala XDDDD Qué mal lo paso cuando voy a la peluquería (?)

    Ahora en serio, me ha encantado eso de "¿no eres un niño pequeño? Pues como un niño pequeño" XDDD Yo también me quejaría con eso de la espuma, la verdad. De pequeña me entró una vez tanta espuma en los ojos que desde entonces no la tolero y mi madre me tenía que lavar con muchísimo cuidado el pelo lmao Ahora soy capaz de salirme de la ducha solo para secarme los ojos, maemía, qué mal lo paso D:

    ATENCIÓN Un momento de ataque biased... MAEMÍA, ES QUE ME IMAGINO A TAO JUGANDO AL BALONCESTO CON LO PETADÍSIMO QUE ESTÁ Y LO BUENO QUE ESTÁ CON CAMISETA DE TIRANTES, AHÍ, MARCANDO, CON ESOS BRAZACOS QUE TIENE QUE PODRÍA USARLOS DE COLUMPIO, Y SUDANDO Y UGH, QUE ME EMOCIONO (?) Y ya *respira* voy a intentar volver a la normalidad... PERO NO PUEDO, PORQUE UGH, QUE KRIS ES IGUAL, MAEMÍA, TAO Y KRIS Y BALONCESTO Y CAMISETAS DE TIRANTES Y BRAZACOS Y TATUAJES Y YO ME MUERO adiosín :3 (?)

    Tao, si necesitas atención, yo te la doy, no tienes que recurrir a Kris para que te deje por los suelos D: Aquí está tu dongsaeng bonita para eso (???) *desesperación por ataque biased detectada (?)*

    Será mejor que lo deje ya aquí porque mis feelings se están desbordando y esto no puede ser nada bueno XDDD

    Resumen: a pesar de que no me gusta el TaoRis, debo confesar que me ha gustMAEMÍA TAO, BALONCESTO, CAMISETA DE TIRANTES, BRAZACOS, SUDANDO, CON LO BUENO QUE ESTÁ Escribes muy bien, de verdad (?) XDDD

    P.D.: perdona mi ataque biased, hacía mucho que no me daban, no sé por qué ha tenido que salir ahora XDDD En realidad si lo sé, estoy con la regla y mis hormonas andan montando una party hard en mi cuerpo que me tiene raruna lmao

    Lo dicho, me ha gustado (como toda la serie, en realidad XD) y lo dejo por hoy aquí porque además ya es tarde >w< Bye bye~

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    Respuestas
    1. Zeus... esto no será eso de #NocheDeConfesiones, ¿no?

      Oh bueno... a mí tampoco me gusta el TaoRis... de hecho le tengo una tirria que ni te imaginas... que ira que adoro como cuida Kris de él y esas cosas, pero no puedo con los fics (cosas mías)
      Jo... yo quería leer tus cosas ingeniosas... Santa YiXina (?) patrona de los olvidadizos (?) ¿Por qué has hecho que se olvidara? (?)

      Bitch, please... Kris solo se baña conmigo XD (Y por favor que a mí tampoco me lave el pelo, lo odio mucho, también) Es que Tao es un nene peque cuqui y adorable <3

      Pero entonces tú no has visto a Kris grabando el Dream Team??? ZEUS!!! SALE PARA FOLLÁRSELO CONTRA EL PALO DE LA CANASTA !!!!!!!!! (Vale, ya me calmo)

      Well, los ataques de biases no son buenos XD

      LOL Este último ataque ha sido el mejor XD Y no me digas más esas cosas que me imagino a Tao así y me da... y estoy en clase de Epigrafía...

      Me alegra que te gustara ^^ Esta serie ha tenido muchos adeptos y lecturas, pocos comentarios, eso sí, pero well... no se puede todo (?)

      Bye <3

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