sábado, 15 de febrero de 2014

Coro

Coro

            Kim JongHyun siempre estuvo seguro de su sexualidad. Siempre supo que las mujeres lo tentaban hasta límites insospechados. Sin embargo, un día llegó él y le trastocó todos sus esquemas.

            El coro de la iglesia necesitaba a alguien más para entonar algunas de las canciones a cuyas altas notas, JongHyun no podía llegar y él llegó como un ángel caído del cielo con su perfecta voz que hacía llorar al cura de la parroquia y a la mayoría de los fieles.

            JongHyun inmediatamente se quedó atrapado en su voz, en su rostro al cantar, en su gran sonrisa tras llegar a la nota que debía y en su amabilidad con todas y cada una de las personas que se acercaban a felicitarlo.

            Cada día que pasaban ensayando junto a los demás, cada domingo cantando a su lado en la Iglesia, JongHyun sentía que su corazón explotaría de felicidad. Siempre había tenido claro que le gustaban las mujeres, o eso había pensado, ya que tras algunos meses lo único que podía ver era a JinKi.

            Al principio se asustó, pero después comprobó que le daba absolutamente igual todo, que no le importaba lo que las demás personas pensaran de él. Estaba enamorado de un chico, ¿y qué? Él no lo había decidido, había sido su maldito corazón el que había elegido su camino y él no podía hacer nada para desviarse de este.

           Un día, los dos chicos tuvieron que quedarse ensayando una canción que antes habían cantado. El pianista los acompañó la mayor parte del tiempo, pero cuando comenzó a anochecer se excusó y se fue a casa, por lo que los otros tuvieron que utilizar la radio para poder escuchar la melodía.

            Durante el solo de JinKi, JongHyun se quedó embobado, mirándolo fijamente, sintiendo en lo más profundo de su ser las notas que entonaba el otro. Sin darse cuenta, se fue acercando al chico que cantaba con los ojos cerrados hasta estar a unos centímetros de él. En ese momento finalizó su parte y JongHyun cruzó la distancia que lo separaba de los labios ajenos para besarlos levemente.

            El beso no fue correspondido los primeros segundos ya que JinKi no podía salir de la impresión, pero después, llevó sus manos a la nuca del otro e intensificó aquel suave beso. Cuando se separaron no hubo palabras, no hacían falta, simplemente mirándose a los ojos, supieron qué era lo que el otro pensaba.



4 comentarios:

  1. Empalagoso, dulce, tierno, adorable... Un día terminaré vomitando arco iris con estos drabbles tuyos >w<

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajajajjaaj XD Creo que si todavía no lo he hecho yo que los estoy escribiendo... a vosotras todavía os queda un poco XD

      Eliminar
  2. vsysbnjdbnDjsd tenia ganas de Jongyu y apareces como un hada con este drabble *0*

    No sé, te amo ._.

    ResponderEliminar