martes, 4 de marzo de 2014

Noche de Tormenta

Noches de Tormenta

            Llevaba lloviendo en Seúl desde algunas horas, pero ahora había comenzado a apretar y el único sonido que se escuchaba era el de la lluvia golpear de forma incesante contra el asfalto y contra los cristales de las ventanas. Poca gente se aventuraba a salir a la calle con la que estaba cayendo.

            JunMyeon se levantó de la silla de su escritorio y se estiró hasta que algunos de sus huesos crujieron. Llevaba horas estudiando sentado en aquella silla que había sido fabricada por el mismísimo demonio. Se acercó a la ventana y miró a través del cristal. No se veía absolutamente nada, el agua difuminaba la visión. El tifón que los llevaba azotando desde la mañana cada vez era más intenso.

            En ese momento una gran luminosidad surcó el cielo y JunMyeon se apartó de delante de la ventana rápidamente, segundos después se escuchó el trueno tan cerca que el chico tuvo que taparse los oídos por el estruendo. La luz de su flexo se apagó de pronto y la estufa hizo lo mismo. Afuera, las luces del vecindario se iban apagando poco a poco. Parecía que el rayo había ido a parar justo en el transformador que abastecía a toda aquella zona.

            JunMyeon suspiró y se resignó a que no podría seguir estudiando. Fue a tientas hacia la cama y se tumbó en ella dispuesto a dormir un poco. Su espalda no había hecho más que chocar contra el colchón cuando la puerta de su habitación se abrió y la luz procedente de un móvil lo dejó ciego unos instantes.

            ―Hyung… ―escuchó que lo llamaban e inmediatamente supo quién era.

            ZiTao era el hermano pequeño de YiFan, el chico con el que compartía piso. Había ido a visitar a su hermano durante unos días, pero el otro se había ido a la universidad temprano y todavía no había vuelto porque el metro estaba cortado y los autobuses no circulaban debido al tifón. Por eso se había pasado todo el día allí con aquel chico y por eso este, asustado, había ido hacia él.

            ―¿Qué pasa, ZiTao? ―preguntó esbozando una sonrisa tranquilizadora.

            El chico cerró la puerta de la habitación y guiado por la luz del móvil, se dirigió a la cama en la que JunMyeon se había ahora incorporado y se sentó cerca de él.

            ―Estoy asustado. No me gusta la tormenta ―contestó en un coreano macarrónico que al mayor le había parecido encantador desde que lo conoció.
            ―¿Quieres quedarte aquí conmigo? ―preguntó. El chico asintió―. Entonces vamos a aprovechar para conocernos mejor.



2 comentarios:

  1. Pero que liiiiiiiiiiindo es el SuTao :3 Quiero más! (Jo, quiero SuTao, quiero TaoBaek, quiero KaiLu, quiero KrisKai, quiero de todo!!! Así no se puede Q_Q)

    Un saludo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Son cuquis ^^
      Tranquila, yo también quiero de todo, por eso lo estoy escribiendo XD

      Eliminar